¿Quién tiene razón? ¿Los ketos o los veganos?
Si fuera así de fácil, este artículo sería muy corto. Tanto la calidad como la cantidad de la carne que comes dictan su impacto en tu salud. Mientras que la ciencia muestra las consecuencias negativas para la salud de los que consumen comida ultraprocesada habitualmente, “las pruebas en contra de comer carne roja de buena calidad de manera casual no son tan obvias”, declara Federica Amate, científica médica y nutricionista. No es lo mismo el salami que el solomillo. “La carne roja ha sufrido una mala reputación”, afirma Matt Hodges, asesor nutricional y fisioterapeuta que ha trabajado con el equipo olímpico británico y con atletas de CrossFit. También añade que existen muchos factores que considerar, como la forma en la que se produce y se cocina la carne, las pautas generales de alimentación y el estilo de vida. En resumen: no hay una única forma correcta de comer.
¿Qué se considera carne roja hoy en día?
La carne se clasifica en blanca o roja en función de su nivel de mioglobina, y no solo de su aspecto. Carne de ternera, de cordero, de cerdo, de venado y de cabra: todas valen y además puedes combinarlas. “Los valores nutricionales varían según el tipo de carne roja, pero todas aportan nutrientes valiosos como proteínas, hierro, zinc y vitaminas del grupo