México reporta 27 mil 480 accidentes anuales de acuerdo a los datos del INEGI. El principal problema de las mordeduras de serpientes no sólo reside en la probabilidad de muerte, sino en las secuelas ocasionadas a causa de los primeros auxilios, el mal tratamiento médico, los efectos adversos de los faboterápicos a cualquier nivel del organismo y la falta de antivenenos específicos en los hospitales, que contribuyen a complicar la atención en este tipo de accidentes. Además, en México no existen criterios uniformes acerca de las dosis de antiveneno que deben ser utilizadas, tanto en niños como en adultos. Por lo que es importante realizar una revisión de la literatura a nivel nacional e internacional con la finalidad de homogeneizar los criterios de diagnóstico y tratamiento de este tipo de accidentes.