AMLO PRESIDENTE: MEXICO, LO QUE TENIAMOS Y LO QUE NOS QUEDO

Por J. JESUS MARTINEZ VELAZQUEZ

NACI EN SILAO, GUANAJUATO Y VIVO EN VILLAHERMOSA TABASCO DESDE 1964...CON 50 AÑOS DE LOCUTOR. OBVIAMENTE CONOZCO A DON ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR DESDE HACE MUCHOS AÑOS. AQUI LES PLATICO SUS INICIOS, SU LUCHA, SUS DESEOS, SU PASION, SU CONGRUENCIA Y SU APASIONADO NACIONALISMO....Y LES MUESTRO TAMBIEN LO QUE SE MANEJO EN LAS REDES ANTES Y DESPUES D

• Idioma: Español
• Editorial: Self Published Ink
• Fecha de lanzamiento: 22 ago 2019

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I

DEDICATORIA

Don Andrés Manuel López Obrador # PRESIDENTE, a su esposa Sra. Beatriz Gutiérrez Müller y a sus hijos José Ramón, Andrés Manuel, Gonzalo Alfonso López Beltrán y Jesús Ernesto López Gutiérrez.

Adán Augusto López Hernández

Gobernador de Tabasco (2019 – 2024)

Diputada Federal Tatiana Clouthier Carrillo

Ing. Alfonso Romo Garza

Jefe de Oficina de la Presidencia

Senador Porfirio Muñoz Ledo

Presidente de la Mesa Directiva

Senadora Ifigenia Martínez y Hernández

Senador Ricardo Monreal Ávila

Coordinador de los Senadores de Morena

Diputado Federal Mario Delgado Carrillo

Coordinador de los Diputados Federales de Morena

Senador Martí Batres Guadarrama

Presidente del Senado

Lic. Antonio Antollini

Coordinador de Jóvenes

Lic. Yerdickol Polevnsky

Presidenta Nacional de MORENA

II

GOBERNADORES DE MORENA

C. César Francisco Burelo Burelo

Delegado del CEN de Morena en Tabasco

Lic. Admón. y Capitán P.A. Manuel Merino Campos

Coordinador Estatal de Desarrollo Social en Tabasco (Morena)

Lic. Adán Augusto López Hernández – Tabasco

Lic. Claudia Sheinbaun – Ciudad de México

Lic. Rutilio Escandón – Chiapas

Lic. Cuitlahuac García Jiménez – Veracruz

Lic. Evaristo Hernández Cruz

Presidente Municipal de Centro, Tabasco

A las # benditas Redes: El Chapucero, Campechaneando, El Fisgón, Conexión MX y a millones de internautas y a hombres y mujeres que a ras de suelo luchaban por esta causa.

Gracias

Correo: [e-mail]

III

Agradecimiento

Lic. Don Arturo Núñez Jiménez

Gobernador del Estado de Tabasco

Lic. Francisco Peralta Burelo

Coordinador General de Comunicación Social

A mi esposa Elenita Fuentes

A mis hijos: Julia Isabel Martínez Fuentes y su esposo

Pablo Eduardo Ibáñez López y a mis nietos Miguel y Pablo Eduardo II.

Iván de la Cruz

Don Plutarco Hernández Pineda

Don Bernardino Sánchez Hernández

Mis Hermanos Toño, Gela y Beto y su familia

Y a los que quedaron en el camino

Mi oración y respeto por siempre

¡Dios los Bendiga!

Correo: [e-mail]

Lo Que Teníamos Y Lo Que Nos Quedó

Introducción

Estoy contento porque ganamos con Andrés Manuel.

Sé que es muy dura la lucha, yo quería saber la realidad de cómo quedó México después de la terrible época neoliberal.

Como él lo manifiesta, no va a ser fácil, porque esto:

¡Quedó roto en mil pedazos!

Su esposa y su familia, además del pueblo de México, somos sus aliados, y apoyaremos en la lucha que apenas empieza

Todavía en Prensa, Radio y Televisión, hay voces ajenas, pero espero que poco a poco se den cuenta que el único camino es la UNIDAD.

AMLO, tú tienes una cita con la Historia del 2018 al 2024, y para el 01 de enero del 2025, primero Dios, tienes una cita con tu esposa y tus hijos, para llevarlos al cine, ya en familia.

¡Es un compromiso pendiente!

¡Gloria a Dios!

¡Para Dios todo el Honor, el Poder y la Gloria!

J. Jesús Martínez Velázquez

12 de agosto del 2018

Presentación

¿Por qué?

Hay mil razones, o más bien, 120 millones de razones, y si agregamos a los mexicanos que viven en Estados Unidos, serían más.

Veamos algunas:

Porfirito había sido revolucionario y años después de que se acabó la Bola, vivía sólo en su casita muy humilde. Pero se le ocurrió sembrar en una macetita, una matita de mariguana. Un día llegaron los soldados y se lo llevaron preso, a Porfirito, no obstante sus casi 80 años de edad (Era muy amigo de mi papá, y por eso lo conocí) ¡Así le pagaron su Lucha!

¡Nosotros éramos pobres, pero no lo sabíamos! Yo nací en Silao, Guanajuato en ١٩٤٢ y desde esos años, la gente se empezó a ir al Norte.

Primero fue un acuerdo México-Estados Unidos, para ayudarlos, por la Segunda Guerra Mundial, y después por la Guerra de Corea, y luego, pues porque ya no había otra opción.

Cada año se iba un millón y regresaban a la mitad, pero los demás se iban quedando.

A mi papá y a mi mamá, les tocó la revolución, todavía no se habían casado, pero ellos nos contaban sus historias.

Mi papá se salvó de ser fusilado tres veces, decía que lo habían salvado las animitas del purgatorio.

Mi mamá nos platicaba que iban de pueblo en pueblo buscando que comer, y que a veces comían sólo un grano de maíz en todo el día.

La violencia y el miedo eran terribles, que había muchos cadáveres colgados en el camino.

Así recorrían de Silao a Acámbaro, en Guanajuato.

Mi papá y sus hermanas trabajaban en la hacienda, y un día, por la revolución, los patrones se fueron y mi papá se quedó de encargado en la hacienda, pero no se quiso quedar con ella. Cerró todo, y sólo se llevó una cómoda y una Virgen De Los Dolores.

Yo vengo de muy allá, tengo 76 años, papá era de 1880 y mi abuelita era de 1842 y murió en 1941.

Todavía cuando la Guerra Cristera, les toca a mi papá y a mis tías, acompañar a mi tío Crucito Morales, que era sacerdote, y por la persecución salieron huyendo y estuvieron viviendo en Pueblo Colo, cerca de Denver, en Colorado, Estados Unidos.

Cuando terminó la Guerra Cristera, se regresaron.

Entonces, me pregunto: ¿De qué sirvieron miles y miles de muertos? Si el país ahora está hasta peor que cuando Porfirio Díaz.

Mi tío Lico, hermanito de mi mamá, murió el día que ganó Vicente Fox la presidencia, y yo pensaba: Ojalá y se hubiera dado cuenta porque se suponía que ¡México iba a cambiar! Pero ¡NO! Siguió el neoliberalismo y la venta de lo que teníamos en todo su esplendor.

Mi tío Pepe, por la revolución, se fue jovencito a Estados Unidos y allá murió, en los Ángeles, California. Y yo me pregunto: ¿Por qué? ¿Qué pasó?

En 1950 acompañé a mi mamá a Salamanca, Guanajuato, porque quería que mi hermano Pepe trabajara en la refinería que recién habían inaugurado.

Yo recuerdo lo que dijo una señora: ¡Sí puede trabajar su hijo, pero cobran cinco mil pesos los del sindicato! ¡Cinco mil pesos en ese tiempo era muchísimo dinero! Y ahí acabó la historia.

Años después, mi hermano Pepe estuvo preso porque pasó de contrabando 10 pares de medias ¡Era delito Federal! Lo detuvieron, yo estudiaba Leyes en Guanajuato y fui a sacarlo a Ciudad Juárez, Chihuahua.

Me dijo un licenciado que le diéramos ¡Cinco Mil Pesos! Al Ministerio Público para que cambiara el delito, para que en vez de que fuera contrabando, fuera solo encubrimiento de contrabando para que tuviera derecho a fianza.

¡Cómo Rola La Lana En La Administración De La JUSTICIA!

Total, pagué y me lo traje a Silao. Medio año después, lo detuvieron y estuvo preso 6 meses, luego obviamente se fue a Estados Unidos. Allá falleció mi hermanito a los 83 Años de edad.

Hace algunos años vinieron a entregar un premio muy grande a dos señores de Guerrero. Ellos como campesinos y ecologistas, el premio lo ganaron por defender sus bosques. Pero con el premio, equivalente al Nobel, se los entregaron en la cárcel. Don Rodolfo Montiel y Don Teodoro Cabrera, ganadores del premio estaban presos. Se las voltearon y los privaron de su libertad por subversivos.

Pedro Jiménez Torres, amigo de Nabor Cornelio y de Andrés Manuel López Obrador, dice que ahora cualquiera grita, pero él, luchador activo de la Izquierda mexicana, desde muy joven supo de los miedos, de los golpes y de la cárcel.

Había que salir a pegar carteles o los programas de la propaganda en la noche y si veíamos a la policía teníamos que salir huyendo. Cuando caías preso, te trataban como si uno fuera subversivo o terrorista, y si estoy vivo, es de milagro.

Yo sigo vivo, muchos de mis amigos ya murieron, y yo me pregunto: ¿Por qué sigo vivo?

A Nabor Cornelio lo mataron en Teapa, en los ochentas. Pedro Jiménez Torres, vive en Teapa, Tabasco.

A principio de los años setentas se nos prohibió tocar en radio la canción con el Grupo Comanche Casas de Cartón.

En Guanajuato, como buen estudiante durante 6 años, me la pasé guardando la línea. Casi un año tardé cenando sólo una ollita de atole y dos tamales en el Jardín de San Fernando. Todos mis amigos me ayudaron, yo los recuerdo con mucho cariño y los quiero mucho. Es que a veces había chamba y a veces no.

Cuando yo era niño, todavía el campesino humilde saludaba a los ricos con: ¡Buenos días amo! o ¡Cómo está su merced!

Una vez me llevó mi papá a la fiesta del grito un 15 de septiembre, el no entraba a sentarse a las bancas del jardín, sino enfrente, en la banqueta, en el suelo. Compró unos cacahuates, comimos y veíamos de lejos la fiesta. Ellos venían de muy allá.

¡Y la Revolución se había bajado del caballo!

Cuando vives en lugares en donde se luchó por la Independencia, o donde se hizo más la revolución, parece que no, pero te va marcando, y aún más viendo tantas hambres y miserias.

El taquero por poco mata al Presidente

Una noche pasaron a comer tacos, ninguno llevaba dinero, iban a pedir y a comer y a salir huyendo. Y así fue, pero a dos de ellos los alcanzó el taquero y los puso contra la pared con el cuchillo en la mano. De no haber sido por otro que llegó y yo no recuerdo si le pagó al taquero o si le habló bonito y lo convenció; pero salvó a André Manuel.

Ese taquero yo no sé si viva, fue en la ciudad de México, pero esa noche por poco mata a Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México 2018 – 2024, yo conocí el hambre, él también, y sabe lo que se siente.

Cuando llegué yo a Tabasco en 1964, providencialmente, la maestra Rosa Moguel De Dios me cobijó, yo le ayudaba a hacer las credenciales en el PRI y ella me daba para mis tortas. También era yo secretario de lo Penal en el BUFETE JURÍDICO GRATUITO DEL PRI, con Edison Mateos Payró, Ramiro López Díaz y Consuelito Gaspar que era la secretaria.

En el movimiento del 68 me tocaba ir al reclusorio por las cartas que le mandaba Jesús Collado Barrera a su mamá. Yo las escondía en el zapato porque la situación estaba muy delicada.

Éramos de Izquierda, ¡Pero priistas! Todo era del PRI.

Cuando ingreso a la radio como locutor en 1969, todo era del PRI. Pero Tabasco era muy rico. Aquí se tomaba OLD PARR, BUCHANANS O JOHNNY WALKER, los petroleros cargaban relojes Mido chapeados de oro. Había mucho movimiento económico.

Mi pueblo era muy pobre, Silao, Guanajuato y de allá todos se iban de braceros.

Eran otros tiempos, los rateros para robar no te lastimaban, sólo te aplicaban el Dos de Bastos, o sea, que no sentías cuando te sacaban la lana. Es más, en México, iban primero al templo a pedirle a San Dimas, el buen ladrón, que les ayudara a robar, para que todo saliera bien.

En 1969, cuando ingreso a la Radio, pagaban mil pesos cada 10 días. No era uno rico, pero daba para comer.

Las Crisis

En 1976 la gente corría despavorida porque decían que iban a congelar las cuentas en los Bancos, y sacaban su dinero y lo llevaban en caja de cartón. El Dólar pasó de $12.50 a $18.00

En 1982 - 83 otra crisis. En 1983 no había ni pasta de dientes, ni medicinas, ni jabón. ¡México estaba en quiebra!

En 1987 otra crisis. Ibas a sacar dinero del Banco y te decían que te esperaras mientras otro depositaba, para pagarte tu cheque.

En 1994 – 1995 otra crisis. Decían que la más grande. Se perdieron 10 millones de casas en todo el país. Aquí me tocó a mí, y perdí todo lo que tenía.

La Coperacha

Por eso, y al ver que el pueblo estaba en la miseria, opté por invitar a la gente a que se hiciera una coperacha como la que hizo Don Porfirio Díaz.

Cuentan que el país se había quedado sin dinero, y que entonces el General Díaz llamó a los ricos y les dijo: Cooperen, porque esto ya se acabó. Además, al levantar nuevamente al país, los que ganan más son ustedes. Los ricos cooperaron generosamente y el presidente Don Porfirio Díaz, ¡salió del problema!

Cuando se sentó Don José López Portillo como presidente, y al ver que no había dinero, decidió también hacer una coperacha, e inmediatamente, los que asistieron empezaron a cooperar. El primero que sacó la chequera, fue un tabasqueño: Amadeo De La Fuente Lazo.

Pero… empezaron las críticas y Don José López Portillo, regresó el dinero.

Entonces, como yo había perdido todo también, incluyendo mi casa, y al ver al pueblo tan pobre, pues yo decidí moverme para que se hiciera una coperacha.

Escribí una carta, fui a la Radio, llevé copia a la Dirección de Gobierno, y salí a recoger firmas.

Luego las llevé a México y las entregue en la