La Comunión con Dios. Compilación de Libros.

Por Laura Josefina Salazar Tovar

La comunión con Dios es impotarnte y en esta compilación de libros te ayudaré a llegar a ella. Es importante que sepas que cada Libro te capacita para poder lograr esa comunión. Los temas que tocamos aquí son: La oración Contemplativa y su Relación con la Comunión con Dios; Satanás sus mentiras , sus intigas y sus argucias; Tratado sobre el pedón; La salvación de las almas; El amor.

• Idioma: Español
• Editorial: Laura Josefina Salazar Tovar
• Fecha de lanzamiento: 26 feb 2024
• ISBN: 9798224061570

Vista previa del libro

LA ORACIÓN CONTEMPLATIVA Y SU RELACIÓN CON LA COMUNIÓN CON DIOS.

Santiago de Querétaro, Querétaro, México a 04 de Enero del 2021.  9:28 p.m.

Hoy he dictaminado a mi hija Laura Josefina Salazar Tovar que comience a escribir un Libro en el cual enseñe a orar como ella. Dejo sustento de que soy Dios y vivo en ella.

Jesús Misericordia Divina

PRÓLOGO

Las vicisitudes de mi vida me obligaron a vivir dificultades que me llevaron a refugiarme en Dios. Hoy hago saber que esta vida que tengo es plena. llena de alegría y una sumisión total a Dios.

Las almas que pecan gravemente se apartan de la gracia y al hacerlo no reconocen la voz de Dios. La oración es parte importante en la vida de las personas, sin embargo, es necesario que comprendan que una oración vacía no sirve. La contemplación es importante e imprescindible para hacerla. Cada vez que hago oración me uno a Dios y la hago vida. Hacer vida la oración es importantísimo para tener comunión con él. Si no hay oración y esta no va acompañada de contemplación la comunión con Dios se pierde. Hacerla vida es algo que enseñaré.

Tengo experiencia con este tipo de oración. Cuando oro me lleno del dolor de Dios y/o a la vez de su alegría. Vivir y hacer vida la oración es una gracia que conlleva entrega y docilidad. Amar es necesario para poder vivirla. Amen y no olviden que quien ama ha conocido a Dios. (1ª Juan 4:7-8).

Laura Josefina Salazar Tovar

ORACIÓN Y SU FUNDAMENTO.

La oración se basa en la comunión con Dios. Cada vez que se ora es reconocer que Dios vive y que cuando lo hacemos él escucha nuestra plegaria, y si es bien hecha nos entrega una respuesta a ella. Cada vez que se ora se debe saber que la meditación es importante, es saberse amado por Dios, así como es escuchado también.

La oración debe ser concisa y llena de una profunda interpretación. Es unir el alma a Dios y contemplar su majestad. Al orar se debe realizar una oblación (ofrenda y sacrificio) y lograr que Dios oiga el anhelo de nuestro corazón.

Dios vive y está presente en cada alma fiel. El testimonio de ello es que nos ha dado a su Espíritu Santo que clama en lo profundo de nuestro corazón con gemidos inefables (Romanos 8:26). Cuando se ora se reflexiona de manera profunda y se hace vida la súplica que dirigimos a Dios. Amar a Dios implica un compromiso importante, es reflejar con tus actos que Dios vive y que ese amor que nos da es la prueba de que nos ama. Quien ama a Dios debe saber que Dios vive y da testimonio de ello a través de sus actos generosos.

Dios vive y esté presente en el Mundo. Cuando oras te unes a él y logras que esa comunión con él sea perfecta. No hay comunión con Dios si la oración es vacía. Para poder lograr una comunión perfecta se requiere de una entrega total. Déjate amar por él. Reconoce que su amor es grande y maravilloso y que este te ayuda a transformar tu vida.

Ora con constancia. Únete a él y ruega por todo el Mundo. No te olvides que el Mundo está necesitado de oración y si la haces bien lograrás que muchas almas se salven.

ORACIÓN Y COMPROMISO.

La sumisión es importante para poder lograr la comunión con Dios. Dios vive en cada alma que es fiel, sin embargo, deben saber que esa fidelidad debe ser demostrada. No hay alma que diga yo soy de Dios y viva apartada de la gracia. La gracia se consigue a base de hechos (Santiago 2:14).

Un amor se demuestra con constancia, dedicación y servilismo. Quien ama necesita demostrarlo a través de los gestos y las obras suyas. Hay almas que dicen que aman, sin embargo, el verdadero amor proviene de Dios. La perfección del amor solo se alcanza unida a Dios.

Dios vive y para honrarlo necesitamos demostrar el amor que sentimos por él. El compromiso con Dios debe ser unirnos a él logrando una comunión perpetua a través de la Oración. Quien ora y se une a él puede lograr que sea bendecido el Mundo.

Dios vive y al vivir en cada uno de nosotros nos permite sentir su presencia de muchas formas: a unos con paz y regocijo y a otras les da carismas. Los carismas son regalos que da el Espíritu Santo por la lealtad de sus hijos. Extenderme en este tema no es mi propósito, sin embargo, quiero decir que no hay Oración buena si no permites que el Espíritu Santo te guíe (Romanos 8:26). Esto se debe a que el amor que hay en él te permite reflejarlo en cada súplica que haces de tal modo que al orar tu espíritu se une al espíritu de Dios para clamar de mejor manera y conforme a la voluntad de Dios.

El amor de Dios está presente en cada alma, pero se manifiesta si tu aprendes a reflejar ese amor con tus obras de caridad. La caridad es importante para dar testimonio de él.

OBRAS DE CARIDAD.

Una obra de Caridad debe ser reconocida por la bondad de Dios, sin embargo, para lograrla se necesita una unión con Dios de amor, esto es que el amor se refleja en cada obra que hacemos. La unión con Dios debilita al demonio porque Dios vive, esto quiere decir que solo por la bondad de Dios se manifiesta su amor en cada obra y se da sustento de que ese amor proviene de él. Dios ama y ofrece su amor de diversas maneras, una de ellas proviene de le entrega que le hacemos.

Por medio de él se percibe su presencia y se da testimonio de él. La Caridad no sirve si no va acompañada del amor de él. Hay almas que dicen honrar el nombre de Dios, pero no dan mérito a sus obras porque las hacen solo para ser reconocidas. No, el amor no es así. El amor no se vanagloria de nada, se sostiene de la obra de Dios. Esto quiere decir que es el amor de él el que da esa bendición. No hay sensatez en las almas si no reconocen que para dar Caridad se necesita del amor de Dios porque ese amor solo se prodiga unidos a él. Ámense unos a los otros dice la palabra de Dios (Juan 15:12). Esto quiere decir que el amor de Dios se da sin pedir nada a cambio. Ese amor de él conlleva un compromiso explícito que es darlo en Caridad. La Caridad proviene de