Mikel Zeberio (Ataun, 1952) es pura reflexión certera. En el mundo de la gastronomía lo ha hecho prácticamente todo: es cocinero, sumiller, investigador, Premio Nacional de Gastronomía (2018), ha escrito en prensa y ha dirigido una revista, hace 12 años que es profesor de producto en Basque Culinary Center y otros tantos que asesora Petra Mora, la mayor tienda online de productos gastronómicos. Le apasiona lo crudo.
¿Qué momento viven los productos gastronómicos?
Estamos viviendo una etapa, un tanto larga, en la que se le da poco valor a la calidad. A mí me importa la calidad propiamentedinámica. Las columnas jónicas que sostienen el mundo gastronómico no son las de antes. No tenemos un conocimiento exacto de lo que hablamos. Vivimos en un momento de lujuria y estamos jugando al pijerío y hay mucho pavoneo. Debemos volver a los caminos más sencillos de lo gastronómico, a lo que hacía mi madre, que sabía cocinar 100 platos donde el ingrediente principal era el huevo. Además, tendríamos que darle más importancia a lo nuestro. Está bien entender otras gastronomías, pero si tenemos que ir a la Isla de Pascua para resolver un problema de gastronomía, mal vamos
