Esfuerzo y un poco de suerte son parte de la receta dispuesta por el Gobierno para alcanzar la meta de superávit primario fijado en el acuerdo con el FMI. El esfuerzo va de la mano de un estricto ajuste en las cuentas del Estado, sumado a una más severa conducta de freno en la emisión. El camino está surcado en el comienzo del año con un superávit financiero de $ 518.408 millones, producto de un superávit primario de $ 2.010.746 millones y del pago de intereses de la deuda pública neto de pagos intrasector público, que alcanzó los $ 1.492.338 millones. Economía aprovechó y sacó chapa de este resultado.
Los ingresos totales del Sector Público Nacional de enero alcanzaron los $ 6.147.232 millones (un alza del 256,7% interanual). La recaudación tributaria presentó un crecimiento del 256,9% i.a. explicado tanto por el desempeño del