Área afectiva y emocional
Tener contención de la familia y los amigos ayuda a vivir más y mejor.
Con ese objetivo, también, es importante darse tiempo, espacio y atención a uno mismo.
Otro potenciador de las emociones positivas es el ejercicio. Contrariamente a lo que podríamos imaginar, a través de la contracción y relajación de las fibras musculares y por la secreción de endorfinas, la actividad física nos hace sentir mejor, más activos y con ganas de hacer cosas.
Desarrollo de fuerza y resistencia
Muchos trastornos, como el dolor de espalda o cintura, se deben a la disminución o a la pérdida de fuerza y resistencia musculares. Para combatirlos, la actividad física ofrece beneficios:
• Mejora la fuerza y resistencia musculares para poder sostener las tareas diarias y la práctica deportiva.
• Favorece el depósito mineral óseo, con lo cual se evitarán problemas a nivel de la columna y cadera, principalmente conocidos como osteoporosis.
• Evita la reducción del metabolismo basal, con lo cual impediremos una acumulación precoz de depósitos grasos.