Base de la pirámide alimenticia, y principal sustento de muchos pueblos originarios del mundo, los cereales aportan equilibrados sustentos esenciales a nuestra dieta diaria, gracias a sus principales propiedades nutricionales. Consumirlos por la mañana, como la primera comida del día, puede aportarnos las calorías y los hidratos de carbono necesarios para nuestro organismo, sin embargo, su ingesta a lo largo del día también nos beneficia. “Las hojuelas de maíz, los granos inflados o las barritas, son una opción practica para incorporar cereales en el desayuno, pero también pueden consumirse durante toda la jornada, en forma de granos, como el arroz, el mijo, el maíz, o en forma de harinas como en las pastas, amasados y panes”, afirma la Licenciada en Nutrición, Agustina Mori Karpenco.
Para Agustina, “el cereal es un alimento que aporta varios nutrientes. Tiene un 10% de proteínas, un 60% de hidratos de carbono, casi no contiene grasa, y aporta minerales y vitaminas, cuando se consume en forma integral, es decir con su cascara. En la cáscara de los cereales se encuentra la mayor parte de sus minerales, como el hierro y el calcio”.
A su opinión, la Dra. Elba Albertinazzi, miembro de la Asociación Argentina de Médicos Naturistas agrega que “los que aportan beneficios para la salud son los integrales, que poseen almidones con glucosa, pero también el gérmen, con proteínas y vitamina E; y