Las turbulencias provocadas por el coronavirus y sus incertidumbres tuvieron un impacto importante durante el año 2021, pero la economía mundial ha mostrado signos de recuperación y la aviación en general, principalmente la privada, siguió por el mismo camino, debiendo mantener el crecimiento en 2022. Según datos del Registro Aeronáutico Brasileño actualizados por la Agencia Nacional de Aviación Civil (Anac), en 2017 y 2018, a pesar de los números ligeramente descendentes, el sector de la aviación se mantuvo dentro de las oscilaciones naturales del mercado. También de acuerdo con el RAB, 2019 con la cumbre en 2020, hubo fuerte y negativo impacto en el número de nuevos registros de aeronaves, resultado de la crisis mundialy de los efectos de la pandemia de covid-19. En 2021, el mercado de adquisición de aeronaves superó las expectativas, volviendo a crecer, computando más de 600 aviones y helicópteros registrados, por encima del umbral de hace cinco años (ver figura 1).
El optimismo de esta reanudación de la aviación de negocios se muestra también en los números de operación, como se puede observar, ilustrativamente, en el gráfico de movimiento del Aeropuerto Estatal Comandante Rolim Adolfo Amaro, en Jundiaí, en el interior de São Paulo, que registró el mismo volumen de aterrizajes y despegues anteriores a la pandemia (figura 2).
A pesar de las adversidades, la aviación de negocios encontró espacio para una rápida que se mantiene hasta principios del 2022.