Cuando hablamos de cambio climático no solo hablamos de la contaminación del aire, las aguas y los suelos. Existe todo un conjunto de fenómenos entrelazados que afectan a la calidad de vida de los habitantes del planeta: energías, biodiversidad, deforestación, alimentación (y despilfarro), aumento de la población, transportes, falta de agua dulce, incendios, inundaciones, plásticos, residuos, acidificación de los océanos, agotamiento de materiales, la ausencia de una gobernanza global efectiva, etc.
En cuanto a la contaminación, me gustaría destacar aquí dos aspectos en los que creo que habitualmente no se insiste lo suficiente: 1) la interrelación entre contaminación, demografía y clases sociales, y 2) ¿es del mismo nivel la responsabilidad de los ciudadanos y la de las empresas y gobiernos?
¿Qué hay de verdad en las políticas públicas y de las grandes empresas (energéticas, comerciales, del sector del transporte, etc.) cuando