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Believe: Todo es posible si puedes creer
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Believe: Todo es posible si puedes creer
Libro electrónico216 páginas3 horas

Believe: Todo es posible si puedes creer

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Información de este libro electrónico

Abrumado por la cotidianidad, aburrido cada día, atrapado en un círculo donde sin importar lo que hagas, no se puede salir.
Hasta que sucede algo en tu vida que lo cambia todo: Cada día vale el esfuerzo, cada sueño puede ser logrado.
Lo anhelas y lo piensas cada instante del día, pero no sabes qu&ea

IdiomaEspañol
Editorialibukku, LLC
Fecha de lanzamiento29 ene 2020
ISBN9781640864825
Believe: Todo es posible si puedes creer

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    Vista previa del libro

    Believe - J. Carlos Ibarra

    INTRODUCCIÓN

    Cuando tienes 10 años y te ves abandonado y en la calle, ¿qué haces?

    Te encuentras sin un sólo peso, con el estómago vacío y muerto de sed.

    Las noches son frías, extrañas tu cama y la compañía de tus seres queridos, pero recuerda: estás solo y en la calle.

    A pesar de que todas las circunstancias eran adversas, ¿qué es lo que ayudó a un chico de la calle a sobrevivir alejado de los vicios, dispuesto a luchar por sus sueños?

    ¿Cuáles son los principios que lo guiaron para poder alcanzar sus sueños?

    ¿Qué hábitos tuvo que desarrollar para mantenerse dentro del camino que lo llevó al éxito?

    La interesante historia de una simple naranja que sació la sed y mitigó el hambre.

    BELIEVE

    TODO ES POSIBLE SI PUEDES CREER

    Una afirmación falsa

    TODO ES POSIBLE, CRÉELO, DESARROLLA TU PODER INTERNO

    Una afirmación falsa, porque no sólo es necesario creer, hacen falta más elementos. Descubre por ti mismo tu misión en esta vida y aprende a despertar la o las pasiones necesarias que te ayudarán a darle un significado a tu existir.

    Enfoque: Motivacional, inspiración, principios y valores, ética y excelencia.

    BIENVENIDO

    El Sr. Martin Luther King Jr. tenía un dicho que lo popularizó. El dicho dice: Si no puedes volar, corre. Si no puedes correr, camina. Si no puedes caminar, gatea. Si no puedes gatear, arrástrate. Pero hagas lo que hagas, nunca dejes de moverte hacia adelante.

    ¿Te has encontrado e incluso estudiado filosofías que te dicen que te darán la formula infalible del éxito? ¿Has platicado con expertos que te prometen lo mismo, sin tener ningún resultado? ¿Has leído libros que juran entregarte los secretos que te llevarán a la grandeza?Después de haber invertido tiempo y dinero leyendo, estudiando y quizás incluso también fuiste a escuchar a algún conferencista que promete que su fórmula está probada y es contra fallas. ¿Después de todo eso te has dado cuenta de que perdiste tiempo, dinero y hasta quizás las ganas de seguir intentando alcanzar tus sueños?Probablemente pienses que este libro es uno más de los que ya has leído, pero déjame invitarte a que abras tu mente, quizás aquí aprendas el ingrediente que le hace falta a tu fórmula, para encontrar el camino para alcanzar tus metas.

    En este libro te voy a explicar cómo se crean tus pensamientos y cómo un simple pensamiento bien enfocado, se puede llegar a convertir en una idea y cómo esa idea, dándole lo necesario, se puede convertir en un sentimiento y ese sentimiento, dándole lo necesario, te llevará a la acción.

    Pero no sólo eso. Te voy a enseñar algunos pasos e incluso algunas terapias que te ayudarán a desprogramar tu mente, para que puedas poner en ella la información que tú consideres que te ayudará para conseguir lo que deseas y así puedas reprogramar tu mente e incluso deshacerte de todo lo que vienes cargando desde hace años y no has podido soltar.

    Permítele a tu mente fijar tu atención

    y poder mental en lo mejor y

    te rodearás de lo mejor.

    Serás el mejor

    y obtendrás lo mejor.

    Wallace D. Wattles.

    CARTA AL LECTOR

    Caminaba por la calle, el día era muy cálido. El sol dejaba caer sus rayos sobre la ciudad de México. La gente como siempre, atareada con sus labores sin poner atención a su alrededor; un sonido llamó mi atención, pero no le di importancia. Caminé hasta llegar a un parque, al que aún recuerdo después de varios años.

    Ese lugar se llama el parque México, zona que solía visitar de manera frecuente para hacer ejercicio.

    Tenía cerca de 10 años y ya cansado de caminar, decidí sentarme cerca de la fuente donde había varias familias de patos de plumas blancas; los patitos seguían a sus madres y el ruido que provocaban me distraía un poco de mis propios pensamientos, de nuevo ese sonido, al que dejé pasar nuevamente sin ponerle demasiada atención.

    Me senté en una banca de color verde que estaba en uno de los pasillos rodeados de árboles de ese parque. La sombra de esos árboles refrescaba el lugar donde me encontraba sentado. En ese momento mi mente comenzó a pensar en mis problemas inmediatos, comencé a preocuparme de en qué lugar pasaría esa noche. De nuevo ese sonido que esta vez me estremeció, decidí ignorarlo nuevamente y comencé a reflexionar en mis problemas, pero esta vez pidiendo la ayuda y guía de Dios.

    Pedía a Dios la ayuda y la explicación a mis problemas, quería que él me ayudara a solucionar mi problema de vivienda; ya estaba cansado de vivir en la calle, además del miedo de que llegara la noche y no saber qué hacer o dónde sentarme a dormir un poco. Ya no soportaba tener que aguantar el hambre por varios días. Reflexionando en esto, me levanté de la banca verde donde estaba sentado y me puse a caminar, pero esta vez Dios caminaba a mi lado, ese sonido se volvía cada vez más intenso y comenzaba a doler más.

    En mi mente Dios caminaba a mi lado y con Él compartía mis sueños, mis ilusiones y necesidades.

    Ese ruido insoportable se convirtió en un dolor que me estremeció sin poder evitarlo, era mi estómago vacío, que al no haberle dado alimento por un par de días, ya comenzaba a reclamar el alimento. Me sentía completamente cansado y triste, comencé a sentir el desamparo, pero seguía caminando y platicando con Dios. Continúe caminando y sin darme cuenta llegué a la parte trasera de un mercado, donde vi a una señora que llevaba en una caja fruta y verdura para tirar en la basura. De repente, de la caja se le escapó una naranja que rodó cerca de mí; la levanté y la tomé entre mis dedos. En ese momento mi mirada se encontró con la mirada de la señora, quien me miró con un gesto gentil y con una sonrisa en su rostro aprobó que me comiera esa naranja, la cual puedo decir que es la naranja más exquisita y jugosa que he comido en toda mi vida.

    Descubrí casi sin darme cuenta de que Dios, quien me acompañaba, me hizo coincidir con esa naranja y me encontré con un Dios que responde a mis peticiones y les da solución a mis problemas.

    Mi encuentro con Dios dio paso a grandes proyectos en mi vida, los cuales he llevado a cabo, siempre pidiendo su ayuda y dirección en todo momento.

    En este libro encontraras cuáles son los principios y cualidades que ayudaron a ese niño a alcanzar el éxito en sus proyectos personales.

    Mejor aún, déjate llevar de la mano y paso a paso por ese niño, para que descubras cuál es tu misión en esta vida y encuentres qué es lo que te apasiona para darle significado a tu existir.

    LA MISIÓN

    Si puedes creer, al que cree todo le es posible.

    La Biblia. Marcos 9:23

    Decía el licenciado Miguel Ángel Cornejo que si encuentras tu misión, encuentras el por qué vivir. Esa afirmación no podría ser más cierta. Cuántas personas conoces, o incluso tú mismo, que creen que será mejor morir, que al despertar ven la vida como una carga demasiado pesada, imposible de soportar; gente que ha pensado incluso en el suicidio. En lo personal conozco a varios y he notado que todos ellos comparten algo en común: la falta de una misión. Son personas que incluso están luchando por sus sueños y siguen su ambición, pero ¿por qué se sienten de esa manera? ¿a qué se debe que se sientan así? ¿por qué la misión es tan importante?

    Pensemos en un personaje histórico, el Mahatma Gandhi de la India (Mahatma quiere decir alma grande) Este gran personaje dedicó años de su vida a cumplir su misión, la cual era liberar a su nación del yugo Británico y recuperar la soberanía de la India. Fue el dirigente más destacado del movimiento de independencia de la India contra el Raj Británico. Nombre real: Mohandas Karamchand Gandhi, que lo impulsaba a hacer todas las cosas que hizo: liberó a su país haciendo una revolución no violenta. Él creía firmemente en el movimiento pacifista y logró vencer al imperio sin levantar las armas ni motivar al pueblo a la violencia; incluso estuvo dispuesto a matarse de hambre al hacer varias veces sus famosas huelgas de hambre. Fue asesinado el 30 de Enero de 1948.

    ¿Pero qué era lo que movía el interior de este gran personaje? Su deseo ardiente de ver libre a su pueblo. ¿Cuál era su misión? Alcanzar la libertad por medio de una revolución pacífica y lo consiguió, se logró la independencia de la India en 1947.

    Pensemos en el personaje más grande que conozco, Jesús el Cristo. Desde su nacimiento se cuentan historias sorprendentes sobre él: la visita de los sabios de Oriente, una estrella misteriosa, etc. Pero lo que a mí más me impresiona es la firmeza de su misión. Sólo pensemos en las cosas que logró: pudo reunir a un grupo de personas en su mayoría sin preparación académica, logró contagiarlos de sus principios y moral, los hizo parte de su misión; mejor aún, ellos adoptaron la misión de Jesús en sus vidas, incluso murieron por defender la misión que le dio valor a sus vidas. La mayoría del mundo Cristiano conoce el nombre de estos hombres, conocidos como los apóstoles de Jesús, pero Cristo era el personaje principal de su época en la tierra judía. He escuchado muchas historias fantásticas de algunos otros personajes que son considerados maestros, que también han hecho cosas sorprendentes, pero nunca que alguien haya dado una orden a la tempestad y ésta obedeciera para convertirse en completa calma, o dar la orden a un cuerpo muerto y éste recuperara la vida y la salud al instante, o alimentar a una multitud con tan sólo unos pocos panes y peces. Mejor aún, levantarse de la muerte y realizar milagros que hasta ahora nadie ha podido igualar.

    ¿Pero cuál era su misión? Hay muchos teólogos o religiones que difieren en el significado de la vida de este gran Maestro, pero casi todos coinciden en que su misión era rescatar lo que se había perdido y vino a dar su vida por muchos.

    Quizás tu no creas en Él, pero incluso logró hacer algo que afecta a los creyentes y a los no creyentes: PARTIÓ LA HISTORIA EN DOS. La historia se cuenta en antes de Cristo y después de Cristo, así que no importa si crees en Él o no, estás viviendo en la era cristiana.

    Su historia ha hecho que se escriban las más bellas historias, aunque también las más sangrientas, pero su ejemplo siempre fue bueno aunque algunos se hayan encargado de distorsionar su mensaje y hacer de esto incluso guerras.

    ¿Pero cuál es tu misión? ¿Ya pensaste en qué es lo que le da sentido a tu vida? La misión de una madre es ver que sus hijos se desarrollen sanamente, que sean hombres y mujeres de provecho; la de un padre es similar refiriéndose a los hijos, ¿pero qué hay de tu misión personal?

    ¿Quieres saber cuál es la tuya? ¿quieres ver cuál es el camino para crear una misión que le dé sentido a tu vida?

    Para comenzar, debes tomar en cuenta que la característica principal de una misión es ayudar a los demás de manera no lucrativa en sus inicios, aunque quizás después te sea remunerada.

    Cierra tus ojos y piensa en qué es lo que puedes hacer por otro. Comienza por tu familia directa, con los que vives ¿de qué manera puedes ayudar a hacer mejor sus vidas?

    No es necesario que quieras empezar en grande. Pon en práctica pequeños detalles que te vayan ayudando a encontrar tu misión. Si eres casado, algo muy sencillo: ofrécete voluntariamente a hacer una labor del hogar y después de hacerlo algunos días pide a tu hijos que hagan alguna otra labor que se requiera, pues ahora estas predicando con el ejemplo, Estás mostrando a tus hijos la característica principal del líder, que es hacer las cosas y poner el ejemplo a los demás.

    En el trabajo, siempre trata de dar un extra, no es necesario que sea en tiempo, dale más valor a tu trabajo. Sé mejor en un detalle a la vez, no quiera ser mejor al 100% en todo, porque lo más seguro es que no lo logres, pero si eres el mejor en una sola cosa, además de darle un valor extra a tu trabajo, te vuelves indispensable.

    No persigas una remuneración económica inmediata, esa llegará después y si no llega no te preocupes, lo estás haciendo sólo por el placer de servir y dar el ejemplo a los demás.

    Cuando llegue tu oportunidad, comparte tu misión y haz que los demás la adopten, de esa manera tendrás un entorno más armonioso y cooperativo.

    Piensa en esto: si tu hijo tiene clara la misión de servir y dar un extra en lo que hace, sólo imagínate sus resultados en la escuela o en su trabajo.

    Hay una historia que me gusta mucho y ejemplifica la misión de servir:

    Es un padre de tres hijos: Juan, Pedro y Luis. Los tres trabajan para la misma compañía, una comercializadora; los tres tienen el mismo puesto gerencial, pero ganan sueldos muy diferentes. El padre, algo angustiado, decide visitar al director de la compañía para saber cuál es la causa en la diferencia de ingresos de sus tres hijos.

    El padre llega con el director.

    – Señor, buenas tardes, soy el papá de Juan, Pedro y Luis. Mire que tengo una pregunta que me tiene un poco consternado, mis hijos llevan casi el mismo tiempo trabajando para usted en el

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