AGUA
CLORAR EL AGUA POTABLE
En 1974 se publicaron dos ensayos emblemáticos que desvelaron cuál era la fuente de cloroformo en el agua potable. Encontramos al enemigo: nosotros mismos. La cloración del agua potable (“un proceso de desinfección que es crucial para mantener la seguridad microbiológica del agua”) interactuaba con la materia orgánica natural presente en la fuente de agua y creaba componentes clorados que no solo pueden generar sabores y olores extraños, sino que también podrían representar una potencial amenaza a la salud pública. Al día de hoy, se han identificado más de 600 desinfectantes residuales.
CÁNCER DE VEJIGA
Tras décadas de investigar la cuestión, parece que consumir agua potable clorinada durante toda la vida resulta en un “claro riesgo excesivo” de cáncer de vejiga (ver: “Cáncer). Estar expuesto durante cuarenta años podría aumentar las probabilidades de que la persona pueda padecer cáncer de vejiga en un 27%.