Brujería: La guía definitiva de la magia popular y la brujería en América Latina

Por Mari Silva

Si quiere aprender sobre la magia popular latinoamericana y la brujería, siga leyendo...

 

¿Se ha preguntado alguna vez qué es la brujería?

 

¿Siente o percibe un llamado específico, pero no está seguro de qué es?

 

¿No se atreve a explorar porque no sabe por dónde empezar?

 

Si es así, este libro es para usted.

 

En estas páginas podrá:

• Aprender prácticas de rituales para ayudarle con la protección.
• Potenciar su prosperidad con el uso de la brujería.
• Descubrir el secreto para atraer el amor a su vida.
• Aprender cómo es la brujería en los tiempos modernos.
• Descubrir las hierbas más básicas con las que puede trabajar.
• Aprender lo que significa practicar la brujería en la vida cotidiana.
• Descubrir la conexión entre usted, sus guías espirituales y sus ancestros.
• Aprender a adivinar los secretos del pasado, el presente y el futuro con el uso de los cuatro elementos.
• Descubrir cómo puede obtener información con sus sueños.
• Aprender métodos y técnicas prácticas para ejercer la brujería como los profesionales.
• Conocer las figuras divinas que más importan en la brujería.
• Descubrir cómo deshacerse de los obstáculos que le impiden alcanzar el éxito para que finalmente pueda lograr sus metas.
• Aprender la importancia de las limpias y varios métodos que puede usar para que la energía vuelva a moverse libremente.
• Descubrir por qué debe practicar hechizos de destierro y cuándo es apropiado.
• Aprender cómo usar la magia de las velas para ayudarle a usted y a su cliente.
• Entender las expectativas dentro de la relación entre la bruja/o y el cliente.
• Y mucho más.

 

Con este libro como punto de partida, descubrirá las mancias, las limpias y todo lo que existe entre ambas. Cuando termine el libro, tendrá más valor para responder a la llamada de la brujería porque no se sentirá a ciegas.

 

¡Consiga este libro ahora para aprender más sobre la brujería!

• Idioma: Español
• Editorial: Mari Silva
• Fecha de lanzamiento: 5 may 2022
• ISBN: 9798201183301

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Introducción

Practicar la brujería no es solo ser brujo o bruja. Cuando la mayoría de la gente piensa en brujería, lo hace en términos muy genéricos. La brujería es algo más que quemar velas o realizar hechizos. Tiene un propósito único, una estructura y otros elementos que solo se encuentran en el marco de esta práctica. Por lo tanto, sería inteligente no asumir que esta práctica es lo mismo que el vudú, el hoodoo o los conjuros tradicionales. La brujería moderna es el resultado de años de rica cultura y prácticas transmitidas de una generación a otra. Aunque puede tener algunas similitudes con otras formas de brujería y prácticas mágicas, se distingue fácilmente de todas ellas.

El hecho de que tenga este libro en las manos ahora mismo significa que se ha sentido atraído por el mundo de la brujería. Algo dentro de usted sabe que este es su camino, y que debe recorrerlo. Si lleva mucho tiempo con la duda de responder a la llamada, está de suerte porque ha elegido el libro perfecto para empezar. A diferencia de otros libros del mercado, este le resultará muy fácil de entender. Aborda la brujería y sus prácticas de forma sencilla para principiantes.

Todo está explicado con un idioma sencillo, y cada hechizo que va a encontrar aquí es algo que puede realizar sin preocuparse de si puede obtener los materiales necesarios o no. Este libro le dará instrucciones prácticas para cada ritual y le ayudará a entender el porqué de lo que hace. De esta manera, tendrá una experiencia verdaderamente relevante en lugar de simplemente actuar sin tener en cuenta el significado de la brujería.

Es bueno mencionar que incluso si no es hispano, puede practicar la brujería. Piénselo así: hay budistas africanos, asiáticos cristianos, latinoamericanos que practican religiosamente el vudú, etc. Este libro da la bienvenida a todo el mundo a seguir el camino de la brujería siempre y cuando exprese respeto por los conceptos y las prácticas. Lo importante es que no se apropie culturalmente de lo que aprenda en este libro o a lo largo de su camino en la brujería.

Desde aceites y hierbas hasta velas y baños, esta guía cubre todo lo que necesita saber. Para cuando llegue al final, se sentirá más seguro con esta forma de vida, y cuanto más practique lo que ha aprendido, más profunda y rica será su vida. La brujería no es un camino para todo el mundo; es un camino que le llama específicamente. En otras palabras, si se supone que es un brujo o una bruja, tendrá un sentimiento de extraña certeza de que fue elegido para practicarla. Si este es el caso, está a punto de embarcarse en un viaje inolvidable y profundamente transformador. Si resulta que esto no es para usted, acabará con un profundo respeto por la brujería. En cualquier caso, este libro habrá cumplido su objetivo.

Capítulo 1: Fundamentos de la brujería

Las mujeres y los hombres que practican la brujería se llaman brujo y bruja, respectivamente, que se diferencian de los curanderos y las curanderas. Si usted es un lector que prefiere formas de identificación no sexistas, comprenda que no es del todo conveniente cambiar todo el léxico español, ya que el género es algo muy importante en la lengua. A partir de ahora, cuando vea brujo o bruja, asuma que se habla de practicantes de la brujería. No hay preferencia por ningún género, ni se pretende discriminar a nadie.

Brujería y cultura

En la brujería existen los brujos o brujas y los curanderos o curanderas. Mientras que la gente suele venerar al curandero, el brujo suele ser tratado con miedo y rechazo. Nadie se sorprende cuando entra en el local de un curandero, pero si va a ver a una bruja o brujo, más vale que lo haga cuando esté oscuro y nadie pueda verle. En México, la gente tiene miedo de las brujas y los brujos. No es buena idea mencionar que es una de estas personas a menos que esté seguro de que habla con gente que le aceptaría. La brujería para un estadounidense no es lo mismo que la brujería para un mexicano. Un estadounidense puede pensar en cosas como hierbas, aceites e incienso, y tratar de curar a la gente con la magia de las velas, pero para el mexicano promedio la brujería tiene que ver con cosas horribles como robar el alma de la gente.

Los practicantes de brujería americanos son más como la hechicera o el hechicero. Aunque preferirían que se les llame brujo o bruja. Tiene que entender que el uso de los términos brujo y bruja es incorrecto cuando se utiliza en el contexto equivocado, y puede causar problemas políticos. Si no forma parte de la comunidad, por favor no se refiera a usted mismo como brujo o bruja. Es decir, las personas de una determinada raza pueden referirse a sí mismas de una manera determinada, pero cuando otros que no son de esa raza utilizan esa palabra, es completamente racista e inaceptable.

Aunque pueda resultar increíblemente frustrante, lo cierto es que el lenguaje es complicado. Los significados de las palabras pueden cambiar en función del lugar de procedencia, de las convenciones sociales y de con quién se hable. Debe entender cuándo está bien referirse a usted mismo de una determinada manera y cuándo sería una falta de respeto.

Historia

La brujería tiene varias influencias, desde la brujería africana hasta el catolicismo y otras religiones. El uso que haga de ella depende exclusivamente de usted. Hay muchas prácticas espirituales en toda la diáspora africana y latina, como la umbanda, el candomblé brasileño, la santería cubana y el vudú haitiano. Las brujas latinoamericanas son completamente diferentes de las europeas porque mezclan la espiritualidad con la religión. También encontrará que hay una fuerte influencia de la magia africana, así como de los rituales taínos y del espiritualismo europeo. En otras palabras, esta maravillosa mezcla de espiritualidad significa que hay algo para todos. La brujería es muy diferente de las otras religiones caribeñas que se basan en prácticas africanas. Lo que haga en sus rituales depende de sus decisiones como practicante. Los espíritus con los que se interactúa son espontáneos, lo que significa que no se pueden imponer doctrinas de culto institucionalizadas a quienes practican la brujería, y no se puede decir que haya una estructura establecida a la que haya que atenerse.

Mucho antes del espiritismo, los africanos esclavizados que vivían en América Latina y los indios taínos estaban convencidos de que había espíritus a los que podían llegar y con los que se podían comunicar cada día. Esta creencia se mezcló inevitablemente con la de los practicantes católicos gracias a los colonizadores. Los primeros fundadores del espiritismo estaban muy interesados en la práctica de la brujería, a finales del siglo XIX. Esto hace que uno se pregunte si hubo algún conflicto de intereses o motivo oculto con la adopción de conceptos de la brujería por parte de los espiritistas.

Desde los primeros inicios de la magia, que se remontan al año 931 a. C., la brujería se ha hecho popular en todo el mundo. Nicolás Ramos fue el arzobispo de Santo Domingo. En el siglo XVI, desempeñó un papel vital y no muy bueno en la proliferación de la brujería en América Latina. Ramos escribió en su diario sus experiencias con los brujos y brujas negros que se dedicaban a la adoración del diablo. Afirmaba que el diablo venía en forma de cabra. Cada noche maldecían a Santa María, a Dios y a todos los sacramentos de la santa iglesia delante de esta cabra. Este discurso calumnioso no favoreció la práctica de