cortos

Por Juan Carlos Ortiz

"Cortos relatos del mundo de las ideas escritos desde
mi BlackBerry @ 30 mil pies de altura."

Este libro pertenece a un nuevo mundo, el de la globalización digital, sin fronteras geográficas y con historias que vuelan sin límites por todo el planeta. Tuvo como objetivo ser escrito en su totalidad desde mi BlackBerry y así se cumplió.

• Idioma: Español
• Editorial: Juan Carlos Ortiz
• Fecha de lanzamiento: 21 sept 2010
• ISBN: 9781452492742

Juan Carlos Ortiz

El Dr. Juan Carlos Ortiz se graduó en 1954 del Instituto Bíblico Rio de la Plata en la Provincia de Buenos Aires, Argentina. Es fundador de cinco iglesias y fue pastor de la iglesia evangélica más grande de Buenos Aires desde 1966 hasta 1978. El Dr. Ortiz ministró y enseñó en convenciones, congresos, universidades, seminarios e iglesias en cinco continentes. Durante cinco años, fue productor de la serie de televisión «La Hora del Poder», la cual era transmitida en una docena de países latinoamericanos. También fue productor de dos series de radio, «La Hora de la Fe» en Argentina, y «Una cita con Juan Carlos Ortiz» en el sur de California. Contribuyó en el Congreso Internacional para la Evangelización Mundial de 1974 en Suecia, junto a destacados líderes evangelistas como Billy Graham. El Dr. Ortiz y su esposa, Martha, tienen cuatro hijos y seis nietos y residen en Laguna Niguel, California.

Vista previa del libro

Todos los días me levanto. Todos los días me levanto y le doy gracias a la vida. Hoy también. Porque la vida ha sido y será la mayor fuente de inspiración que me ha permitido ver, entender, sentir, conocer y crear alrededor del mundo. Porque la vida me ha llenado de experiencias maravillosas que espero empezar a compartir con este libro.

Será como un efecto licuadora pues de aquí saldrán las historias y las reflexiones que se han mezclado durante años en la vida de un creativo dedicado al mundo de la comunicación, a mercadeo y a la publicidad. Un creativo colombiano que ha tenido la oportunidad de manejar una empresa en su país natal, una empresa en Latinoamérica y una empresa en Estados Unidos. Un creativo colombiano que ha dado vueltas por el mundo entero desarrollando campañas publicitarias y lanzando productos, desde detergentes en el Oriente Medio hasta champús en China; un creativo colombiano que le ha tocado trabajar con los grandes gurús del mundo, con las marcas más representativas y en los lugares más exóticos del planeta. Por eso también estoy agradecido.

Pero sobre todo, un colombiano que sufre pidiendo visas para ir a todas partes mientras la mayoría de sus colegas no las necesitan, y por eso le cuesta el doble llegar a tiempo a las reuniones en cualquier sitio de esta aldea global.

Un ciudadano colombiano que trabaja muy duro tratando de dejar en alto la imagen de nuestro país y que se desmotiva también con las malas noticias que salen de nuestra tierra en cualquier geografía. Esta es mi introducción. La introducción al alucinante y atractivo mundo de las ideas, al mundo de la gente, de los que piensan y de los que ejecutan, de los problemas y las soluciones, de la constante búsqueda y ruptura de paradigmas, los cuales no dejan de caer.

Y LA NAVE VA

La vida corporativa puede tener varias facetas y varias caras. Pasa por ser soñada, por ser estresada, acelerada, incontrolable, pero sobre todo nunca deja de ser prestada. Porque todo lo que se tiene en el mundo corporativo es prestado, y tal vez en entender esto radica su éxito y felicidad.

Hace unos años me encontraba en Estados Unidos listo para asistir a la convención mundial de una de las compañías de comida más grandes del mundo donde soy uno de sus creativos publicitarios. Este evento fácilmente reunía, como una torre de Babel, a más de cinco mil personas del planeta por una semana.

De repente, a las nueve de la mañana, la entrada fue drásticamente interrumpida por un grupo de seguridad que anunció que por motivos de posible terrorismo tendrían que hacer un chequeo interno del centro de convenciones. Obviamente algo de conmoción se generó. Nos pidieron retirarnos y volver a las once, así lo hicimos. Comenzaron los rumores de pasillo sobre lo que ren realidad estaba sucediendo, y finalmente lo supimos. El presidente mundial de la compañía, quien daría apertura oficial a la convención, había amanecido muerto de un paro cardiaco. Una historia inesperada. Para mí fue un shock inmenso. Los presidentes también mueren.

Consternada la gente, se esperaba a que la junta directiva mundial de la empresa se reuniera para dar a conocer el futuro y sus siguientes pasos. ¿Se cancelaría la convención que estaba lista, pero que no había comenzado?

Hacia las tres de la tarde, la junta anunció una gran asamblea para dar los comunicados, allí llegamos todos. Salió un miembro directivo al escenario, tomó el micrófono y oficializó lo sucedido. Dio palabras de pésame y ahí mismo anunció la elección de un nuevo presidente mundial. Ahí mismo.

Yo estaba petrificado. Subió al escenario el nuevo presidente mundial, pronunció sus palabras y confirmó que la convención se realizaría y que todo seguiría adelante. Y así fue: una semana de convención