CORRER cuesta arriba es duro, pero hacerlo cuesta abajo duele, como te puede asegurar cualquier corredor de trail. Pero los entrenamientos cuesta abajo te pueden ayudar a ir más rápido.
Según un estudio hacer diez entrenamientos ‘modestos’ de descenso durante cuatro semanas mejoró la fuerza, el tamaño y la estructura de los músculos extensores de la rodilla, el tipo de mejoras que solo se esperan de un entrenamiento intenso de resistencia.