Inteligencia artificial: Comprender las aplicaciones comerciales, la automatización y el mercado laboral

Por John Adamssen

¿Pueden las máquinas escribir libros?


¿Se puede usar la inteligencia artificial para los negocios?


¿Habrá pantallas táctiles o serán reemplazadas por reconocimiento de voz?


¿Qué son los deepfakes?


¿Cómo funcionan los autos autónomos, y van a ser una realidad pronto?



Todas estas preguntas salen a la luz en este breve pero informativo libro sobre inteligencia artificial. La sociedad está cambiando rápidamente debido a los sistemas automatizados que benefician o socavan el estilo de vida, el trabajo y el cerebro de las personas. Hoy exploramos lo que puede deparar ese futuro. También buscaremos opciones para que los civiles en el mundo moderno de hoy se adapten más rápidamente.



No subestimes el aumento de la inteligencia artificial. Comprende el futuro. Comience a leer o escuchar ahora!

• Idioma: Español
• Editorial: Efalon Acies
• Fecha de lanzamiento: 3 ago 2020
• ISBN: 9788835874218

Vista previa del libro

Inteligencia artificial

Comprender las aplicaciones comerciales, la automatización y el mercado laboral

Por John Adamssen

Table of Contents

Capítulo 1: Inteligencia artificial y aprendizaje automático

Capítulo 2: ¿Puede la inteligencia artificial escribir libros?

Capítulo 3: Uso de la inteligencia artificial para empresas

Capítulo 4: Pantallas táctiles versus reconocimiento de voz

Capítulo 5: Deepfakes

Capítulo 6: Explicación de los vehículos autónomos

Capítulo 7: El futuro de los trabajos

Capítulo 1: Inteligencia artificial y aprendizaje automático

Pensé que, para mi primer párrafo, sentaría las bases: todo el mundo es consciente de que los términos inteligencia artificial y aprendizaje automático (ML) se utilizan con una frecuencia cada vez mayor y para significar todo tipo de cosas, que van desde un mundo mejor. hasta el fin del mundo. La inteligencia artificial es una subdisciplina de la informática que se inició a finales de los años 50 por un puñado de pioneros, incluido Alan Turing (por quien se nombra el Premio Turing en Ciencias de la Computación y que rompió el código Enigma durante la Segunda Guerra Mundial) Marvin Minsky y John McCarthy (quien realmente acuñó el término inteligencia artificial). El campo se lanzó formalmente en 1956 en una conferencia en mi alma mater, Dartmouth College.

Los primeros días: representación del conocimiento

La IA comenzó como un razonamiento lógico computarizado. El objetivo en los primeros días era proporcionar a las computadoras hechos y afirmaciones lógicas (reglas) con la esperanza de que, en algún momento, la computadora exhibiera una inteligencia similar a la humana. (Por cierto, Alan Turing también es famoso por inventar la prueba de Turing para la inteligencia artificial: un programa pasa la prueba de Turing si, mientras conversa con él, una persona no puede decir si es humano o un programa de computadora). Este estilo de IA, comúnmente conocido como representación del conocimiento, fue ampliamente promocionado, pero rápidamente alcanzó los límites de su utilidad, especialmente dados los recursos informáticos limitados disponibles en la década de 1960. La inteligencia artificial y los robots también habían comenzado a apoderarse de la imaginación del público, y los robots con apariencia humana se habían convertido en un tema común en películas, como Robby the Robot en Forbidden Planet (1956) y HAL de 2001: A Space Odyssey. Comenzó a surgir la percepción de que la IA podía producir máquinas pensantes. (Y que las máquinas estaban destinadas a despreciar a los humanos y, en última instancia, asesinar).

La investigación en Ciencias de la Computación en ese momento fue financiada principalmente por gobiernos: principalmente el gobierno de los EE. UU., Y principalmente de la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA). La sobrevaloración seguida por la falta de resultados de los investigadores de IA provocó que la financiación de la IA se agotara, mientras que áreas como redes, sistemas operativos,