Diseños para Construir el Huerto Perfecto: El matrimonio viene del cielo, no de la tierra

Por Andrés Bulacio

El proyecto original de Dios para gobernar las naciones fue a través de huertos. Él diseñó el matrimonio y la familia para habitarlos con su plenitud y autoridad. Esta es una realidad familiar cada vez más difícil de encontrar en las naciones, incluso en los hogares cristianos. Dios solo puede habitar y empoderar lo que se ha edificado conforme a sus diseños.

Los modelos conyugales actuales, sumados a los de masculinidad y femineidad, nos muestran la pérdida de aquellos diseños. Estos modelos se centran más en las tradiciones de los hombres que en la revelación del diseño perfecto y eterno revelado por el Padre. Esto es el resultado de la penetración del humanismo en la mentalidad cristiana, lo que ha generado limitaciones que nos impiden lograr una vida familiar eficaz.

Este libro trae el entendimiento de las consecuencias devastadoras que tiene operar en una cosmovisión incorrecta. También nos permitirá comprender la insuficiencia de edificar huertos que no explotan la potencia conyugal revelada en la arquitectura de Cristo y la Iglesia. Finalmente explora este modelo perfecto poniéndolo al alcance de nuestras familias.

El matrimonio no es un diseño de la tierra, sino que viene de la Cielo. Desde allí trae consigo los recursos del Reino de Dios: justicia, paz, amor, gozo, amistad, unidad, compañerismo, comunión, intimidad, poder… para que seamos instrumentos llenos de la autoridad del Padre. Solo así lograremos transformar la naciones y dejar como legado un linaje adquirido por Dios, nación santa y real sacerdocio.

¿Estás dispuesto a encontrar esos diseños? Te invitamos a embarcarte en esta apasionante aventura de descubrir lo que Dios diseñó para nuestros matrimonios y familias…
Como siempre, lo que viene del Cielo, hará la diferencia.

• Idioma: Español
• Editorial: BookBaby
• Fecha de lanzamiento: 21 may 2020
• ISBN: 9789874580399

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Prólogo

El propósito de este prólogo ha sido convocar a ministros para que alcen una voz profética como naciones, con la finalidad de abrazar los diseños del Espíritu Santo expresados en este libro.

Voz de Chile

Hemos leído los principios del presente texto de Andrés Bulacio antes de que fuese publicado y que usted lo tenga en sus manos en este momento. Quiero decir que pudimos ver esculpidas muchas de las verdades plasmadas en este libro como cartas abiertas en el matrimonio y familia de Andrés y Dana desde hace un par de años. Cuestión que hace más que sugerente la lectura de alguien que vive lo que enseña, pues tendrás asegurada una impartición de espíritu a espíritu y no una mera acumulación de conocimientos novedosos para ser repetidos.

Buscando ser mejores esposos, padres y familia conocimos el ministerio de Andrés y Dana quienes, usados por Dios poderosamente, no solo han sembrado en nosotros lo recibido por el cielo, sino que también han sido de tremenda bendición para la iglesia de Chile y sus matrimonios; por medio de la realización de seminarios, escuelas y también con la difusión del primer libro: Volviendo Al Huerto.

En Diseños para construir el Huerto Perfecto hallarás una región espiritual donde los planos, roles y herramientas que Dios trazó para llevar a cabo la fundamentación de matrimonios sanos y funcionales están a disposición con claridad, profundidad y practicidad para su concreción en el día a día.

El libro se destaca en la capacidad de visibilizar y analizar detenidamente patrones y dinámicas generacionales. Por ejemplo, la manera detallada con que el autor ahonda en las familias de Abraham, Isaac y Jacob; comparando ciclos y procesos de acuerdo al modelo de Dios y a las historias de errores y aciertos en las decisiones matrimoniales de los patriarcas. Otorga una notable lección a la Iglesia profética. No basta solo con oír, sino también decidir correctamente en pos de los proyectos intergeneracionales del Padre para una familia y al mismo tiempo sobre naciones.

En los siguientes capítulos el autor se enfoca en inquirir prolijamente en la arquitectura de los diseños familiares donde todo es llamado a su orden: un varón y una varona funcionales, bajo autoridad, edificando perfectamente un huerto, el cual Jesús mismo nos dio ejemplo de cómo administrar.

En la pluma de Andrés Bulacio fluye una unción apostólica para releer las escrituras con la luz encendida, para develar y establecer diseños. Una unción magisterial para aterrizar la revelación profética del huerto en la práctica cotidiana y actitudinal. A través del texto es posible notar los años de experiencia ministerial trabajando con matrimonios. La pericia de un curtidor confronta nuestros odres en torno a la revelación matrimonial y a su preponderancia para la iglesia del siglo XXI.

Como Chile levantamos la voz para que los varones y mujeres pulan sus corazones como esposos y no suelten lo que Dios quiere hacer en sus próximas generaciones, dejándose entrenar para ser efectivos en su primer ministerio: sus casas.

Por las razones expresadas este trabajo se convierte en lectura obligatoria para todo aquel ministro de Dios llamado a atender los negocios de nuestro Padre. El matrimonio es el núcleo arquitectónico central en Sus diseños.

Agradecemos al Padre por este hermoso regalo para el Cuerpo de Cristo. Oramos para que corra como una voz de reforma en los matrimonios de las naciones. Que sea para sanidad y empoderamiento de las familias que aman y conocen a su Dios; que comprenden y viven el diseño matrimonial en la plenitud a la cual hemos sido llamados.

Ministros Javier y Débora Castro.

Comunidad Cristiana Apostólica Ciudad de la Luz. Chile.

Voz de Ecuador

Soy un convencido de que aquello que no funciona en tu casa, no funcionará fuera de ella. Quiero enfatizar qué tan importante es cada esfuerzo por hacer que el Reino de los Cielos avance y todo lo que eso implica, como lo son las vidas y familias de quienes estamos involucrados en esta ardua labor.

Me he llevado más de una sorpresa al ver cómo hombres y mujeres, llenos de celo santo por la obra del Señor Jesucristo y que son tremendos en una plataforma predicando y enseñando, carecen del sustento moral y de familias sólidas que respalden lo que están liberando a la audiencia.

A lo largo de mi vida familiar, como esposo, padre y pastor, he leído un sinnúmero de libros sobre el matrimonio, sin embargo, mucho de lo que se ha escrito es desde una perspectiva muy terrenal.

Creo que el autor aborda con profunda y fresca revelación, con pasión y compromiso indiscutibles, y también con valentía, lo que para todos nosotros debe ser prioridad: el matrimonio, el huerto. En este libro se vierten verdades que nos llevan a recapacitar y a hacer profundas reformas en lo que a nuestros propios huertos se refiere.

Agradezco al Padre porque alguien que tiene el sustento moral y una sólida familia, ha levantado el estandarte para escribir sobre tan fundamental tema.

Considero que este libro es una herramienta indispensable para el huerto de todos los que realmente deseamos formar y presentar al Padre familias que le sirvan por generaciones.

¿No te hizo uno el SEÑOR con tu esposa? En cuerpo y espíritu ustedes son de él. ¿Y qué es lo que él quiere? De esa unión quiere hijos que vivan para Dios… Malaquías 2:15 (a) NTV.

Ministros Gustavo y Daniela Luzardo.

Ministerio Ciudad de Dios. Manta, Ecuador.

Voz de República Dominicana

Es muy común que en nuestra fuerza, experiencia, pensamiento y buena voluntad, tratemos de armar y desarrollar un matrimonio. Una vez casados y cuando la vida debería cobrar un nuevo sentido, nos damos cuenta que desde el minuto cero, algo se ha perdido. La emoción, el amor, los sueños, la familia, los amigos y los ojos de quienes nos rodean nos darán el impulso para que podamos seguir adelante. Sin embargo, continuamos sintiendo el sabor a incertidumbre por el simple hecho de saber que no todo está funcionando como debería. Esta sensación irá ganando terreno en nuestro interior más profundo hasta darnos cuenta de que nunca fuimos preparados para esto. Nos damos cuenta de que jamás tuvimos un modelo correcto y que todo lo que creímos saber, era simplemente sombra de algo mucho más grande.

En la actualidad el concepto de matrimonio no solo sigue atrapado bajo el peso de todas las dificultades de tiempos anteriores, sino que además, se le ha sumado una degeneración de la moralidad, preceptos, conductas y conciencias. Esta alteración ha sido posible gracias a las arrolladoras prácticas y copias, locales y globales, que por su uso se han convertido en la cultura de los pueblos. Cultura que ha establecido los modelos erróneos a seguir, cultura que ha sido escrita en el papel de la demacrada experiencia y, tristemente, sin ningún atisbo de luz proveniente del Cielo.

En todos estos años hemos sido testigos de la vital necesidad que tienen los matrimonios en este hermoso país; necesidad de ser restaurados, restituidos, revividos y ser llevados a una experiencia en Dios que se convierta en su forma diaria de vivir, dándoles la potestad de gobernar. Esta nación necesita conocer y aceptar el diseño de Cristo y la Iglesia aplicados al matrimonio y la familia. No nos cabe duda de que lo escrito en este material será una herramienta para encaminar a los matrimonios constituidos y a quienes quieran constituirse como tal.

Ministros José Luis y Coralia Bohórquez.

Casa de Reforma, Bethel.

Sosúa-Puerto Plata, República Dominicana.

Voz de Colombia

Estamos viviendo tiempos de gran desafío en todas las áreas de nuestras vidas y de la vida de la iglesia, tiempos de reforma. Dios está hablando, conduciéndonos a sus diseños. Damos gracias a Dios por el mensaje de reforma para las familias que están soltando nuestros amigos Andrés y Dana para recuperar los planos del diseño de la familia que se distorsionaron en la caída.

Nos unimos para levantar la voz de reforma a las naciones desde Colombia, lugar donde años de violencia marcaron las familias y sus generaciones con un espíritu de orfandad distorsionando el diseño original. Recibimos y apoyamos con entusiasmo este mensaje profético y reformador que nos conecta nuevamente con el corazón del Padre y su diseño para la familia.

Es el tiempo de las familias y generaciones de reino, es el tiempo de levantarnos a cerrar las brechas sanando toda herida para que no se filtre lo falso que corrompió el diseño. Es el tiempo de la generación que conoce las profundidades del corazón del Padre para colocar los cimientos y edificar lo verdadero. Es el tiempo de las generaciones valientes que perseveran y no se cansan hasta ver que el modelo original, que es Cristo y su Iglesia, se establece pasando de generación a generación.

Nos unimos a la voz del Espíritu que se está soltando en las naciones para decir: TODO VUELVA A SU LUGAR.

Ministros Arturo y Gladys Tobar.

Comunidad Cristiana Palabra de Vida. Bogotá, Colombia.

Voz de Brasil

É um tempo propício para se ir além das fronteiras estabelecidas por várias correntes de pensamento que norteiam a conduta do homem por séculos, inclusive reformar a visão dos cristãos brasileiros e das nações, abrindo frestas de luz, incidindo sobre temas tão fundamentais para a família e para as gerações de uma forma geral.

Nada mais importante para atual conjuntura da sociedade de que ela experimente as boas obras que lhe foram preparadas antes da fundação do mundo, em Cristo Jesus. Devemos agradecer ao Senhor pela intrepidez do autor para seguir o Espírito de Deus enquanto os véus do tradicionalismo e da ignorância vão caindo. Certamente temos uma grandiosa contribuição, neste trabalho, no que tange a manifestação do Reino de Deus no seio das famílias e principalmente no dissipar da neblina espessa que envolvia o casamento, sexualidade e seus desenhos originais.

É incontestável que a ênfase dessa obra não está em disseminar uma nova doutrina, mas sim em permitir que a chuva do Espírito Santo venha fecundar a terra de cada coração que tem almejado florescer e dar muito fruto para o - Abba - Pai.

Esperamos que este livro tenha grande aceitação, seja como colírio para ajudar-nos a enfocar aquilo que o céu tem proclamado àqueles que começam a anelar pelo poder da restauração e ressurreição e pelo surgimento de um novo jardim de Deus em cada casa. Declaramos juntos: A Ele, pois, seja toda a glória!

Ministros Marcelo e Fernanda Bianchi.

Comunidade Cristã Apostólica Venha Teu Reino.

Piracicaba. Brasil.

Voz de Paraguay

Recuerdo perfectamente hace unos años cuando el Señor me habló diciendo: Mis hijos se preocupan y enredan queriendo saber el fin de las cosas, cuando el entendimiento está en el origen de las mismas. Esta fue, sin duda, una palabra que estableció un cambio de posición desde dónde ver la vida y Su Palabra. El origen es Cristo mismo y cuando entramos en Él y Él en nosotros, podemos tener la perspectiva correcta de todo. Solo Jesucristo puede devolver al hombre la capacidad de ver y entender la vida desde el mundo correcto: el Reino. Sin esto, aun los movimientos llamados cristianos ven todo distorsionado y terminan perdiendo el axioma verdadero que lleva a la vida y a Su gloria. Esta ley fundamental de conocer todo desde su origen es determinante en toda área de nuestra vida, pero principalmente lo es para la unión conyugal y desde allí a la familia. Hablamos del organismo vivo más atacado por las tinieblas, pues en él se encuentra el depósito de Dios para la extensión de Su reino.

Creo firmemente que en las páginas de este libro el autor plasma detalles precisos, revelados desde Cristo, para el entendimiento y funcionamiento de esta poderosa estructura llamada una sola carne donde Dios ha depositado los recursos para que un día seamos multitudes a Su imagen. Vivir el matrimonio en el diseño de Cristo y la Iglesia nos permitirá dejar de ser grupos religiosos para pasar a ser un poderoso reino expansivo. Agradezco al Padre por el ministerio y vida de Andrés, Dana y su familia, que han pagado un precioso precio para abrir puertas a las generaciones para este entendimiento, para escudriñar mayores y más profundos misterios eternos guardados para los que le aman. Este libro es una de esas puertas porque va al origen. Alzamos nuestra voz como Paraguay declarando que al abrir las páginas de este libro cada lector será introducido al lugar de revelación desde el cual fue escrito ¡Y de ahí a más! Que este libro, como semilla, se convierta en miles de casas determinadas y atadas al diseño original, caminando el difícil pero glorioso camino de fructificar, multiplicarnos, llenar la tierra y gobernar en obediencia desde Cristo.

Ministros David y Grazziella Ortigoza.

Comunidad Cristiana Apostólica Casa de Amor.

Asunción, Paraguay.

Voz de Argentina

Agradecemos al Padre por este hermoso material que nos ayuda a entender con mayor revelación Su diseño perfecto para el matrimonio y la familia. Es Dios mismo quien la crea, quien la instituye y quien la establece. El hombre ha ensayado y sigue ensayando múltiples proyectos para la familia; pero ninguno podrá jamás superar en calidad de vida, propósito, gozo y eternidad a los diseños que Dios, con infinita sabiduría y amor, ha concebido para la familia.

El autor nos da una llave al exponer con claridad toda la hermosura de los diseños de Dios y nos anima a andar y edificar en base a ellos. Como Argentina levantamos una voz llamando a las familias a tomar el lugar central que el Padre les ha otorgado.

Es por ello que en la primera carta a los corintios el apóstol Pablo escribió: Pero quiero que sepan que la cabeza de todo hombre es Cristo, y la cabeza de la mujer es el hombre, y la cabeza de Cristo es Dios (1 Corintios 11:3). Es decir, Yeshúa quiere establecer una comunicación directa con cada hogar en la tierra. Él está dispuesto a pastorear, cuidar, proveer, guiar, instruir y aconsejar para que la familia entera se sienta segura, camine por buena senda y sea llena de vida, gozo y propósito.

Es una maravilla que el Señor se dedique personalmente a cada hogar. Por eso recomendamos en gran manera este material para compartir con matrimonios amigos, dentro y fuera de las congregaciones del Señor.

Ministros Carlos y Diana Knight.

Congregación Cielos Abiertos. Ciudad del Buen Espíritu, Argentina.

Voz de Bolivia

Es un año en el cual la resurrección, la restitución y la restauración se levantan. Llamamos a los hijos buscadores de verdades, a los sedientos por hacer la voluntad perfecta, para que vengan a beber de la fuente de diseños que Él ha puesto en estas páginas.

Desde la casa de José (Bolivia) y como arco firme en las manos del Señor enviamos este libro a todas las naciones. Que la sanidad y la revelación fluyan como aceite. Que en medio de la casa abunde el trigo para que familias entendidas gobiernen según la voluntad del Padre en el diseño perfecto.

Si pudiera dar una recomendación a quien comienza a leer estas páginas llenas de verdades sería la siguiente: tenga la actitud de aquel que encontrando una perla tuvo la valentía para invertir todo lo que tenía y alcanzar a Cristo por encima de todas las cosas.

Con fe creamos al Señor. Con obediencia manifestemos en esta tierra nuestra confianza en Él estableciendo el modelo eterno de Cristo y la Iglesia sobre nuestros matrimonios. Sea la luz y la restauración mientras usted va descubriendo a Dios en medio de su huerto.

Ministros Samuel y Valeria Burgoa.

Comunidad Cristiana Apostólica. La Paz, Bolivia.

Voz de Venezuela

Nos llenamos de gozo y alegría al ver cómo en este tiempo el Padre está trayendo los diseños originales a su iglesia a través de sus profetas. El Señor está redireccionando todas las cosas para que sean cómo Él las creó.

Este libro trae luz sobre un tema que es vital: el matrimonio y la familia. Entender el origen y el diseño de la familia desde el punto de vista del Creador es una de las plataformas imprescindibles para que la iglesia avance en su propósito sobre tierra.

Por años he visto a la iglesia adolecer por falta de luz en esta área tan importante, sin poder ver a la familia como Dios la ve. He visto a la iglesia tratar de restaurar casas desde la plataforma incorrecta, bajo principios errados. Las familias deben restaurar la iglesia y no al revés.

Creemos firmemente que la única manera de recuperar el gobierno sobre toda la creación que el Padre nos entregó depende de que nosotros recuperemos el diseño verdadero de la familia.

Unimos nuestra voz como nación estableciendo que la luz de revelación contenida en este libro se abre paso en medio de las estructuras de creencias terrenales y humanistas que la iglesia generó durante décadas.

Amados, recomendamos en gran manera estas letras de luz. Sabemos que ayudarán muchísimo a reorientar y ordenar nuestras vidas y familias para que el mundo pueda ver a Cristo en nosotros.

Bendecimos la vida de Andrés y Dana por llevar adelante este proyecto del Padre para restaurar sus diseños en los hogares.

Nuestro mayor anhelo es ver a Cristo reinando a través de las familias que conforman la iglesia expandiendo su huerto hasta lo último de la tierra.

Como sus hijos en la tierra de Venezuela aceptamos los diseños de Cristo expresados en este libro y los establecemos desde las alturas. Bendiciones.

Ministros Aires y Carmen Ferreira.

Comunidad Cristiana Familia de Dios. Barquisimeto, Venezuela.

Capítulo 1

Nuestra historia vista desde la eternidad

Aún se podía sentir en la atmósfera el júbilo que los ángeles habían liberado cuando el Padre reveló el plan de la esposa para el Hijo. Sin embargo, ahora la conversación hacía que el ambiente se volviera cada vez más tenso. Era usual ver a los guardianes del trono usando dos de sus seis alas para cubrir su rostro a causa de la gloria del Padre, solo que esta vez las extendían como queriendo esconderse. A esto se sumaba el intento de disimular el inevitable temblor que producían los nervios del momento. Pero… ¿quién podía poner su atención en los ángeles? Como siempre, la atención estaba en lo que sucedía en el trono.

El Padre despliega con impactante claridad las sazones y los tiempos reservados sobre su potestad, está manifestando las realidades del plan en el huerto. A su diestra el Príncipe se muestra lleno de contrariedad, atina a desgarrar sus vestidos, sin embargo, se contiene. Vuelve la mirada al Padre como queriendo encontrar algo que diga que aquello que está viendo no es real, mas la mirada del Padre muestra la firmeza de siempre, aunque llena de pesar. Con voz quebrada el Hijo dice:

Padre, dime si hay algo que podamos hacer para que esto no suceda…. Los ángeles, expectantes, contienen su aliento esperando una respuesta que nunca habrá… El Hijo alza su voz una vez más: ¡¿Nos traiciona.?! A pesar de que la formamos y establecemos pacto de amor eterno con ella ¿se levanta contra nosotros?.

Mientras estas palabras resuenan en la eternidad, violentas ráfagas del Espíritu de Dios se agitan con marcados signos de indignación. Es tal la intensidad que los guardianes deben reforzar su aleteo para no ser movidos de sus posiciones. Detrás de las alas que cubren sus rostros se escabullen disimuladas miradas de reojo. Si bien no pronuncian palabra alguna, todos piensan lo mismo: no se ha vivido un momento así desde aquella vez que el infiel se levantó contra el trono del Padre.

Todo en el trono cambia abruptamente cuando del Padre comienza a brotar una compasión que jamás se había visto. Enfocando su mirada en el Hijo, dice: Así es… a pesar de que la formas, le das vida y la amas con amor perfecto, igual que el infiel, ella irá tras el camino de su propia codicia. Conociéndonos nos niega como sus Creadores. Rompe el yugo del pacto y te niega como esposo. Desecha el soplo de vida. Huye de tu morada tras la vanidad de sus pasiones perversas y se prostituye.

El Hijo palidecía como quien se va desangrando. Inclina su cabeza hacia delante, intentando asimilar la situación. De repente se yergue y con determinación dice: Aun así decido amarla. Sé lo que significa para ti esta nación de hijos sobre la creación. Porque te amo Padre decido amarla. Hizo una pausa como quien se examina internamente y prosiguió diciendo: Padre, mientras hablabas de esta traición sentía como si algo perforara mis manos y mis pies. Esta corona comenzó a dolerme como si espinos se clavaran en mi cabeza. Finalmente sentí como si una lanza atravesara mi costado. Es extraño, amar jamás dolió así. El Padre lleno de entendimiento guardó silencio, sabía de qué se trataba. Dio lugar a que el Hijo se siga expresando: Más allá de todo, la amo. Mi pacto con ella es eterno, nada ni nadie lo extingue…. Esta respuesta del Hijo conmovió al Padre, quien experimentaba una extraña combinación de dolor y satisfacción. Dolor por la traición de los hijos que iban a ser creados, satisfacción al ver en su unigénito la grandeza y la pureza de un Rey Justo. Pensó para sus adentros: Sin duda alguna es el Príncipe de Paz. Con voz dulce le respondió: Hijo tus palabras han sido precisas, ella ha abandonado el lecho del pacto corrompiéndolo, entrando en morada de chacales. Para recuperarla deberás pagar un precio inigualable. El Hijo da un salto de su trono poniéndose de pie delante del Padre, con la euforia de quien encontró una solución posible, como diciendo: Dime que debo hacer y lo haré. El Padre continúa: Este pacto de amor eterno te arrastrará a los lugares donde ella ha caído. El Hijo responde: A donde deba ir, yo iré. El Padre aclaró con voz apesadumbrada: "Deja la gloria de tu divinidad aquí. Humíllate e introdúcete a las profundidades en las que ella está cautiva(¹). Paga el precio de sus rebeliones. El juicio que está sobre ella cae sobre ti, hasta que la medida de la justicia sea cumplida. El hijo responde: Padre, no solo doy mi vida por ella, sino que restauro lo que la rebelión del infiel causó. Restauro el tabernáculo celestial. Me levanto demostrando que hay un modelo de hombre que unido a Ti puede vencerlo todo y serte fiel. El Padre le contesta: Deberé darte un cuerpo. A lo que el Hijo responde: Sacrificio y ofrenda no quieres, por eso me das cuerpo"(²).

A la entrada de las ruinas del tabernáculo celestial se ve una actividad angelical que impide fijar la vista. Cuando el resplandor comienza a disminuir, se ve el altar del sacrificio ya restaurado. El Hijo camina en esa dirección quitándose su corona y sus vestiduras reales. Al atravesar la entrada de pronto solo se ve un cordero puro y sin mancha de pie sobre el altar. Se recuesta con suavidad esperando el sacrificio. Estando allí su blancura comienza a teñirse de un rojo tan intenso que no se puede describir. La sangre comienza a correr desde el altar(³), atraviesa la primera puerta, luego la segunda hasta llegar al propiciatorio celestial. Mientras la sangre corre se ve una gloria superior sobre el Cordero; los ángeles estremecidos comienzan a hacer sonar trompetas que anuncian: El Cordero que fue inmolado es digno de tomar el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, la honra, la gloria y la alabanza(⁴).

De pronto, el Cordero ahora estaba vestido como Sumo Sacerdote(⁵) según el orden de Melquisedec(⁶). Entra al tabernáculo celestial(⁷) trayendo su sangre perfecta uniendo cielos y tierra(⁸). Establece el pacto del Cordero con su amada dando acceso a que los hijos vuelvan a la comunión con el Padre.

Desde el trono se oye la voz del Padre lleno de gozo: Eres mi hijo, yo te engendré hoy, pídeme y te daré por herencia las naciones y como posesión tuya los confines de la tierra, que brantarás con vara de hierro a los reyes de la tierra que se rebelan contra mí; como vasija de alfarero los desmenuzarás(⁹).

Del propiciatorio celestial aparece un Rey Justo, lleno de esplendor y hermosura(¹⁰). Sus vestiduras están cambiadas, saturadas de la pureza de su sangre(¹¹) que ahora alumbra más que el sol del mediodía. Los ángeles no salen de su asombro: es Rey, pero también sigue siendo Sumo Sacerdote. Ahora tiene un nombre sobre todo nombre(¹²).

Con pasos firmes camina hacia el altar de bronce de la entrada. Allí hay una con apariencia