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Yo Encontré... ¡Una Perla!: Nueva Edición
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Libro electrónico198 páginas2 horas

Yo Encontré... ¡Una Perla!: Nueva Edición

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Esta obra es una recopilación de mensajes, de reflexiones y poemas coleccionados a través de los años. En ella la Hna. Persia comparte sus experiencias con la esperanza de que de alguna manera cada lector también pueda descubrir en la Palabra un maravilloso tesoro.
IdiomaEspañol
EditorialPalibrio
Fecha de lanzamiento29 ene 2020
ISBN9781506530970
Yo Encontré... ¡Una Perla!: Nueva Edición
Autor

Persia N. Javier

Persia N. Javier, nació un 14 de enero en la ciudad de San Cristóbal República Dominicana y creció bajo las alas de una pareja que dio testimonio de amor y de entrega al Servicio del Evangelio de Jesucristo. Sus padres Rev. José Javier Alcántara y su madre Hna. Concepción Peña de Javier a quien todos llamaban “Sion” Siendo casi una adolescente, se desempeño como Superintendente de Escuelas Bíblicas en la iglesia donde nació y durante ese periodo creo el Grupo Dramático Enmanuel, que se presentaba en diferentes lugares y casi todas las obras presentadas salían de su pluma. Su corazón inquieto no descansaba, publico su primer ensayo en 1983 bajo el nombre de “Una Perla de Gran Precio”. Una obra sencilla que narraba sus vivencias y alguno que otro poema que ya había escrito. Entre otras cosas trabajo como Presidenta de la Sociedad de Damas, Secretaria Nacional de Escuelas Bíblicas de AIC (1989) y fue una fiel colaboradora del Instituto Teológico de AIC en sus eventos. Años mas tarde obtuvo el grado de Alto Honor, terminando su 3er Año en Teología en el Instituto Bíblico de AIC en la ciudad de Nueva York.

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    Yo Encontré... ¡Una Perla! - Persia N. Javier

    Mi primer Ensayo….

    Mateo 13:45:46

    Una Perla De Gran Precio..

    Era el año 1983, y en mi época veintiañera mi corazón inquieto y soñador se atreve a realizar un sueño. Fue un salto atrevido, sin recursos, sin apoyo pero después de muchos inconvenientes me atreví a publicar lo que fue y sigue siendo para mi Un Ensayo. Realmente distaba mucho de ser una obra literaria en todo el sentido de la palabra. ¡Pero fue mi primera obra! -Se llamaba Una Perla de Gran Precio, se que fue de bendición a los pocos o los muchos que creyeron en mi, doy gracias a Dios por ellos.

    Eran solo vivencias de una joven veinteañera con muchas ilusiones y muchos deseos de alcanzar el propósito para el que había sido creada. Éxito a la verdad no he tenido ninguno, pero la satisfacción del deber cumplido me empuja a mantenerme de pie.

    Han pasado muchos años y en mi siguió creciendo el anhelo de continuar trabajando con la esperanza de algún día compartir con otros las maravillosas enseñanzas que salían de lo más profundo de mi corazón y que fluían de la pluma que hoy con temor reverente me atrevo a asegurar que han sido inspiradas por el Espíritu Santo de Dios.

    He retomado mi sueño, he vuelto a recopilar todas esas letras, unas hechas poesías, otras reflexiones sencillas y algunos salen de bosquejos de los cuales he tenido la oportunidad de exponer como maravillosos mensajes que el Señor me ha permitido llevar a diferentes congregaciones, conforme a como El Espíritu Santo de Dios lo ha querido y con la seguridad de que todas y cada una de estas palabras provienen de El.

    Te invito a caminar por las páginas de este pequeño ejemplar y mi oración a Dios que cada día reconozcas a través de su Palabra que eres como esa Perla que Dios ha hecho para honra y Gloria de su nombre.

    ¡Dios te Bendiga!

    Estrés…?

    Mateo 6:25

    Siiii! – Creo que eso es lo que he estado sintiendo durante todo este tiempo. Tal vez porque en los últimos años escuchamos hablar mucho del estres y a veces he creido que es una nueva manera de llamar la ansiedad o la desesperación. Hoy día es e es un diagnóstico clínico para grandes y chicos…! me pregunté una vez que estará pasando? –

    Como es posible que este es un diagnostico clínico que no se limita ni a edad ni a sexo. Todos de alguna manera estamos estresados, tal vez por estar estresada fue que llego a mi mente el tema del pasaje que aparece en Mateo 6:25 que nos habla del Afán y la Ansiedad – descubri alli que el estres no es nada nuevo, esto es tan grave que si lo dejamos tomar control de nuestra mente, se convierte en una enfermedad que destruye el sistema nervioso y que lamentablemente puede llevarnos a una inminente depresion; y aunque no lo creas, lo que ciertamente está ocurriendo es que el enemigo lo esta utilizando como un arma contundente para desenfocar al hombre, alterar sus emociones y apartarlo de alguna manera del Señor.

    Son muchos los que han sucumbido ante el diagnostico del Stress o en su defecto de la depresión. No estoy diciendo que clínicamente estas enfermedades no existan, no estoy capacitada para ello, pero lo que quiero señalar de manera personal es que el remedio para ellas puede estar en nosotros, que no podemos dejar que ellas nos ganen la batalla. Posiblemente los profesionales de la medicina difieran de mi criterio, pero no lo digo por decirlo, lo he vivido y afortunadamente puedo dar testimonio de ello.

    Te reitero querido lector, que el estrés no es nada nuevo, el Apóstol Pablo en su carta a los Filipenses (4:6) les dice: "por nada estéis afanosos sino sean conocidas vuestras peticiones delante del Señor con toda oración y ruego…" es decir, no cojan estrés, mejor pónganse a orar. Lo que pasa es que nos estamos dejando arrastrar por nuestras situaciones, por el tiempo y las circunstancias y nos estamos olvidando ciertamente de las promesas que día a día encontramos en la Palabra del Señor

    Por eso más que sumar preocupación o estrés a tu vida, permíteme compartir contigo este momento, y hablemos de las riquezas del Señor; del médico por excelencia, del Único en quien puedes encontrar la medicina para tu mal.

    Hablemos de esas cosas maravillosas que encontramos en su Palabra y que nos hacen ser cada día más fuertes, olvidemos por un momento esa nueva enfermedad que esta acabando con nuestra vida relacional, con nuestras emociones y nuestra salud física y mental. Olvidate del Stress y hablemos de Cristo.

    El nos dice en el Salmo 46:10 Estad quietos y conoced que yo soy Dios… pero es mas difícil estarse quieto y esperar, que mantenerse en movimiento. ¿Verdad que siiii?

    Cuando nos toca esperar nos inquietamos, nos preocupamos y en la mayoría de los casos nos desesperamos; (¡díganmelo a mi!) -creo que Dios conociendo nuestra naturaleza nos manda con mucha ternura a estarnos quietos… a esperar. y a reconocer sobre todo que el es Dios y que está en control Pero esperar es ciertamente difícil.

    Ciertamente no es fácil; ha habido momentos de mi vida que siento estar como en un arresto domiciliario. Mi radio de acción evntualmente se ha vuelto tan limitado que en algunos momentos en que siento como si me asfixiara, he contado los días y por más de una vez me he atrevido a decirle al Señor por favor, ¿no permitas que este sea otro día más sin poder dar un paso hacia adelante…y sabes qué? – No pasaba nada!!!

    -Lo único que me ha podido sostener en este laberinto… fue descubrir que buscando Su Presencia cada día, las cosas son diferentes, Su Presencia hace la Diferencia… se convierte en compañía en los momentos de soledad, se siente, se disfruta, se vive!! – he entendido por qué era tan importante para Moisés que Su Presencia estuviera con El, prefiriendo no salir a ninguna parte si Jehová no se lo aseguraba. (Exodo 33:15) Por eso trato de aprovechar cada segundo para decirle al Señor. aunque afligida yo y necesitada. Yo se que Tu estas pensando en mi", (Salmos 40:17); y me he propuesto en cada suspiro darle a mi Dios una adoración, una alabanza…, sentir que esta cerca, a veces le digo no te veo Dios, pero sé que estas… Aleluya! – Deposito en las ansiedades y dejo de lado el estrés.

    Tu también puedes lograrlo, ¿quieres saber cual es el secreto? – pues fíjate: estar en la Presencia del Señor es hacer de nuestra vida un santuario…, es vivir una vida en santidad, (Fuera de toda religiosidad), es hacer de nuestro cuerpo un tabernáculo viviendo conforme al Espíritu Santo de Dios, de acuerdo con lo que dice Romanos Cap. 8:1, y no hay una condenacion en ello. ¡Puede parecer difícil, pero no imposible!

    ¡Recuerda…! - El objetivo del tabernáculo era permitir que el Señor morara en medio de su pueblo (Ex. 25:8) y procurar a los hombres pecadores un medio de comunión constante con el Dios Santo (Ex. 29:42:46). En el Antiguo Testamento vemos como la Presencia de Dios se manifestaba al sacerdote y el sacerdote informaba al pueblo lo que Dios le había dicho, esto era en el viejo pacto; - Pero nosotros ya no vivimos bajo el viejo pacto, porque tenemos a Jesucristo nuestro Sumo Sacerdote y mediador de un mayor y mejor pacto, establecido sobre mejores promesas (Heb. 8:6) un pacto de redención donde no se hace necesaria la presencia de un intermediario para llegar a El, sino que tenemos acceso directo al Padre por medio de su Hijo Jesucristo, quien tomó tu lugar y el mío ofreciéndose en sacrificio una vez y para siempre. ¡¡Gloria a Dios!! – Tu y yo podemos hacerlo! – es asunto de comunicación.

    Cuando estamos ansiosos, cuando sentimos que nos desesperamos y de repente queremos salir huyendo. Es bueno relajarse un momento, respirar profundo, hablar con Dios, meditar en El y sentir……

    Siente su Presencia; El esta allí esperando que corras a sus brazos y le digas como te sientes, dile que ya no puedes más y derrama tus lágrimas en su regazo y… cuando hagas esto…. ¡Te sentiras mucho mejor!

    ¿Valdrá la Pena …?

    Porque nada hay imposile para Dios. Lc. 1:37

    En la lectura anterior hablaba de como entrar y disfrutar de la Presencia del Señor, de como hace una diferencia en tu vida, y cuan asequible está para nosotros, ¿pero es probable que en este momento tu no sientas el deseo de intentarlo siquiera y sentada o sentado en esa silla te preguntas si acaso Valdrá la pena…? – tal vez piensas y recuerdas cuantas veces lo has intentado y temes por los nuevos resultados.

    Sin embargo, yo me atrevo a asegurarte que ciertamente es posible, porque al aceptar el sacrificio de la cruz, nos identificamos con Jesús de tal manera que aprendemos a caminar en Sus pasos sin miedo a tropiezos. No hay nada imposible para el y ciertamente el nos ha enseñado a creer lo que no vemos, porque El llama las cosas que no son como si fuesen (Rom. 4:17).

    Para disfrutar de la presencia de Dios tenemos que dejar de ser nosotros y esperar que Dios tome el control absoluto y total de nuestras vidas, que ya no sean nuestros pensamientos sino los de El, que no sean nuestras palabras sino las de El. Cuando Dios hace presencia en nuestras vidas, ¡nuestro estilo de vida tiene que ser diferente! –pero para bien, el convierte nuestro lamento en baile, hay gozo, hay alegría hay nueva vida!

    Nada de lo que podamos hacer o decir tiene mayor importancia que lo que realmente debemos reflejar.

    La Presencia de Dios es aquella que se convierte en compañía… aquella que llena tu entorno, que te hace sentir segura y te da la fortaleza para continuar…. ¡Te invito a entrar en Su Presencia y te aseguro que tu vida será diferente! – Porque para Dios no hay nada imposible.

    ¡Realmente Vale la pena!

    ¡Como Viendo al Invisible!

    Hebreos 11:23-27

    Hace algunos años estábamos grabando para un programa de televisión y nos dimos cuenta que cuando fijábamos el lente en una imagen, todo su entorno se degradaba, esto no lo sabia, nunca habíamos hecho esto. A mi me llamo la atencion. Creo que es lo mismo que nos pasa cuando fijamos la vista en algo en particular, todo nuestro alrededor se vuelve sombra y nuestro punto de enfoque se vuelve aun más perceptible.

    El Apóstol Pablo en su carta a los Filipenses expresa cual es su verdadero enfoque. EL dice, "prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús" (Fil. 3:14) – El estaba seguro, estaba enfocado, porque dice (v.12).. tratando de asir aquello para lo que fui llamado. Ese debe ser nuestro enfoque, cuando servimos al Señor con devoción, con anhelo, con entrega, no existe para nosotros otro blanco.

    Nuestra fe debe ir en aumento, nada debe afectarla. Hebreos 11:24 habla acerca de Moisés, nos habla de su fe, de su entrega, de su enfoque. El decidió, antes que ser llamado hijo de Rey, ser igual que sus demás hermanos, quiso ser uno más del pueblo, porque su enfoque era imperecedero. Consideró como mayor tesoro el vituperio de Cristo, porque tenía puesta su mirada en el galardón, que es el mismo que Dios te ofrece el día de hoy.

    Moisés se sostuvo mirando al invisible, no le tuvo miedo al Faraón y su lucha fue constante y por su fe pudo sacar al pueblo de Egipto. Pero su fe no acabó allí, esa misma actitud de fe la mantuvo todo el tiempo, el sabía en quien había creído.

    El estaba guiando a un pueblo que mas que atemorizado era un pueblo desagradecido, y hubo un momento en que ellos, viéndose casi alcanzados por el Faraón y su ejército culparon a Moisés y le dijeron por que no nos dejaste seguir en Egipto, estábamos mejor allá siendo humillados por ellos, ahora vamos a morir.. y Moisés les dijo "no temáis y ved la salvación de Jehová, a estos egipcios que veis ahora nunca mas le verán… Jehová peleará por vosotros y vosotros estaréis tranquilos"

    Éxodo 14:13-14

    A Moisés no le había sido revelado lo que iba a pasar, pero el estaba seguro de que no había equivocado la mirada, el caminaba sabiendo que quien guiaba sus pies era Jehová Dios de los ejércitos. Para muchos era solo un lugar de destino, una meta, pero para Moisés… era el Blanco perfecto.

    Una Certeza de Fe

    Hebreos 11

    Siempre me ha gustado mucho escribir, desde niña llenaba mis cuadernos con letras y más letras. Al pasar de los años eso no ha cambiado, siempre que tengo a mano un lápiz, ¡trato de alcanzar un trozo de papel… y escribo y escribo y escribo!

    Pero no siempre ha sido inspiración y poesía, a veces eran muchas palabras, frases sueltas, algunas llenas de dolor, otras con muchas interrogantes. Porque me he caído muchas veces, a veces porque tropezaba, otras porque de alguna manera alguien me empujaba o porque me dejaba caer.

    Un dia descubrí lo que dijo David en el Salmo 118:13 me empujaste con violencia para que cayese… pero me sostuvo Jehová – así es; digo lo descubri porque a veces leemos y no entendemos, pero que ese dia cuando lo descubri estaba en el piso porque me habian empujado. – Y Jehová me estaba levantando! ¡Aleluya! - sus manos estuvieron siempre extendidas para ayudarme, y es por eso que le creo

    En momentos como ese aprendí a creerle a Dios – El es lo único verdadero, lo único que pudo

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