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Así en la Tierra como en el Cielo
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Libro electrónico268 páginas3 horas

Así en la Tierra como en el Cielo

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La creencia en la inmortalidad, sin duda, es prerrogativa de todas las religiones. Sin embargo, ninguno de ellos esclarece tanto sobre la vida más allá de la muerte como el Espiritismo. El Dr. Inácio Ferreira avanza un poco más en las noticias en torno a las realidades que, durante mucho tiempo, ignoramos

IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento22 jul 2023
ISBN9781088222928
Así en la Tierra como en el Cielo

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    Así en la Tierra como en el Cielo - Carlos A. Baccelli

    Así en la tierra como en Cielo

    Carlos A. Baccelli

    Inácio Ferreira

    Traducción al Español:      

    J.Thomas Saldias, MSc.      

    Trujillo, Perú, Marzo, 2023

    Título Original en Portugués:
    Assim na Terra como no Céu
    © Carlos A. Baccelli, 2013

    World Spiritist Institute

    Houston, Texas, USA      

    E–mail: contact@worldspiritistinstitute.org

    Sinopsis

    La creencia en la inmortalidad, sin duda, es prerrogativa de todas las religiones. Sin embargo, ninguno de ellos esclarece tanto sobre la vida más allá de la muerte como el Espiritismo. El Dr. Inácio Ferreira avanza un poco más en las noticias en torno a las realidades que, durante mucho tiempo, ignoramos. La Tierra y el mundo espiritual, desde un punto de vista ético e intelectual, pueden compararse con un espejo de doble cara, en el que las imágenes se mueven, se reflejan y casi se superponen. Sea en la vida o en la muerte, el espíritu es siempre el mismo en su esencia, y de él depende emprender esfuerzos de autosuperación que le permitan trascenderse a sí mismo.

    Sobre Inácio Ferreira

    Afortunadamente, siempre ha habido, como los hay, hombres y mujeres que, poniendo en práctica sus diversas potencialidades, consagraron su vida en favor de todos. No hace falta nombrar a tantos espíritus verdaderamente misioneros que pasaron, como lo hacen, por el mundo, haciendo el bien y promoviendo el progreso real de la humanidad, si no inmolándose en el amor al prójimo.

    Entonces, tuve la suerte de conocer a tal persona, en nuestro triángulo espírita de Uberaba. Durante más de 40 años de fraterna convivencia, en actividades de comunicación y expresión, a través de sus libros, nuestro La Llama Espírita y de los discursos doctrinarios, me complació mucho donarle el aporte sin pretensiones de un profesional de la lengua nativa. ¡De hecho, le proporcioné un subsidio que solo podía ser exigido por la mejora estética más que por el correctivo, ya que el ilustre escritor nunca dejó de tener la palabra justa y objetiva, en la expresión de un pensamiento libre, noble, valiente, sincero y, sobre todo, humanitario!

    Por lo tanto, me complace referirme aquí al inolvidable compañero de ideal, Dr. Inácio Ferreira, ahora de regreso a través del valiente logopsicófano de Uberaba, Carlos A. Baccelli, en esta excelente narración de sus actividades, durante más de 50 años, como Director Clínico del Sanatorio Espírita Uberaba –Departamento del Centro Espírita Uberabense –, desde el 31 de diciembre de 1919.

    A modo de mini biografía, cabe señalar que el Dr. Inácio Ferreira de Oliveira nació en Uberaba (MG), el 15 de abril de 1904, hijo del matrimonio Sr. Jacinto Ferreira de Oliveira y doña María Lucas de Oliveira, casada con

    Doña Aparecida Valicenti Ferreira y desencarnó el 27 de septiembre de 1988, en su ciudad natal. Médico egresado de la Universidad de Brasil, en Río de Janeiro, ejerciendo en Uberaba, se hizo espírita luego de observar, con sincera intención de investigación y celo, los diversos hechos neuropsíquicos – verdaderos dramas kármicos – relacionados con los enfermos hospitalizados en el meritorio nosocomio y comprobó la incuestionable eficacia de la Terapia Espírita para la curación de los desórdenes nerviosos seminales, contando así con la imprescindible colaboración de la médium doña María Modesta Cravo, así como del Jefe de Enfermería, Manoel Roberto da Silva, y otros diversos dedicados colaboradores, entre el personal médico y mediúmnico, el Dr. Inácio Ferreira realizó obras muy importantes de abnegación e inteligencia. De sus permanentes estudios y observaciones en este sector resultaron libros especializados en Psiquiatría a la luz del Espiritismo, que, aun hoy, son objeto de consulta, tanto en Brasil como en el exterior. "Novos Rumos à Medicina, en 2 volúmenes, y La psiquiatría ante la reencarnación, entre otros, son dos ejemplos destacados, además de este notable repositorio de experiencia y obra solidaria, titulado Bajo las cenizas del tiempo."

    En su inalienable crédito, ante la comunidad de Uberaba y ante la inmortalidad de Cristo, es importante mencionar la creación, por parte del Dr. Inácio Ferreira, del Hogar Espírita, inaugurado el 1 de mayo de 1949 – institución de apoyo y asistencia fraterna para niñas de escasos recursos, que el abnegado idealista construyó, con la participación de generosos donantes y de los jóvenes integrantes de la Unión de la Juventud Espírita de Uberaba, que continúa el benemérito departamento.

    Fausto de Vito

    Del Traductor

    Jesus Thomas Saldias, MSc., nació en Trujillo, Perú.

    Desde los años 80's conoció la doctrina espírita gracias a su estadía en Brasil donde tuvo oportunidad de interactuar a través de médiums con el Dr. Napoleón Rodriguez Laureano, quien se convirtió en su mentor y guía espiritual.

    Posteriormente se mudó al Estado de Texas, en los Estados Unidos y se graduó en la carrera de Zootecnia en la Universidad de Texas A&M. Obtuvo también su Maestría en Ciencias de Fauna Silvestre siguiendo sus estudios de Doctorado en la misma universidad.

    Terminada su carrera académica, estableció la empresa Global Specialized Consultants LLC a través de la cual promovió el Uso Sostenible de Recursos Naturales a través de Latino América y luego fue partícipe de la formación del World Spiritist Institute, registrado en el Estado de Texas como una ONG sin fines de lucro con la finalidad de promover la divulgación de la doctrina espírita.

    Actualmente se encuentra trabajando desde Peru en la traducción de libros de varios médiums y espíritus del portugués al español, así como conduciendo el programa La Hora de los Espíritus.

    Índice

    Capítulo 1

    Capítulo 2

    Capítulo 3

    Capítulo 4

    Capítulo 5

    Capítulo 6

    Capítulo 7

    Capítulo 8

    Capítulo 9

    Capítulo 10

    Capítulo 11

    Capítulo 12

    Capítulo 13

    Capítulo 14

    Capítulo 15

    Capítulo 16

    Capítulo 17

    Capítulo 18

    Capítulo 19

    Capítulo 20

    Capítulo 21

    Capítulo 22

    Capítulo 23

    Capítulo 24

    Capítulo 25

    Capítulo 26

    Capítulo 21

    Capítulo 28

    Capítulo 29

    Capítulo 30

    Capítulo 31

    Capítulo 32

    Capítulo 33

    Capítulo 34

    Capítulo 35

    Capítulo 36

    Capítulo 37

    Capítulo 38

    Capítulo 39

    Capítulo 40

    Así en la Tierra como en el Cielo

    Amigo lector:

    Jesús nos dijo, según las notas de Mateo, en el capítulo 18, versículo 18: "De cierto os digo, que todo lo que atéis en la tierra, será atado en el cielo, y todo lo que desatéis en la tierra, será desatado en el cielo."

    En el presente trabajo que les presentamos, buscamos demostrar que la Ley de Causa y Efecto, que nos protege en los caminos de la evolución, actúa tanto desde la Tierra hacia el mundo espiritual como desde el mundo espiritual hacia la Tierra.

    Por lo tanto, la Tierra y el Mundo Espiritual, al mismo tiempo, son áreas de cosecha y siembra, porque, en rigor, no hay solución de continuidad entre ellos en la elaboración del destino.

    La Tierra y el mundo espiritual, desde el punto de vista ético - y por qué no decirlo intelectual - puede compararse a un espejo de dos caras, en el que se reflejan y casi superponen las imágenes que se mueven en uno y otro, con solo una pequeña diferencia en sus manifestaciones.

    Ya sea en la vida o en la muerte, meros fenómenos visuales, el espíritu es siempre el mismo en su esencia indestructible, y le corresponde, en el cuerpo carnal o fuera de él, emprender esfuerzos de autosuperación que le permitan trascenderse a sí mismo. .

    ¡Concluiremos, por tanto, que no hay muerte, sino solo vida, y vida en abundancia, que se vuelve más abundante cuando logramos avanzar más allá de nuestros propios límites!

    Con mi abrazo fraterno, les deseo lo mejor de estas páginas.

    Inácio Ferreira

    Uberaba - MG, 28 de febrero de 2013¹.

    Capítulo 1

    Mucha correspondencia se acumulaba sobre mi escritorio, proveniente de diferentes regiones del mundo espiritual… ¡y de la Tierra! Durante mucho tiempo, debido a múltiples ocupaciones, había postergado la tarea de ponerla al día, respondiendo a los amigos que me escribían animándome a trabajar, a pesar de las críticas mordaces que me lanzaban los que no podían comprender mi esfuerzo sincero. La mayoría de los que escribieron mis cartas eran hermanos de todas las edades, jóvenes y mayores, cuyas palabras de aliento tocaron mis fibras más íntimas; sí, por ellos seguiría, olvidándome de los insensibles que, en sus opiniones sobre mí, llegaban a revelar cierta animadversión, vibrando para que yo desapareciera del escenario.

    Sin embargo, no estaba dispuesto a darles tanta alegría; mientras el médium soportara las presiones, continuaría molestándolos.

    Leyendo, con calma, una por una las cartas, resalté pasajes que cayeron como bálsamo en mi corazón:

    - Dr. ¡Ignacio, no te desanimes! Nosotros lo amamos...

    - Eres nuestro gato de mascota...

    - ¡Hemos aprendido mucho! Prosiga...

    - Espero trabajar contigo, allí, en el hospital...

    - Un beso de tu hija espiritual...

    - Recomendaciones a Manoel Roberto y a doña. Modesta...

    - Dr. Ignacio, estoy enamorada...

    - ¡Usted es tan lindo!...

    De vez en cuando, entre esas flores amorosamente envueltas sobre la mesa, me topaba con espinas en groseros mensajes:

    - Su trabajo es anti doctrinario...

    - Para con esa fascinación...

    - Estás confundiendo al movimiento espírita...

    - ¡Espíritu embustero y mistificador!

    Bueno, lo siento, pero no estoy dispuesto a darle correa a la pandilla de los contras; unanimidad es algo que nunca pretendí, más aun entre hombres adultos groseros conforme dije, ¡prefiero quedarme con mis hermanas, con quienes comparto mi corazón fraternal! El resto es el resto.

    Llamando al querido Manoel Roberto, siempre dispuesto, le dijo en tono de broma:

    - ¡Tu club de fans está creciendo, Manoel...! La verdad, no sé qué es lo que ven en ti, ¡debe ser tu nariz!

    - Doctor, es mi encanto...

    ¿Encanto de muerto...? Creo que el problema es una escasez ahí abajo, con todo el respeto, por supuesto, a los legítimos representantes del género.

    - No lo dejas por menos, ¿eh?

    - Estos de aquí, Manoel - le dije, juntando algunas de las decenas de cartas que me han dirigido -, las cenizas las incineras y las entierras en tierra árida, no sirven ni para compost: matarían a la inocente plantita que no tiene culpa de nada... Vibración negativa le prendimos fuego.

    - No hables así y no escribas, porque la gente podrá imitarte, imaginando una especie de simpatía.

    - La simpatía no lo es, pero las cosas malas deben ir al lugar que les corresponde: ¡el basurero! ¿Estás de acuerdo?

    - ¡Estoy de acuerdo, Doctor!

    Mientras el diligente compañero se encargaba de hacer los arreglos solicitados, empecé a redactar un texto, si no esbozarlo, en respuesta a los atentos destinatarios:

    "Mis hermanos y hermanas, ¡Jesús nos bendiga!

    Me mantengo firme y no pienso dar marcha atrás. Nunca he sido hombre de intimidarme por tan poco, más ahora que los enemigos no me pueden agarrar del cuello...

    Seguiré azuzando; lo que por cierto, seamos realistas, es mi derecho... Escribo y escribiré lo que quiera, y nadie tiene nada que ver con eso. Nunca he tenido el rabo atascado con el poder, más aun con el poder espiritista, que, para mí, es un cero a la izquierda. No me someto, no me vendo, no me corrompo, no hago política detrás del escenario, para estar bien con esto o aquello.

    Soy leal a mi conciencia y a la Doctrina. El día que tenga que dar otra obediencia, cambio mi fe. Siempre he aprendido que el Espiritismo es la doctrina de la libre expresión del pensamiento. No soy frívolo e irresponsable. Ustedes que me critican gratuitamente, muestren primero su hoja de servicios para la causa; hablaremos más tarde. Mientras estaba en el cuerpo, por amor al ideal, incluso abdiqué de mi condición médica. Y más: no me conectaría con un médium con el que no tengo afinidad... Nuestro respeto es mutuo. Prácticamente, lo conozco desde que era un niño y sé sus intenciones, pero no estoy aquí para defenderlo, él sabe cómo hacerlo por sí mismo.

    Agradezco las vibraciones positivas que me llegan de este Otro Lado, y el deseo que tengo es materializarme para perfilarme junto a ustedes, en sus labores doctrinales. Créanme: he hecho todo lo posible para no decepcionarlos, porque soy consciente de mis limitaciones; Soy un espíritu común, como cualquier otro... La desencarnación, lamentablemente, no me santificó. Nunca, en mis pronunciamientos, verbales o escritos, les dije que era un espíritu misionero... ¡Pobre de mí! Sin embargo, no se dejen engañar por los que pretenden serlo, a través de los instrumentos mediúmnicos que utilizan. ¡Raros son los espíritus verdaderamente iluminados, en contacto con los encarnados! Muchos son los mistificadores, en el cuerpo y fuera de él. En este momento, creo que el movimiento espírita está bajo una de las mistificaciones más bien articuladas del bajo mundo espiritual... ¡Que el que tenga oídos para oír, que oiga, y el que tenga ojos para ver, que vea!

    Necesito, en efecto, en aras de la verdad, confesarles que tengo problemas con respecto a la transmisión de mis mensajes, a través de la mediumnidad... El médium es consciente de esto. Ambos hemos hecho todo lo posible para aliviar las distracciones, remediando tales obstáculos. El engranaje perfecto no es fácil. La esencia; sin embargo, de lo que pretendemos, permanece ilesa. Algunos detalles tendrían que ajustarse un poco más. Quién sabe, tal vez dentro de 500 años, él y yo seremos capaces de hacerlo, ¿verdad? Sí, porque nuestra alianza, aunque no sea ahora, apenas comienza.

    Revelen, pues, nuestras mutuas faltas. El cerebro humano aun no está perfectamente adaptado a los contactos de naturaleza sutil, e incluso nosotros, los desencarnados, no superamos fácilmente la barrera de las diferentes Dimensiones. ¡Lo que podemos hacer es lo que se está haciendo!

    Queridos hermanos y hermanas, hemos encontrado en el Espiritismo el patrimonio más valioso de nuestra vida, desde muchas encarnaciones. Sobre todo, seamos honestos. Les pido permiso para citar un extracto del libro Los Mensajeros, de la escritura mediúmnica de Chico Xavier, en el capítulo 6, titulado Profundas advertencias:

    "Grandes masas golpean las fuentes del sagrado Espiritismo, con el único fin de manchar sus aguas. No son buscadores del Reino de Dios los que fuerzan sus puertas de esta manera, sino cazadores de intereses personales. Son ávidos de comodidad, amigos del menor esfuerzo, holgazanes y delincuentes en todas las situaciones, que desean escuchar a los espíritus desencarnados, temerosos de la acusación que su propia conciencia les dirige. La hiel de la duda invade el bálsamo de la fe en los corazones bien intencionados. La sed de protección indebida arremete contra los seguidores de la ociosidad. La ignorancia y el mal se entregan a las manifestaciones inferiores de la magia negra.

    ¿Por qué, hermanos míos? Porque no hemos podido defender el sagrado depósito, porque hemos olvidado, en nuestros trabajos carnales, que el Espiritismo es revelación divina para la renovación fundamental de los hombres, - resalté. Todavía no atendemos, como es indispensable, a la construyendo el 'Reino de Dios' en nosotros. '

    El Espiritismo solo tendrá sentido en nuestra vida si, cada día, nos volvemos mejores de lo que somos, de lo contrario, será solo una mera información que ilustra el cerebro, haciéndonos, tal vez, más vanidosos y personalistas.

    19

    No desaprovechemos la bendita oportunidad que se nos presenta, unos ante otros, de ser más humildes y generosos, para que la Doctrina del Evangelio del Avivamiento represente un parteaguas en nuestros caminos evolutivos. ¡Esta ha sido mi lucha, unir las maravillosas lecciones del Señor con las actitudes cotidianas! Gracias a Dios, en parte lo he logrado, ya que en mi corazón no existe una espesa nube de resentimiento, odio y rencor contra nadie. Solo quiero ser útil para los propósitos del Señor, nada más. ¡En mis oraciones silenciosas, le pido que me saque del proceso si estoy sirviendo como una piedra, tropezando con alguien! Lejos de mí la intención de ofender, de escandalizar, de provocar disensiones... Si no puedo servirle como lo he hecho, que me asigne a una actividad aun más oscura, en cualquier rincón olvidado del Universo. de buen grado, como se dice comúnmente en los rincones de Minas Gerais, me retiraré a mi propia insignificancia, donde estaba cuando pronunció mi pobre nombre, exhortándome a la lección.

    Parafraseando al gran Chico Xavier, ¡perdónenme por el Inácio Ferreira que todavía soy! Incluso parafrasear a Chico es una herejía, ¡perdóname! Somos tan imperfectos que ni siquiera podemos ser originales.

    Mis hermanos y hermanas, por ustedes, que comprenden lo que está pasando en el corazón de este anciano mediocre, perseveraré... Aunque deseo que se queden en la Tierra, estaré encantado de recibirlos aquí - no, de claro, en la condición de mis pacientes, pero si es así, tendremos que enfrentarnos juntos al Divino Médico... Por mi parte, les prometo mucha alegría y renovadas oportunidades de servicio, sin ningún moralismo. ¡Ven cuando vengas, y yo, que no pude ser padre en la Tierra, te recibiré con el amor que mi madre me enseñó a tener por todos mis hermanos...!"

    Capítulo 2

    Reflexionando sobre las dificultades en el intercambio mediúmnico, recibí, con la alegría habitual, la visita de maestro Odilon - que no sepa que lo llamo así... -, con quien comencé a conversar de manera distendida.

    - Querido Odilon – lo saludé a su llegada -, ¡mi corazón se alegra de verte! Hablar contigo ha sido una de mis mayores venturas en el más allá...

    - Es conveniente, Doctor, que aclare que aquí tenemos mucho trabajo...

    - ¡Es obvio!

    - ...de lo contrario, la gente pensará que no hacemos nada más que hablar.

    - ¡Dos veces, obvio! No te preocupes: ya está registrado, aunque, al menos para mí, nuestra conversación siempre resulta en trabajo; Después que te vas, sigo quemándome las pestañas, para registrar tus palabras... ¡La gente sumergida en la carne es un poco ingrata, porque no sabe el problema que esto me da! Ya sabes: ¡Yo no soy ese escritor! Tengo, casi todo el tiempo, que consultar el diccionario...

    - Sin embargo, el esfuerzo ha sido fructífero.

    - No puedo negarlo. Estoy contento con cada nuevo libro terminado, a pesar de los problemas que solemos encontrar para transmitir la idea. ¿Sabes, Odilón? Es un tema que me fascina - la mediumnidad, sobre todo en lo que se refiere a la recepción del médium; no es tan mecánico como crees...

    - No, no es. El médium,

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