Peluquería canina para realizar en casa

Por Claire Dupuis

Tanto si se trata de asear al perro como de prepararlo para una exposición de belleza, el acicalado requiere técnica y atención.
Conozca la función y la dimensión educativa del acicalado, el material y los productos cosméticos, el mantenimiento del manto (fisiología del pelo, los tipos de manto, etc.), la higiene de las otras partes del cuerpo (uñas, orejas, glándulas anales, lagrimales...) y la periodicidad de los cuidados.
Esta obra, ilustrada a todo color, explica las diferentes técnicas (desenredar nudos, afeitar, cortar, trimming, engrasar, etc.).
Con fichas técnicas específicas de las razas más difundidas para iniciarse en los cortes tradicionales.
Gracias a los consejos para preservar el brillo del pelo, para acostumbrar al perro a aceptar las operaciones de limpieza o para prepararlo de cara a las exposiciones, el mantenimiento se convertirá en una actividad sencilla, útil y agradable.

• Idioma: Español
• Editorial: Parkstone International
• Fecha de lanzamiento: 22 ago 2018
• ISBN: 9781644615461

Vista previa del libro

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PRÓLOGO

El primer contacto con Claire Dupuis fue por teléfono. Con voz clara y firme me explicó su desengaño con la Administración, que le había negado una ayuda para aprender el oficio de peluquera canina, sus intentos por encontrar un profesor competente... En definitiva, me planteó las dificultades que estaba encontrando para aprender un nuevo oficio. Escuchándola, reconocí en sus palabras las mismas quejas justificadas y las mismas decepciones de todos los aspirantes a iniciarse en este oficio, basadas en la falta de seriedad y de realismo de la mayor parte de cursos de formación.

Ejerzo desde 1973, y entré a formar parte del sindicato poco tiempo después. En este oficio todo estaba por hacer, y a él me dediqué con entusiasmo, cargado de buenas intenciones, a veces con inocencia, y nunca por intereses personales. Orienté mi trabajo a la instauración de una línea de formación oficial con los centros de formación profesional, a la adecuación del organigrama para artesanos, al campeonato de Francia de peluquería canina, con todo lo que ello implica de trámites, y de superación de obstáculos.

Firmemente decidida a emprender esta aventura, Claire Dupuis fue mi alumna durante varios meses. No tardé en darme cuenta de que había adquirido toda la parte cinófila del oficio, y que poseía el sentido del perro, su armonía, su equilibrio. Sólo me quedaba transmitirle la forma de alcanzar este equilibrio, de resaltar las cualidades de los perros, disimulando al mismo tiempo los pequeños defectos. Le enseñé a manejar los instrumentos, las técnicas, los estándares de corte o de trimming, la cosmetología, etc.

Con la mente abierta y las ideas claras, mi alumna asimiló rápidamente las enseñanzas, añadiendo a veces comentarios divertidos y observaciones pertinentes. Presiento que fue entonces cuando empezó a concebir una obra sobre peluquería y cuidados del manto del perro destinada al gran público. Había un vacío en este campo, que ahora se llena con este libro.

Para mí es una gran satisfacción escribir el prólogo de este libro que no tiene en absoluto la pretensión de sustituir al profesional sino, por el contrario, ayudarle transmitiendo a los dueños de perros las conocimientos necesarios para que efectúen ellos mismos el mantenimiento entre dos sesiones de peluquería. Con la ayuda de este libro, el lector podrá iniciarse en la preparación del manto de su perro y aprender que un perro no es un saco, sino una cabeza, unos hombros, un cuello, un lomo, unas angulaciones, un vientre y tórax, en cuyo interior late un corazón. Buena suerte a todos.

GÉRARD LEFÈBVRE

Ex presidente del sindicato nacional de peluqueros caninos profesionales, coorganizador del campeonato de Francia de peluquería canina

(Fotografía de P. Visintini)

INTRODUCCIÓN

En el momento de comprar un perro, muchas veces la última preocupación de los futuros dueños son los cuidados que necesitará el manto. Y sin embargo, unas razas exigen una preparación específica y periódica, y otras necesitan unos mínimos de higiene corporal. Si no se asume esta responsabilidad, sólo nos queda una solución: no tener perro. Un libro dedicado a la preparación del manto del perro puede ser útil para dar unos conocimientos y unas técnicas básicas que permitan al dueño cuidar a su propio perro.

Tengamos en cuenta, no obstante, que los arreglos realizados en casa no sustituirán el trabajo de un profesional. Se trata más bien de acciones complementarias: cuanto mejor cuidemos al perro entre dos sesiones de peluquería, mejor será para todos. Un perro bien cuidado por sus dueños es más fácil de arreglar, los resultados son mejores y resulta más barato. Así pues, por el bien de todos, y en especial de nuestro compañero, invitamos al lector a recorrer el universo indispensable, y a la vez gratificante, de la peluquería canina.

Los mantos de pelo raso también necesitan un mantenimiento periódico. Thaï Ridgeback. (Fotografía de APL)

¿EN QUÉ CONSISTE EL MANTENIMIENTO?

La utilidad de arreglar el pelaje

Sin los cuidados higiénicos adecuados, el perro puede oler mal, ser víctima de los parásitos, sufrir gingivitis, otitis, etc. A todo ello hay que añadir el hecho de que algunas razas han desarrollado, en algunos casos desde hace siglos, una estética emparentada con un determinado acicalado. Preparar el manto es indispensable para mantener la salud de nuestro perro.

Insisto en el hecho de que todos los perros necesitan una serie de cuidados. Ahora bien, si la parte más visible del acicalado concierne al manto, y por tanto no afecta a las razas de pelo raso, los cuidados que hacen referencia a los ojos, a las orejas, a las glándulas anales, a los dientes y a las uñas, son comunes a todos los perros.

El estado físico del can influye sin duda alguna en su estado anímico, y en nuestra propia manera de verle. Todos los peluqueros lo saben: en marzo los salones caninos se llenan de perros con el pelo áspero, sucio, cojeando con unas uñas larguísimas, los ojos llorosos y las orejas sucias. No han visto el cepillo en todo el invierno. Dos horas más tarde, el dueño recupera un perro limpio, cepillado y con el pelo igualado y lustroso. Al verlo le cambia la cara: parece como si lo viera por primera vez después de meses.

En los casos más extremos, la falta de higiene puede perjudicar directamente el comportamiento del perro. Por ejemplo, unas uñas demasiado largas pueden disuadir a un perro, en un principio deportista, de efectuar cualquier desplazamiento superfluo; el pelo delante de los ojos hace que algunos animales se vuelvan desconfiados, temerosos e incluso agresivos, porque el perro, al ver mal, se siente amenazado y actúa a la defensiva.