ESPAÑA HACIA UN APOCALIPSIS CLIMÁTICO
Mientras me documentaba para elaborar este artículo, a mediados del mes de agosto, los termómetros de 26 localidades españolas superaron los 45ºC, y al menos 230 estaciones meteorológicas de nuestra geografía registraron valores por encima de los 40ºC. Según datos de la AEMET (Agencia Estatal de Meteorología), los días 13 y 14 de agosto fueron el segundo y tercer día más calurosos registrados en España desde 1941, y formaron parte de una ola de calor que se extendió durante toda una semana en la mayor parte de nuestra geografía. Además, en Montoro (Córdoba) se superó el récord de temperatura jamás registrado en la Península, al alcanzar los 47,2ºC en un observatorio de la red principal de la AEMET.
CLIMA AFRICANO
Y no sólo las temperaturas máximas absolutas alcanzaron cifras de récord. También las mínimas nocturnas. Durante esos días de canícula, y en especial en la madrugada del 14 al 15 de agosto, las temperaturas mínimas no bajaron de 30º en casi un centenar puntos de nuestro país: noches tórridas que convirtieron las horas de descanso en un infierno insufrible para quienes no pudieron recurrir al aire acondicionado. En algunos puntos del Mediterráneo, y en especial en la provincia de Castellón, llegaron a producirse fenómenos locales extremos, como los llamados «reventones cálidos», tormentas secas–con aparato eléctrico, pero sin precipitaciones–que elevaron las temperaturas hasta cifras impensables de 38 e incluso 40ºC. ¡De madrugada!
Algunos pensarán que los datos anteriores son anecdóticos, fruto de un fenómeno puntual sin mayor trascendencia. Sin embargo, la gran mayoría de los estudios científicos sobre calentamiento global y cambio climático prevén que dentro de 30 años esas cifras que hoy son de récord serán más que habituales durante todo el verano, e incluso se superarán ampliamente. En declaraciones recientes al diario , el portavoz de la AEMET, Rubén del Campo, aseguraba: «En 30 años, un verano como los de ahora se considerará frío». De hecho, un
