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Asonante 3. Ficción
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Libro electrónico94 páginas1 hora

Asonante 3. Ficción

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Asonante 3, a pesar de estar dedicado a la ficción, es el pretexto perfecto para reflexionar sobre la realidad. En este compendio de textos destacados de los talleres de creación literaria de la región Centro-Sur del Tecnológico de Monterrey, el lector encontrará el entendimiento de las realidad de los estudiantes a través de sus ficciones.
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento5 may 2023
Asonante 3. Ficción

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    Asonante 3. Ficción - Marcos Emilio Bustos Flores

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    Acerca de Editorial Digital

    Asonante 3

    Ficción

    Marcos Emilio Bustos Flores

    (compilador)

    El Tecnológico de Monterrey crea en 2010 su sello editorial con el objetivo de compartir con el mundo el conocimiento académico, científico y cultural, generado por la Comunidad Tec extendida e invitados académicos para lograr el florecimiento humano en el ámbito intelectual.

    A través del catálogo de obras se busca divulgar el conocimiento y la experiencia didáctica de la institución, al mismo tiempo que se apunta a contribuir a la creación de un modelo de publicación que integre las múltiples posibilidades que ofrecen las tecnologías.

    Con la Editorial Digital, el Tecnológico de Monterrey confirma su compromiso con la innovación educativa en beneficio de la sociedad.

    D.R. © Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, México 2023.

    ebookstec@itesm.mx

    Introducción

    Ficciona hasta que lo hagas realidad

    No estoy de acuerdo con quienes tratan a la palabra ficción como si fuera el antónimo de realidad. La ficción es parte de la realidad, así como los sueños son parte de la vida. Sí, ya sé que Don Quijote no existe, que Harry Potter nunca nació y que las sirenas marinas son producto de la imaginación. En cierta forma solo pertenecen al mundo de la literatura. Pero ese mundo tiene lugar dentro del nuestro. La literatura de ficción es solo un reino dentro de nuestra realidad.

    Pongámonos serios y seamos honestos: ¿Don Quijote no existe? ¿Alonso Quijano no es real? Sería ingenuo negar la existencia del ingenioso hidalgo solo por ser ficticio. Millones de personas hemos sabido de él durante siglos, su triste figura es alegremente célebre y casi todos sabemos de un lugar de la Mancha (aunque nadie quiera acordarse de su nombre).

    Harry Potter es punto y aparte. Si me paro en un salón de clases y pregunto la real lista de las reales capitales de los estados reales del México real, más de una persona dudará al decir sus nombres. No así si pregunto quién es Hermione Granger o el verdadero nombre de Lord Voldemort. Habrá quien me diga exactamente cuántos puntos se obtienen al capturar una snitch o la genealogía completa de los ministros de magia británicos.

    Lo mismo podemos decir de las legendarias sirenas que hicieron a Odiseo amarrarse a su propio barco. Existen hasta en el logotipo del café de la esquina. Son tan reales que por siglos se creyó que las sirenas eran asunto de no ficción. En realidad, la ficción es una cosa muy seria que inunda todos los aspectos de la realidad. Tanto así, que un servidor debería comenzar a amarrarse a su propio barco cada que pasa frente a un Starbucks para evitar entrar por un pumpkin spice latte.

    Y voy más lejos: los europeos medievales creían que del otro lado del océano se escondían las tierras maravillosas (pero ficticias) de Antilia y Brasil. Así que cuando llegaron a América, su ficción se volvió realidad. La hicieron realidad. No encontraron oro ni animales fantásticos, pero ellos decidieron hallarlos. Así que les pusieron nombres fantásticos a las islas pisadas, se embarcaron en la búsqueda real de la ficticia ciudad del Dorado y se maravillaron con la fauna local. Tal vez la Antilia y las Antillas no son lo mismo, pero una no existiría sin la otra. Si América fue inventada, como dijo Edmundo O’Gorman, entonces vivimos en el continente de la ficción.

    La ficción puede ser una premonición o un plan del futuro. O por lo menos ser un miedo de la realidad que está por venir. Así lo comprobaron los radioescuchas de La guerra de los mundos de H.G. Wells cuando creyeron estar siendo invadidos por los extraterrestres. Así es la relación entre la ficción y la no ficción. La ficción no es el antónimo de la realidad, sino una parte de ella donde las posibilidades son más amplias, coloridas, fluidas y flexibles. En cierta forma, la ficción es la parte más brillante de la realidad, la zona VIP, tal vez hasta la más real.

    No hay que ir muy lejos para encontrar pruebas de todo ello. Este tercer número de Asonante, dedicado a la ficción, es el pretexto perfecto para reflexionar sobre la realidad. Unas páginas más adelante encontraremos el cuento Zoológico de Omar Pérez que nos recuerda que todos los seres humanos somos también animales, una realidad innegable, aunque queramos sentirnos superiores. En La lluvia que no es o dejó de ser, Gibran Daher hace un viaje rulfiano al pueblo ¿real?, ¿ficticio? de Bartolomé de las Casas. Es un pueblo que podría ser cualquier pueblo, arrasado por la modernidad y en conflicto con su propio pasado. ¿Acaso eso no es parte de la realidad? O incluso el fantasioso cuento de Aura Jasso, Recuerdos congelados, nos habla de esos momentos en que decidimos congelar el tiempo, a sabiendas de que tarde o temprano se nos escapará como el agua por entre las manos. La ficción es también una vía para entender la realidad.

    Etimológicamente, ficción viene del latín fingere, que significa fingir, pero también dar forma, amasar, modelar o inventar. ¿Acaso no nos la pasamos haciendo todas esas cosas sobre la realidad? Le damos forma a nuestra vida, amasamos nuestro destino, modelamos nuestros proyectos y nos inventamos a nosotros mismos. Ficción viene de la misma raíz que la palabra inglesa fake, que me hace recordar una frase importantísima para cualquier escritor: fake it ‘till you make it (finge hasta que lo logres). O tal vez, como lo demuestran estos textos, debería traducirse así: ficciona hasta que lo hagas realidad.

    Por mientras, podemos ir por un café con las sirenas para leer sobre Harry Potter y tratar de recordar el nombre de aquel lugar de la Mancha. Que nadie nos diga que la ficción es algo que no existe.

    Jorge Tirzo

    Director artístico de la Colectiva de Creación Literaria

    Tecnológico de Monterrey, Campus Ciudad de México

    1. Zoológico

    Omar Pérez

    Era un error, no podía haber otra explicación. Solo un simple y estúpido error, un mero descuido; una interrupción en el pensamiento consciente, dominado súbitamente por el instinto

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