EN COYOMEAPAN, UNA EMBOSCADA PLANEADA DESDE EL PODER
COYOMEAPAN, PUE.– La tarde del lunes 9, 16 integrantes del movimiento indígena Unidad por Coyomeapan fueron emboscados. Un grupo de 40 policías estatales, entre los cuales había incluso guardias blancas presuntamente contratados por los hermanos Araceli y David Celestino Rosas, militantes de la 4T, los balearon.
Tres indígenas nahuas murieron, entre ellos un menor, y ocho más resultaron heridos en ese ataque ocurrido en el paraje de Cobatzalco, en los límites entre Zoquitlán y Coyomeapan, en la Sierra Negra, una de las regiones más marginadas de Puebla.
“Fue una ejecución extrajudicial, no un enfrentamiento” como lo ha divulgado el gobierno de Miguel Barbosa Huerta, afirma uno de los testigos. “¿Cómo un enfrentamiento? Si nosotros apenas traíamos un machete”, recalca.
Al albañil Marcelo Carrera Reyes, de 45 años, lo mataron de un balazo en el pecho; el campesino Teófilo Barrera Herrera, de 24, recibió en el abdomen un disparo a quemarropa; Omar Herrera Raymundo, de 15, murió desangrado en un hospital de Tehuacán luego de que le “florearon” el muslo de un tiro y todavía después le abrieron de un navajazo la zona inguinal.
Los sobrevivientes afirman que se trató de un operativo planeado
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos