INTERNACIONAL /FRANCIA
PARÍS.— Tres millones y medio de personas en toda Francia y 800 mil en París, según el Frente Intersindical que encabeza el movimiento social –1 millón y 119 mil, respectivamente, según el Ministerio del Interior–, se manifestaron el miércoles 22 de marzo por novena vez en 10 semanas para exigir el retiro de la reforma sobre las pensiones presentada por Emmanuel Macron, como piedra angular de su segundo quinquenio.
Al igual que las del martes 7, estas manifestaciones son las más importantes de las dos últimas décadas, pero esa vez, tanto en París como en numerosas ciudades de provincia, se multiplicaron brotes de violencia al acabar las demostraciones sindicales, que se llevaron a cabo como siempre de manera pacífica y organizada, o al margen de las marchas.
Hasta bien entrada la noche grupos muy móviles depaís debido a las huelgas en los servicios municipales de limpieza. Las autoridades hablan de 903 “funestas fogatas” en París.