Los buenos los feos los malos
en 1982, un informe demostró que la persecución policial y judicial a la que fue sometida durante años la industria de la basura —controlada por la Mafia en Nueva York— contribuyó a reforzar su terrible reputación y, con ello, su monopolio absoluto. Es decir, su mal nombre alejaba a los empresarios honestos del negocio dando así al crimen organizado carta blanca para seguir operando en solitario. “Un resultado perverso que apoya la visión de la reputación como una fuente de ventaja competitiva”, apuntaba Charles Fombrun en el best seller que revolucionó hace 25 años el concepto de reputación corporativa, Reputation: Realizing Value from the Corporate Image (“Reputación: aportando valor a través de la imagen corporativa”).
EL 54% DEL ACTIVO ES INTANGIBLE
El interés por la gestión de la reputación y los intangibles tuvo su punto de partida en las crisis de finales de siglo. Enron y su auditora Arthur Andersen fueron el máximo exponente de una serie de escándalos que “provocaron que los empresarios se dieran cuenta de que la reputación mal gestionada puede hacer desaparecer una empresa”, cuenta a FORBES Ángel Alloza, CEO de
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