El natto es un preparado tradicional de soja cocida y fermentada con un bacilo, el Bacillus subtilis. La soja se remoja, se hierve y después se mezcla con este cultivo, dejándolo fermentar un tiempo.
El producto resultante son habas de soja enteras con un sabor fuerte y una especie de mucílago que las recubre — no gustará a todo el mundo—, que cuanto más se remueve más elástico se vuelve. En Japón es un alimento muy popular que se sigue tomando como desayuno, poniéndolo sobre un bol de arroz.