Después de un 2019 complicado, las agencias de talentos de Hollywood se preparan para más incertidumbre
Pocos arquetipos de la industria del entretenimiento han permanecido tan consistentemente reconocibles como el del atrevido agente de talentos de Hollywood.
Para los graduados recientes de la escuela de cine, unirse a las filas de jóvenes cazadores de contratos era un puerto de ingreso para aquellos que querían entrar en el negocio del espectáculo pero preferían un ingreso estable a la frágil existencia de los asistentes de producción y los escritores en ciernes.
Pero 2019 quizá haya sido el año que rompió cualquier ilusión de estabilidad en el campo de la representación de talentos.
Una disputa en curso sobre las prácticas de la industria entre las firmas de gestión de talentos más grandes y el Writers Guild of America (Gremio de Escritores Estadounidenses o WGA por su sigla en inglés) se convirtió en un evidente atolladero, privando a las agencias de comisiones y honorarios de los que han dependido durante mucho tiempo, sin ninguna estrategia de salida a la vista. Los continuos intentos de las agencias de diversificarse en otros negocios, incluyendo el financiamiento de producciones de cine y televisión, tuvieron resultados mixtos. Incluso el participante de poder más famoso de la industria, Ari Emanuel, sufrió un gran revés cuando su imperio con sede en Beverly Hills, Endeavor, desechó
