El autocuidado físico suma cada vez más adeptos. Pero en la lucha por el tiempo dedicado a estos menesteres siempre hubo un ganador claro: el cuerpo, que con dietas, gimnasio y deportes recreativos se imponía sobre el rostro. Hasta que llegó la pandemia y el skincare –cuidado de la piel– se fortaleció e incluso sumó nuevos hábitos, desde largas rutinas de cuidado de la piel hasta yoga facial, masajes con rollers de jade y gua sha, entre otros.
Este cambio robusteció de forma notable a las marcas de cosmética nacional y promovió el nacimiento de nuevas. Lo que sucedió en el país también se vio reflejado a nivel global. Según el estudio “Global Cosmetic Industry’s Beauty 2020-2030”, durante la primera mitad de 2020, el sector de cuidado de la piel