Carcoma

Por Yurena González Herrera

Carcoma es el escenario textual del consumo, de la voracidad, del desecho, es una metáfora del individuo y de su capacidad transformadora de la realidad, de la metamorfosis y los procesos de cambio que afectan a nuestras vidas. Transita el dolor, los recovecos del humor más cruel, el perdón, la identidad, el azar, la pérdida, el destino, la mentira y la emancipación del individuo. Lo etéreo y lo espontáneo tienen en Carcoma el espacio para hacer irrepetibles vivencias entre lo real y lo irreal.
Dividida en cinco secciones: Caja de insectos, Desperdicio cero, Patrón larvario, Entre la savia y Triturador de pesadillas; la obra consta de setenta microrrelatos que dibujan un patrón en la madera de nuestra memoria a través de las imágenes que evoca y crea para, a vista de pájaro, reconocer nuestra propia huella vital.

• Idioma: Español
• Editorial: Baile del Sol
• Fecha de lanzamiento: 24 sept 2020
• ISBN: 9788417263881

Vista previa del libro

Carcoma

Yurena González Herrera

Para quienes no me permitieron rendirme

Haber estado en un naufragio o en una batalla es algo bello y glorioso; lo peor es que hubo que estar allí para estar allí.

Fernando Pessoa

Caja de insectos

Ángel

La última vez nunca parece la última vez pero una mirada puede contener los peores secretos. Con ellas lo sabes todo sin decir nada. En ese silencio eterno ocurren cosas pero mucha gente no lo sabe porque nunca lo transita. Hay quien vive en el ruido de la nada.

Aquellas cortinas ondeando, la calurosa noche de la ciudad, la ventana abierta en el piso más alto de la desesperación. Ambos inclinados, frente a frente desde nuestras ventanas. Ella con un vestido ajustado a sus caderas geométricas y un pintalabios tan negro como el coche que la esperaba en la acera. No hizo falta hablar, aquella conversación de madrugada me cambiaría la vida.

Provocación

Era un stalker de la hora punta. Disfrutaba las sensaciones que le proporcionaba permanecer de pie, quieto en medio de la multitud, en el espacio intermedio entre los atascos, las pobrezas y las miserias. Se adhería a la piel de otros para tener un lugar al que ir. Vivía de aspirar momentos ajenos hasta que, durante una de sus misiones de búsqueda, percibió algo en la corriente de gente junto a la que caminaba. Notó un aroma reconocible, un ansia familiar, alguien como él. Esta inquietud le persiguió durante semanas, meses. Sintió pánico, un terror indescriptible. En una de esas ocasiones alzó la vista con cuidado, buscando sin prisa. Su doble le miraba fijamente desde la otra acera y ya pensaba cómo deshacerse de él. Todo aquel rebaño le pertenecía.

Bending

Hoy tocaba recuento de derrotas: revisar sus cosas para vaciar la casa. Me ha costado encontrar su púa de la suerte, con ella tocaba la que yo pensaba que era nuestra canción secreta en los conciertos, solo para mí. Yo vibraba como las cuerdas, envuelta en aquel sonido, yo era aquel sonido. Éramos los mejores destrozándose bajo las sábanas.

Mi herencia son los recuerdos, estribillos y cosas punzantes: las agujas del gramófono que mordían sus