Agricultura como hobby: La guía definitiva para criar ganado, cultivar sus propios alimentos y aprovechar al máximo su espacio

Por Dion Rosser

 La forma más antigua de generar ingresos de forma pasiva es todavía rentable al día de hoy: la agricultura como hobby. 

¿Su objetivo es generar suficientes ingresos de forma pasiva y disfrutar ilimitadamente al aire libre?

¿Siempre ha soñado con vivir en el campo, pero su trabajo no le permite salir de la ciudad?

¿Busca un trabajo a distancia que no le exija ser un gurú de la tecnología?

¿Le apasiona la agricultura, pero no ha agarrado una pala en su vida?

¿Quiere proporcionar a su familia productos de alta calidad, verdaderamente ecológicos y cultivados en casa?

La agricultura, el cultivo y la cría de animales nunca han sido tan fáciles como ahora. Con la tecnología moderna y el acceso a un sinfín de conocimientos y recursos, la agricultura no solo puede ser fácil, sino también rentable, incluso para alguien que nunca ha salido de la ciudad. De hecho, puede hacerlo desde la comodidad de su casa. Gracias a esta guía, usted podrá:

-  Obtener una explicación detallada de lo que se necesita para los diferentes cultivos y animales 
-  Convertirse en un experto en técnicas agrícolas, gestión de cultivos y cuidado de animales 
-  Evitar las trampas y los problemas más comunes gracias a los consejos sobre las mejores prácticas impartidas por expertos profesionales 
-  ¡Dé hoy el primer paso para un mañana fructífero!  

No necesita mucho dinero para empezar, pero necesita empezar con los conocimientos adecuados si quiere tener éxito.

 Consiga este libro ahora para aprender más sobre la agricultura como hobby. 

• Idioma: Español
• Editorial: Dion Rosser
• Fecha de lanzamiento: 8 ene 2022
• ISBN: 9798201530037

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Introducción

¿Qué le parece tener un huerto en su patio trasero donde pueda recoger hierbas y verduras frescas para cada comida? ¿Le gusta la idea de tener animales de granja como mascotas mientras disfruta de la leche y los huevos que producen? ¿Tiene un terreno baldío que le gustaría utilizar de forma divertida y gratificante? Si está interesado en cultivar sus propios alimentos, cuidar de sus propios animales o aprovechar al máximo la tierra disponible, ¡no busque más allá, la solución es la agricultura como hobby!

La agricultura no tiene por qué ser un trabajo difícil y tedioso que requiera vestirse con petos y tener acceso a cientos de hectáreas de tierra. Se puede ser un agricultor aficionado muy exitoso, incluso rentable, en una zona urbana con solo un pequeño patio para trabajar.

Las granjas de aficionados suelen ser granjas pequeñas, pero no todas las granjas pequeñas son granjas de aficionados. La definición técnica de una granja pequeña es aquella que genera menos de 250.000 dólares anuales. Dicho esto, incluso una granja que genere tan solo 1.000 dólares al año sigue considerándose una granja. Es esencial tener en cuenta que varias granjas de aficionados generan productos por valor de mucho más de 1.000 dólares. Sin embargo, no se les considera una pequeña granja, ya que no venden sus productos ni gestionan sus granjas como una actividad comercial.

Lo mejor de la agricultura moderna es que requiere un mínimo de atención, funciona muy bien como proyecto secundario y puede ganar dinero extra mientras sigue con su trabajo diario. Ahora bien, por muy fácil y accesible que parezca, hay algunas cosas muy importantes que debe saber antes de plantar o criar cualquier animal en su patio trasero.

No solo se trata de la eficiencia y de sacar el máximo provecho del esfuerzo que se dedica a la agricultura, sino también de lo que elija cultivar y del entorno que le rodea. Incluso si está pensando en un pequeño huerto que le proporcione fresas y pepinos frescos, querrá hacerlo de forma sostenible.

La cría de animales requiere la capacidad de atender adecuadamente sus necesidades si quiere darles una buena vida y disfrutar de los muchos beneficios de este tipo de agricultura. Invariablemente, como cualquier otra afición o trabajo, hay una forma correcta de hacer las cosas y una curva de aprendizaje.

Lo más importante de la agricultura como hobby es la pasión, ¡y la paciencia! ¿Le gusta el aire libre y el estilo de vida agrícola? Este libro para principiantes le introducirá en las distintas áreas de la agricultura, ayudándole a abordarlas de la forma más eficiente y responsable posible. Tanto si quiere cultivar su propia fruta o verdura, como si quiere criar animales, los siguientes capítulos le darán todos los fundamentos que necesita para empezar.

Recuerde que no es necesario tener un título en agricultura ni ser veterinario para ser un agricultor de éxito. Cíñase a los fundamentos que se enseñan en este libro y asegúrese de ponerlos en práctica religiosamente. Con dedicación, constancia y perseverancia, no tardará en recoger el fruto de su trabajo y lograr la autosostenibilidad.

Capítulo 1: ¿Es usted un agricultor aficionado?

Muchos apasionados y novatos de la agricultura como hobby se inspiran en un amigo o conocido con experiencia en el ámbito agrícola. Puede tratarse de alguien que tenga un buen jardín en casa y que le haya enviado algunas de las naranjas más sabrosas que jamás haya probado, junto con algunos huevos ecológicos. Un regalo tan delicioso como este puede hacer que la gente se ilusione con la agricultura y la cría de aves de corral por su cuenta.

Lo que no se ve son los meses y años de esfuerzo que se dedicaron a desarrollar el huerto hasta un nivel en el que realmente se pueden cosechar sus beneficios. Pueden ver las plantas y los animales en los que el agricultor ha invertido tanto tiempo y esfuerzo, pero no siempre comprenden el proceso que hay detrás.

Para los agricultores primerizos, las pérdidas durante el proceso de cultivo serán comunes. Antes de probar el fruto de su trabajo (literalmente), perderá muchos de los animales que ha criado o las plantas que ha cultivado. Aunque esto no pretende desanimarle, le hará pensar que, aunque las cosas no funcionen al principio, no significa que nunca lo harán. Invariablemente, hay una curva de aprendizaje por la que tendrá que pasar independientemente de lo que elija cultivar. Siempre hay algo nuevo que aprender, y cuanto más aprenda, menos perderá.

¿Qué tipo de recursos tiene?

Lo primero que hay que entender es el entorno que tiene a su disposición. Estúdielo cuidadosamente y evalúelo antes de invertir en él. Aunque no invierta mucho dinero para empezar, seguirá necesitando mucho tiempo, esfuerzo y paciencia para cultivar una granja con éxito.

Tiene que tener en cuenta tres recursos agrícolas esenciales: la tierra, el agua y el clima.

Tierra

Para los que se encuentran en campo abierto y tienen acceso a unos cuantos acres de tierra, hay que evaluar la calidad del suelo y la topografía del terreno.

También hay que tener en cuenta la «historia geológica» de la zona. ¿Se ha cultivado alguna vez en esa tierra? ¿Cuánto tiempo lleva el terreno sin cultivar? ¿En qué estado se encuentra el terreno al inicio? ¿Es completamente estéril o es un bosque denso? ¿Es un terreno rocoso? Todos estos son aspectos cruciales que hay que tener en cuenta si piensa cultivar plantas o criar animales.

Paralelamente, evaluar la calidad del suelo y la naturaleza del terreno es igual de importante para los agricultores urbanos que quieran emprender algo en su patio trasero. Sin una evaluación adecuada, será difícil determinar los nutrientes que necesita para que el suelo sea lo suficientemente fértil para un crecimiento de buena calidad. Por supuesto, podría plantar unas cuantas plántulas y ver cómo les va, pero se enfrentará a una mortalidad innecesariamente alta y a un crecimiento por debajo de lo normal.

Si está en una zona urbana, también puede considerar la posibilidad de plantar en interiores o de instalar un gallinero. Mantener las cosas en el interior le da un alto nivel de control sobre el medio ambiente, pero requiere un nivel aún mayor de mantenimiento y puede ser costoso de instalar.

Agua

Tanto si piensa cultivar plantas como criar ganado, el agua es un componente vital en la agricultura. Tiene tantos usos en una granja que nunca es suficiente. Además de su uso para los cultivos y los animales, necesitará agua para pulverizar, regar, limpiar y sanear. Es muy recomendable que su granja cuente con alguna forma de almacenamiento de agua para casos de emergencia.

No solo debe asegurarse de que la calidad del agua de su granja es buena, sino también de que no afecte a la calidad de las fuentes de agua superficiales cercanas (ríos, arroyos, estanques, lagos, etc.).

En un entorno urbano, es probable que tenga un suministro de agua que llegue a su casa. Compruebe la calidad del agua que tiene disponible. Lo más habitual es que el agua para los municipios se bombee desde fuentes subterráneas profundas. Depende de la profundidad a la que se encuentren estas fuentes, para encontrar agua mineral cristalina o agua dura inutilizable. Las autoridades urbanas suelen tratar el agua para hacerla segura para el consumo mediante la filtración y los productos químicos, pero estos procesos pueden dañar las actividades agrícolas.

Lo ideal es que, si tiene acceso a una perforación y bombea su propia agua, lleve a analizar una muestra para conocer la calidad del agua.

Algunos terrenos extensos tienen una fuente de agua natural, como un arroyo o un embalse cercano. Querrá asegurarse de que no hay nada que contamine el agua más arriba o en los alrededores del embalse.

Además de la calidad del agua, la cantidad también es importante. Debe de tener un suministro de agua constante durante todo el año. Tanto las plantas como los animales necesitarán distintas cantidades de agua en diferentes momentos, así que asegúrese de poder satisfacerlas para garantizar un crecimiento constante y saludable.

Clima

Si opta por el interior, esto no será una consideración importante, pero el clima es fundamental a la hora de crear una instalación en el exterior. Aunque la mayoría de las plantas cultivadas son muy resistentes y pueden sobrevivir a grandes variaciones climáticas, no solo quiere que sobrevivan. Quiere que crezcan de forma óptima.

Aparte de la temperatura, es bueno saber la cantidad media de precipitaciones que recibe su zona, el número de horas de sol y la duración