Las quemaduras son lesiones de la piel que afectan a las dos capas: la epidermis externa, delgada, y la dermis más gruesa y profunda. Aproximadamente el 86% de las quemaduras son causadas por lesiones térmicas, mientras que alrededor del 4% son eléctricas y el 3% son químicas. Las quemaduras químicas se dividen en quemaduras ácidas o alcalinas. Las quemaduras por álcali tienden a ser más graves y provocan una penetración más profunda en la piel al licuar la piel (necrosis por licuefacción). Las quemaduras por ácido penetran menos porque provocan una lesión por coagulación (necrosis por coagulación). Las quemaduras eléctricas pueden ser engañosas con pequeñas heridas de entrada y salida, sin embargo, puede haber lesiones extensas de órganos internos o lesiones traumáticas asociadas. El manejo inicial principal será protección de la vía aérea manejar del dolor e hidratación.