Coincidensia O Destino

Por Haydee Sosa

Desidi haser esta fantasia por 50 aos de confusion del pueblo cubano Que no los deja encontrar su paz. Buscando el alientos tal vez en mitos Claudia representa al pueblo, Marjinado y confundido yeno de temores Y luchando siempre no perder el cordon unblicar con el que todos nasemos

• Idioma: Español
• Editorial: Xlibris US
• Fecha de lanzamiento: 20 may 2014
• ISBN: 9781493169160

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Copyright © 2014, 2015 by Haydee Sosa.

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Rev. date: 01/19/2015

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Contents

SANTA MARTHA

ÍNDICE

SANTA MARTHA

Es mi pueblo donde nací, pequeño, y el toque de sus tambores cada tarde, reunirse se convierte en una tradición o costumbre, arroyar detrás de las congas era la única diversión del pueblo, donde aportar ideas y crear nuevos pasos y estilos eran metas, sin recursos crear vestuarios a fin rumberos, con coloridos que opacaran la tristezas de tantas necesidades y indigencias, escondiendo los sentimientos en alcohol, el central es la única fuente de empleo del pueblo, la marginalidad no se puede esconder es evidente y desconcertante el gobierno se ha encargado de abolir tradiciones, cultos, costumbres religiosas que des inhibir sus intereses, como control totalitario, educación, no se que se llama educación ir a la escuela. y un compañero te espere fuera. para robar algo para comer porque está muriendo de hambre cuál es el contraste de buenos modales, los problemas sociales en mi pueblo no son discutibles no hay nadie que pueda darse cuenta de ello, es mejor virar la cara y aprender a convivir con ellos mas cuando naces en un costumbrismo llamado ideología política que no conduce a nada es como pertenecer a la nueva era satánica o exterminio de sociedad cubana

Jamás tuve educación de culto religiosos, las contravienes eran la clave, esa búsqueda del infinito y lo real o donde apollarte en debilidades, los niños nacen marcados o su visión los va cambiando, o una energía poderosa que esta alrededores que va guiándote el camino, me gustaba tomar guarapo la sensación de adrenalina que conseguía superaba cualquier comportamiento, y es la teoría ahora comprobada que la azúcar le hace daño a los niños, realmente no tenia frenos, mi comportamiento interactivo lo tranquilizaba en puros movimientos, mi niñez me marco con mis recuerdo.

Un mundo perfecto creía, no conocía otro. Mi madre siempre preocupada con sus enseñanzas sobre mi educación, mi padre quería que fuera libre como las aves me llamaba tojosita nunca vi a mis padres pelear ella lo esperaba cada día en la ventana, el llegaba en su bicicleta haciendo muestras de cariño, yo corría a su encuentro me hacia feliz su compañía.

Nunca borro de mi mente a pesar del tiempo mi infancia, en un rincón de la casa tenia magia. Pasaba largas horas de juegos con los juguetes heredados por mama, ella compartía en ocasiones mi rincón le brindaba café mágico, le contaba historias donde ella se divertía y reía mucho, nunca olvido son recuerdos marcados por anécdotas vividas y gestos de mi madre.

Mamá se apasionaba con los toques de tambores en las tardes, en mi pueblo los morenos eran descendientes de africanos pero muy lejanos y en su sangre corría el Tambor, los movimientos del cuerpo y su deseo de expresar sus sentimientos atreves de la música realmente avía poco que hacer para pasar un buen rato ella se quejaba de la rutina.

Los rituales para mejorar de vida eran semanales y tal cambio no llegaba hojas para estregarse el cuerpo y arrodillados pidiéndole a un pequeño san lázaro. Hay que hacer promesas, y cumplirlas decía mamá, todo lo quieren regalado, me dejare el pelo largo y veras concedido el milagro, Cuál es tu milagro dice papa.

El que quiere toda mujer, buenas ropas, perfumes, collares, como en las fotos de mis abuelas no me gusta vestirme todos los domingos el mismo vestido me tiene cansada, no puedo pasear en el parque siempre me verán el mismo y triste trapo.

Mi padre le contesto pensé queras comer mejor un viste de res o que se cure la ñañara que tienes en la rodilla.

Ella se enojo me pongo mercurio cromo todos los días papa le grita, enseña a tu hija que hay que estudiar.

Mis vecinas todas estudiaron, son doctoras, ingenieras y contadoras y no tienen vestidos, ni maridos le decía papá y no protestan tanto. tienes que conformarte soy ingeniero algún día me subirán el salario, mi madre cansada y aturdida se sentía desgastada joven bonita se miraba en un espejo roto y las lagrimas corrían y papá al verla fue donde ella.

El egoísmo y ambición es la plaga de enfermar el alma,

Mi madre irritada le dijo desde hoy oriéntate porque cuando una persona no tiene ambiciones se conforma y está tirado todo pensando en pececitos de colores alguien viene y se adelanta.

El la miro la abraso y dijo tienes razón, hay que pedir un milagro. las paredes de mi casa reflejaban el mundo en que vivíamos tristeza y gris.

Hija no seas conformista como nosotros, lucha por una diferencia hay otro mundo.

Yo miraba y jamás veía otro mundo, al central pitar todas las mañanas y las bicicletas pasar corriendo y las gentes gritar. no sé cuál es el mundo al que mama se refería. Papá se refería siempre.

Si hay buena zafra abra fiesta en el pueblo y mi madre le contestaba

Eso no se come. Ni se usa y lo sabes bien. Yo no sé a quién le tengo que pedir que baje unas intimas cuando estoy con la menstruación cual es santo o que dios. porque la solución romper trapo y ponérmelos en el culo el mal olor a sangre por no tener jabón para bañarme y eso se llame egoísta la madre de quien le puso ese nombre.

Así era mi vida la de una niña que quería cambiar la miseria al menos por bailes y collares los lamentos de mi madre joven bella y empobrecida.

Como puedo encontrar al mundo del que habla mi madre pensaba, seguro esta en las nubes, yo tengo que buscar la forma de llegar a ese mundo mama dice es más bonito y ella quiere collares, perfumes y vestidos yo se los voy a traer para que se mire en el espejo roto que ella no le gusta lo toque, me arrodille frente a san lázaro y le pedí quiero ir al lugar donde están los collares para traérselos a mi madre.

No me contesta. Hay que hacer una promesa, mi promesa es aprender a bailar a ritmo de los tambores estoy segura san lázaro me pondrá una escalera para que le traiga ropas a mi madre de las nubes. es allá por que donde vive mi abuela es igual, mama solo trae azúcar para hacer arroz con leche. hoy le preguntare a mi padre donde queda ese lugar que tiene muchas cosas.

Claudia el próximo mes comienzas en la escuela comento mi madre…aprenderás a leer y escribir y yo buscare la forma de trabajar nos hace mucha falta, pero antes iremos hacerle la visita a tu abuela Yeya ella nos extraña.

Conteste muy feliz claro me gusta la casa de yeya, siempre está haciendo dulces, y sus historias. Qué bueno volveré a escuchar las historias de mi abuela queriendo molestarme cambiando la pronunciación del nombre para molestarme.

Cuando mi padre regreso de trabajar lo esperamos en la ventana como siempre, yo le gritaba papa te tenemos una sorpresa mi padre siempre nos besaba primero a mi madre y después a mí, y me dijo

¿Cuál es tu sorpresa?

Iremos a casa de Yeya antes de yo comenzar la escuela, nunca olvido la respuesta de papa, no me gusta quedarme sin mis princesas.

Solo por una semana dijo mi padre, me bañare e iremos al parque un rato para que Claudia juegue.

Salte de alegría quería ver como bailaban con los tambores tenía una promesa a san lázaro aprendería a bailar con el ritmo moveré los hombros y lavare ropa ha si le dicen los hombres a las que bailan, lava, lava bien.

Mamá lo hace ella baila bien.

Al llegar al parque el sonido del tambor me izo arrollar y mi padre dijo una exclamación, hay Dios rubia con sangre caliente rumbera, y mamá se reía y me decía mueve los hombros y las nalgas rumbera.

¡Como yo pensé iba ser patona!

Todos se admiraban ver una rubia que le gustara el toque de tambores, la abuela de mamá es mulata dijo ella y heredamos el movimiento y la locura de la vieja.

Arrollamos por todo el parque detrás de los tambores y cantábamos yema ya, yema ya que se lo lleve ya, repetíamos lo mismo yema ya, yema ya que se lo lleve ya muy divertido para mi cumpliría mi promesa aprenderé a bailar con el ritmo de tambores, en el vecindario era la única diversión las hamacas en el parque no alcanzaban para todos los niños.

Al llegar a mi casa mama dijo tienes mucho sudor te bañare para que duermas como los ángeles.

Le dije a mamá como son los ángeles, ella me izo una historia que nos protegían de noche y de día y sabían todo sobre nosotros, que aunque no los veíamos estaban invisibles todo el tiempo parado al lado de nosotros. Que por ese motivo no podía mentir ni coger cosas ajenas, siempre estas vigilada, mantuve en mi memoria que tenia siempre un ángel a mi lado.

No se cansan de estar parados, y quien le da comida.

Son invisibles hija no preguntes tanto.

Así era mamá cuando no savia que contestarme.

Conseguiré algún libro que hable de los ángeles.

Seria para salir de mi, ella me dijo que avía estudiado por gusto porque lo que ella estudio no tiene trabajo, pero que algún día las cosas cambiarían y ella iba a trabajar.

Entonces le dije claro que cambiarán mamá la abrase, hice una promesa a San Lázaro aprenderé a bailar, para poder crecer e ir al lugar donde hay collares y perfumes yo te los traeré, recuerdo mi madre me abraso fuerte con lagrimas.

Hija tu eres muy chiquita no te preocupes por esas cosas tienes que crecer ir a la escuela tener una carrera.

Mamá tú dices que estudiaste mucho y no tienes trabajo.

Mamá lloró y le seque las lágrimas jamás olvidare su contesta, la política tiene atrapado este país, prometieron y nunca cumplieron estamos convertidos en escombros y sin reparación.

Yo realmente no entendía los comentarios pero mi promesa la cumpliré, llenare de collares a mi madre y de ropas bellas y la are sentir esa palabra que ella usa una mujer importante.

Entiendo que fácil es prometer algo y difícil es cumplirlo pero no desilusionarse cumpliré llegara el momento, San Lázaro hará su trabajo y yo cumpliré con mamá ella tiene que esperar que yo sea grande y baile bien al toque de tambores, ya abre crecido lo suficiente para ir sola a cualquier lugar sin que sienta miedo, pueda viajar al lugar mágico donde las ropas sobran. Seguro trabajare bailando en un lugar con trajes grandes y un señor con un tabaco me pagara los dólares y comprare una muñeca para mí y vestidos bien largos para Virginia.

Mamá le dijo a papá que quería yo conociera el mar, savia más o menos como era; muy grande con mucha agua y era azul o algunas veces verde, ya tengo traje de baño, es naranja y listicas verdes, María se lo vendió a mamá ya no le sirve a su hija y yo me lo pongo y me miro en el espejo roto y es bello me siento grande como las de tele las que bailan.

Mi tía Virginia sabe coser, ella puede construirle uno igual a mi prima Raquel, le gusta vestirnos iguales y a mí me gusta me siento grande como mi prima estoy feliz por volver a estar con ellas y montarme en el tren y ver el paisaje, los animales pasare mi cumpleaños divertida con mi prima y mi abuela que emoción, solo que mi padre no estará.

Pasaron muchos días esperando para ponerme el traje de playa tenía mi bolsa lista para montar en el tren, mi abuela me dijo por teléfono me hará una fiesta de cumpleaños solo que papá no ira, tiene que trabajar y cuidar a mi abuela Tita ella solo tiene a él y a mí y no le gusta salir y hace peleas por todo y mamá dice prefiere se quede con él.

Llego la tarde y le pedí a mi madre ir al parque, no quería perder el entusiasmo de querer bailar con tambores se burlan de mi porque los blancos no tienen ritmo, pero yo lo siento en mi sangre, el cuerpo se mueve solo al compas, mamá se ríe al verme metida de tras de la conga para mí no es una gracia es un compromiso siento que cuando bailo alcanzo un nivel de entendimiento con mi cuerpo si le explico a mi madre creería estoy loca.

Me canse detrás de la comparsa, Lazara una negra del barrio me está enseñando a mover los hombros es la mejor que baila en mi pueblo al ritmo de tambores todos la siguen pero nadie la supera y mi meta es bailar como ella. Mamá se divierte en verme con tanto intento detrás de la conga es muy divertido hay muchas niñas bailando es bello poder recordar y poder contar cuanto pasó en tu niñez.

Ser diferente, y ya estar comprometida. Como lograr cambiar algo que está lejos de tu alcance, como entender que hubo una vida diferente que lo vivieron los tátara abuelos y que quedan recuerdos y ruinas y tus padres no conocieron es un trabalenguas real, miras a tu rededor y todos están en la misma, nadie tiene lo que quiere mamá y menos lo he visto pero ella lo tendrá, es una misión alcanzable, ya estoy aprendiendo a bailar, todos hablan siempre de lo mismo cuando cambiará este país condenado a resumirse en cenizas yo estoy creciendo y me doy cuenta de tantas historias dudo que no sean verdad todos hablan del recuerdo, claro que hay algo mejor las flores son bellas tienen color y ha si es la vida llena de colores.

Mañana nos vamos a casa de tu abuela me dijo mama.

Di saltos, extraño a todos pero no me gusta dejar a mi padre solo, siempre sus mimos me hacen falta, serán solo unos días, le dije a mamá tengo mi mochila lista. Al fin conoceré el mar. Tal vez después del mar este el lugar bello que voy a conocer cuando este grande y un día volveré con maletas llenas de cosas para mi madre y no tendrá que poner detrás del refrigerador el blúmer para que se le seque tendrá muchos y de muchos colores.

Le di un beso a mi padre y lo abrase, te quiero mucho, cuando vuelva te daré miles de besos papá me abrasó y me dijo.

Te amo eres mi vida.

Y yo le dije y tú la mía nos abrasamos fuerte, besos y mas besos,! el me dijo.

Acuéstate por qué madrugaras y no queras levantarte.

Al acostarme me vino a la mente, cuando regrese me portare bien para que todos los días pueda ir al parque con la negra Lazara y bailar. Sentía me sacudían levántate que el tren sale así hora y es lejos y tenemos que ir caminando en realidad me tire de la cama y corriendo fui al baño tenia deseos de salir a pasear, le dije a mamá ya estoy lista, ella quedó asombrada, siempre doy problema para salir, ella pelea y para peinarme siempre hay problemas, cuando salimos a la calle había tremendo fanguero había llovido y los charcos me mojaron todos los pies mamá empezó a pelear.

Estoy cansada de este país asqueroso que solo hacen prohibir y ni una calle sirve.

Estos son los únicos zapatos y están desfondados, llegamos todas enfangadas a coger el tren, ella trató de limpiarme un poco pero era inevitable, nos montamos yo cogí la ventana para mirar, al rato el tren arrancó con su enorme bulla y salió a su destino, en el camino pase en la ventana mirando y mamá explicándome que eran diferentes pueblitos con una sola tiendita de abastecimiento realmente me parecía bonito tantos árboles. Tenía hambre y cogí de la bolsa un pedazo de pan estaba algo duro pero me lo comí tenia deseo de llegar, tantos brincos me daban mareo. El tren en pesó a pitar y mamá dijo llegamos seguro tu tía nos espera efectivamente por la ventana miré, mi tía nos esperaba saqué la cabeza y grité tía Virginia aquí, aquí, ella me vio puso gesto de alegría.

Al fin llegamos después de tantos brincos, y siempre oyendo los mismos comentarios, la gente esta protestando, están poniendo carteles y realmente no se dé que se trata, al bajar mi tía me abraso duro y me besó y me dijo.

Que grande estas Claudia?.

Eso me alegró tengo deseos de estar grande para cambiar cosas que no me gustan, mamá cambió el rostro estaba eufórica de tanta alegría al ver a su hermana, mi tía dijo.

Les tengo muchas sorpresa para que la pasen bien, hoy no caminaremos un vecino nos llevará a la casa.

Tomamos el carro, apretadas pero muy contentas en marcha mi tía dijo tengo una cabaña en la playa para disfrutar el cumpleaños de Claudia. Yo me asusté del grito de mamá.

Que rico hace años no disfruto de nada, solo vivo del te acuerdas, es hora de algo diferente, esta mierda de país retrogrado sin esperanzas solo podemos mirarnos la cara unos a otros.

Yo grité tengo traje de playa, mamá dijo.

Yo me bañaré aunque sea desnuda y todos rieron.

Al llegar la casa de mi abuela, se armó el alboroto con nuestra llegada, muchas emociones lágrimas de mi abuela al vernos, pero rápido pasó, mamá gritó.

Quiero comida rica hace tiempo no como con sabor.

Avece mi madre exageraba para manipular a su familia y que la complacieran un poco, mi abuela dijo, vamos a comer pato en salsa, con mucho silencio yo ya sabía de que se trataba, el pato era robado a algún vecino, mi abuela decía, en boca cerrada no entran moscas, esta es la educación que nos ha dado este gobierno robar para poder comer y si haces alguna musaraña te pateo el culo.

Virginia protestaba, a las niñas hay que hablarle bonito y llega con su jodedera si les hablo bonito no comen y si no robo tampoco.

Le dije abuela estoy cansada, en mi casa nada mas hablan de culo y aquí lo mismo.

Todo lo referían al gobierno, que tenían estudios y nunca habían trabajado en lo que estudiaron, que antes tenían buenas casas y ahora se están cayendo y no le venden materiales y todos los días los mismos comentario, le conté a mi abuela que estaba aprendiendo a bailar y que le hice una promesa a San Lázaro, ella me dijo.

Nunca cuentes a nadie que le pediste a San Lázaro para que tu promesa se cumpla.

Te voy a llevar antes que te vayas a santiguarte para que tu devoción con San Lázaro te guie y se cumpla tu pedido.

Mamá comenzó a pelear, esta niña esta chiquita para esas cosas.

Mi abuela le dijo, las gente nacen con su devoción, deja la niña haga sus sentimientos.

Yo salté, solo quiero ayudarte, es para ti mamá, se quedó asombrada, que yo estaba pidiendo para ella, corrió y me apretó hija no tienes que estar preocupada por mi, estas chiquita te falta mucho. Ahora disfruta tus días y olvídate de esas cosas mi abuela me decía si eres santera desenvuélvete y deja a esta idiota que nació para no servir.

Mi prima Raquel me regaló una muñeca, la confeccionó junto a mi abuela de tela, muy linda con su pelo y vestida con su traje de cuadritos rojos, la besé me pareció linda yo no tenía ninguna, es muy apreciada por mí, será mi compañera y amiga, besé a Raquel por su gesto, le pondré nombre, Candy como la prima de mamá, Raquel me dice que cuando regresemos de la playa iremos al central a jugar ya no funciona esta solo ya no muele caña, como todas las conversaciones, te acuerdas cuando el central funcionaba trabajó parte de la familia por años y solo queda te acuerdas.

Cumplo 6 años y es que comienzo la escuela ya que no me permitieron entrar por fecha mamá dice que no me preocupe que lo que hay en el país es poco un año más o uno menos no tiene importancia mi abuela me tiene pastel y refresco pero mi padre y mi Tita no están a la verdad no estoy triste nunca tengo fiestas de cumpleaños, porque mamá dice la dulcería está cerrada por que el gobierno la cerró, mi tía Virginia consiguió hacer la fiesta ya no recuerdo si tuve otra fiesta de cumpleaños, creo es la primera vez, y doy brinco de alegría estrenando zapatos y batas y tener pastel un día como ningún otro.

En la mañana todos están en alboroto pues nos vamos para la playa 3 días en una cabaña mamá está feliz, me besó en la frente y me dijo.

Has tenido buena celebración por tú cumpleaños.

La abrasé y le dije gracias, me vestí con unos chores y tenis estaba lista con mi bolsa y traje de baño y una pelota de aire para jugar con Raquel, ella todo el tiempo daba saltos de desesperación por irnos a nadar, la emoción es constante nunca había ido al mar, al fin llegó el transporte la gritadera, vamos, vamos, todos corrimos al carro; al montar estaba lleno de personas, no compartirían con nosotros, ellos tenían su cabaña separada, mi madre quiere no olvidemos el nombre de la playa redención su memoria era turbia según su memoria, estuvo cuando pequeña y no recordaba el nombre; por sus parques y comedores y muchos cangrejos. Todos gritaban eufóricos al destino, creo no me gustaba tanta algarabía. Mamá me conocía y me decía hay que aceptar a los que están alrededor de nosotros, vacaciones es diversión, relajación y me dio un beso en la frente, mi cara reflejaba que estaba asustada.

Tres horas de viaje cantando canciones y mucha risa, todo tenía que ver con el gobierno tema jamás olvidado, el tema sonaba pegajoso, nos quieres convertir en cenizas y no borraras mi risa, repetido al cansancio, al llegar todos empezaron a tirarse como salvajes del carro habían bebido alcohol durante el viaje, que alboroto, yo no sabía si estaba asustada o contenta realmente no me gustaba me empujaran o me tocaran mucho, cambiaban de canción con jabón, aceite y jamón seguimos la revolución tres horas en esa locura.

Cuando entramos a la cabaña me fascinó muy bonita más que mi casa pintadita con color rosado y blanco las camas limpias y tendidas y sillones de flores naranjas parecía estar en otro mundo. Toque los sillones me cautivaron sus colores, una pequeña cocina sin ollas para cocinar, corrí y le dije a mamá, quiero una casa como esta, ella muerta de la risa, imposible hija esto es del gobierno, me entristece siempre todo era del gobierno porque todo era de ese hombre gobierno todo era de él nada podía ser de nosotros.

Le pregunté a mamá si este era el lugar donde había muchos collares y ropas. Ella muerta de la risa me dijo.

No, no es este, aquí solo hay mar para divertirnos, el otro lugar se llama Estados Unidos de América.

Grabaré el nombre para nunca olvidarlo. Iré a ese lugar tan grande, tiene que ser más bonito que este, para que mi madre le guste tanto, Claudia ponte tu traje. Enseguida estaba lista, Raquel dando brincos y gritando vamos a bañarnos.

Tía en los estados hay playa.

Mi tía suspiro y dijo no le tires mas piedra a la luna déjala en paz.

Al fin salimos de la cabaña y caminamos un poco para llegar al mar. Quedé paralizada era infinito, no había fin del agua, lo vi hermoso y al mismo tiempo me dio miedo. Corriendo me subí arriba de mamá le dije llévame a tocarlo, ella me complació, las olas nos dieron en la cara y me asuste y grité, mi madre muerta de la risa me dice.

Estas conmigo no temas.

Realmente sentí pánico y ella me explicó.

El mar es peligroso si no sabes nadar. Pero para aprender tienes que ser flexible y no temer, sola nunca entres, tengo que estar a tu lado.

Yo me quede en la arena jugando y el agua me tocaba de vez en cuando real mente sola jamás entré, cargada con mi madre me gustaba y al mismo tiempo las olas me tocaba en la cara huía, la seguridad era afuera, el vaivén de las olas me daba sensación de peligro. Reía a carcajadas pero muerta de miedo. Mi madre entendió y dijo no te forzaré. Decidí jugar afuera. Miraba a mi prima como se divertía sus llamada eran contante y mi rechazo con los hombros, le decían la respuesta los cangrejos caminaban en la arena, se metían en los hoyos