Una guia para vivir bien: Estudios en Proverbios

Por Editora Cristã Evangélica

Proverbios es un libro práctico que nos enseña como vivir en nuestra
vida diaria los mandamientos de Dios que estudiamos en Su Palabra.
El autor usa un estilo directo, con ilustraciones y de manera poética.
No hay nadie que no pueda aprender estas verdades cuando
se estudia seriamente este libro bíblico. Hay consejos, órdenes y
sabiduría práctica para todos- desde el joven al mayor.

• Idioma: Español
• Editorial: Editora Cristã Evangélica
• Fecha de lanzamiento: 8 jul 2019
• ISBN: 9788576689294

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Conociendo la guía para vivir bien

Introducción

La colección de los proverbios agrupados y preservados en este libro revela como la fe monoteísta de Israel en un Dios vivo influyó la vida común del pueblo, y también la vida de Jesús, de Pedro y de Pablo, en el Nuevo Testamento. Aún hoy, Proverbios marca indeleblemente, de manera positiva, la vida de toda persona que lo estudia a la luz del Espíritu Santo. Esto porque es un libro de sabiduría práctica y enseña que la religión está unida a los problemas comunes de la vida. Nuestros actos durante los días de la semana tienen que ver con el culto que prestamos a Dios en el domingo, y viceversa.

El tema central de este libro es la sabiduría, la cual empieza con Dios (Pr. 8:1-36; 9:10; 15:33). Los Proverbios revelan la sabiduría de los antiguos maestros israelitas sobre lo que la persona debe hacer en determinadas situaciones para que viva bien. El vivir bien es una pre-rrogativa del sabio, y para ser sabio es necesario temer a Dios. La sabiduría ofrece la felicidad, vida larga, riqueza y honra (Pr. 3:13-18) para aquellos que evitan:

1. crímenes de violencia (Pr. 1:10-19; 4:14-19);

2. fianza precipitada (Pr. 6:1-5);

3. ociosidad (Pr. 6:6-11);

4. duplicidad (Pr. 6:12-15); y, sobretodo, falsedad;

5. impureza sexual (Pr. 2:16-19; 5:3-20; 6:23-35; 7:4-27; 9:13-18).

La relevancia de estudiar con cariño este libro está en su manera práctica y contemporánea, pues trata de las relaciones humanas en casi todas las áreas de la vida. Además, sus enseñanzas son aplicables a todas las personas donde estén. La sabiduría empieza con el temor de Dios, es verdad, pero se refleja en una conducta recta y amorosa para con todos.

I. ¿Quién escribió Proverbios? ¿Cuándo?

Con que gran parte del libro de Proverbios haya sido escrita por Salomón (Pr. 1:1), el contenido revela que hubo contribuciones de otras personas tales como:

1. los sabios (Pr. 22:17; 24:23);

2. los hombres de Ezequías, aunque apenas hayan transcrito una selección de Proverbios de Salomón (Pr. 25:1);

3. Agur, hijo de Jaqué, de una tribu llamada Massá (cap.30);

4. rey Lemuel que transcribió enseñanzas de su mamá (cap.31), también de la tribu de Massá.

Salomón escribió muchos proverbios (Ec. 12:9; 1 R. 4:32). Pero, eso no quiere decir que haya compuesto el libro de Proverbios tal cual lo tenemos hoy. Es bien recibido entre los estudiosos que alguien, algún tiempo después, haya coleccionado proverbios y les haya dado forma de libro (rollo). Fue de esa manera que pasaron de generación a generación, hasta llegar a nosotros, con la misma reputación de una palabra inspirada, como siempre creyeron los judíos, desde los tiempos antiguos.

Leyendo 2 Crónicas 29:25-30, aprendemos que Ezequías promovió una intensa reafirmación religiosa y artística, cuando fueron revividas las palabras de David y Salomón, por la voz de Gad, el vidente del rey David.

Proverbios 25-29 revelan de una manera nueva este gran avivamiento, cuando los hombres de Ezequías reunieron en volumen algunos de los proverbios de Salomón, que habían sido conservados por la enseñanza oral.

Sobre la fecha, no es fácil definir, pero el libro de Proverbios no podría haber sido completado antes del tiempo de Ezequías (715 – 666 a.C.). Es posible también que el poema acróstico (Pr. 31:10-31) y las enseñanzas de Agur y Lemuel (Pr. 30:1-33; 31:1-9), hayan sido añadidos en el periodo del exilio o del pos-exilio. «Una fecha razonable para le fecha final sería el 

siglo V a.C. » (O Novo Dicionário da Bíblia, traducción libre).

II. El reflejo de Proverbios en Israel

«Se cree, y con buenas razones, que Proverbios y otras secciones del Viejo Testamento eran una especie de disciplina, por la cual la nación era guiada y conservada. De hecho, un pueblo que se orienta por las enseñanzas de Proverbios tendrá que ser una nación de sabios y justos. Estos preceptos, en su real aplicación en la vida, son una interpretación del espíritu de los profetas, pues mientras estos buscan mantener al pueblo cerca del Señor, aquellos interpretan la vida en sus relaciones con Dios y los semejantes» (Estudo no livro de Provérbios, Mesquita, Antônio Neves, JUERP, Rio de Janeiro, Brasil, 1979, p.19, traducción libre.) Este es el secreto de la seguridad y éxito de este pueblo.

La separación entre la vida práctica y la religiosa es lo que ha arruinado el vivir humano, como si la teoría y la práctica no fueran solamente una cosa. Nuestra predicación intenta rescatar el principio ideal de Dios: unir la religión a la práctica de la vida, pues lo contrario es pura hipocresía y falsedad. Este mensaje de Proverbios afectó toda una nación.

III. El reflejo de Proverbios en el Nuevo Testamento

1. En las enseñanzas de Jesús

Existen evidencias de que nuestro Señor Jesús amaba el libro de Proverbios, pues hizo amplia utilización de estas enseñanzas en su adoctrinamiento práctico. Veamos algunos ejemplos:

Sus palabras sobre los que buscan los primeros lugares, cuando invitados a los banquetes (Mt. 23:6-7; Lc. 20:46-47), están firmemente relacionadas con Proverbios 25:6-7;

la parábola del rico e insensato (Lc. 12:15-20) está bien retratada en Proverbios 27:1;

la parábola de los dos cimientos (del sabio y del necio – Mt. 7:24-27) tiene fundamento en Proverbios 14:11;

en la conversación con Nicodemo (Jn. 3:13) Jesús revela la respuesta de la pregunta levantada por Agur en Proverbios 30:4.

2. En los conceptos del apóstol Pedro

Parece que Pedro fue el escritor del Nuevo Testamento que más usó el libro de Proverbios en sus cartas, o por ser íntimo de Jesús o por sus posibles lecturas de este valioso libro. Compara:

1 Pedro 2:17 con Proverbios 24:21;

1 Pedro 3:13 con Proverbios 16:17;

1 Pedro 4:8 con Proverbios 10:12;

1 Pedro 4:18 con Proverbios 11:31;

2 Pedro 2:22 con Proverbios 26:11.

3. En los escritos doctrinales de Pablo

El apóstol Pablo también cita y refleja Proverbios en sus epístolas. Compara:

Romanos 12:20 con Proverbios 25:21-22;

1 Corintios 1:24 con Proverbios 8 («Cristo poder de Dios, y sabiduría de Dios»).

Conclusión

El escritor a los Hebreos, en el capítulo 12, a partir del versículo 5, ordena que no nos olvidemos de la «exhortación que, como a hijos se os dirige», y que no despreciemos el castigo del Señor. Esto es una citación de Proverbios capítulo 3, a partir del versículo 11. Aquí tenemos una demostración de la verdadera naturaleza del libro Proverbios – es un estudio sobre la disciplina paternal de Dios.

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Amistades, sus influencias