Corazones Vecinos: La Delgada Línea Entre El Amor y El Odio | Una Historia De Enemigos A Amantes

Por Dorothea Torlove

Aria se queda en la casa de sus padres antes de conseguir su propio apartamento. Después de romper con su novio, ya que no tenía idea de dónde se quedaría, sus padres la invitaron a quedarse en su casa antes de que se pusiera de pie. Como sus padres se iban de crucero, aprovechó la oferta para poder lamerse las heridas en paz sin la interferencia de sus padres y tomarse su tiempo para resolver las cosas. Esa noche, después de mudarse a la casa de sus padres, está cansada y solo quiere descansar. Ahí es donde tiene su primer encuentro con Callum. Ella va a su casa para pedirle que baje el volumen de la música porque está demasiado alta y allí lo encuentra sin camisa. Esperaba tener una noche tranquila, pero eso está fuera de la ventana debido al ruido.

 

En el trabajo al día siguiente, lunes, aunque no descansó lo suficiente, está de buen humor porque espera ser ascendida a Directora de Marketing. Se dirige directamente a la sala de conferencias y encuentra a su jefe y al jefe de su jefe, y unos minutos más tarde, entra Callum. Se sorprende bastante al verlo, y cuando le dicen que no obtendrá el ascenso y que Callum sería el que se haría cargo, está más que furiosa. Ella lo odia más que nunca por tomar su lugar. Y para empeorar las cosas, trabajarían juntos en el mismo proyecto.

 

Cuando llega el lunes al trabajo, se sorprende al verla entrar en la sala de conferencias y se siente mal por ella cuando se da cuenta de que le quitó el ascenso. Cuando se les asigna trabajar juntos, él no sabe si agradecer la oportunidad de estar más cerca de ella o no. Él siente que ella lo odia y no intenta hacerle ver que no es una mala persona. De hecho, le encantan las bromas que tienen.

• Idioma: Español
• Editorial: Dorothea Torlove
• Fecha de lanzamiento: 7 jul 2023
• ISBN: 9798215812471

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Corazones Vecinos

La Delgada Línea Entre El Amor y El Odio | Una Historia De Enemigos A Amantes

Dorothea Torlove

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Contents

Capítulo 1

Aria

Capítulo 2

Callum

Capítulo 3

Aria

Capítulo 4

Callum

Capítulo 5

Aria

Capítulo 6

Callum

Capítulo 7

Aria

Capítulo 8

Callum

Capítulo 9

Aria

Capítulo 10

Aria

Capítulo 11

Callum

Capítulo 12

Aria

Capítulo 13

Callum

Capítulo 14

Aria

Capítulo 15

Callum

Gracias

Capítulo 1

Aria

J oder, murmuro mientras cojo una caja del maletero del coche.

Noto su peso mientras la llevo hasta la casa y, cuando estoy en el salón, casi la dejo caer al suelo, sin importarme que algo pueda romperse. Tengo tantas ganas de sentarme y descansar, pero el hecho de que sólo quede una caja me impulsa a volver al coche y recogerla.

Llevo toda la tarde cargando cajas desde el coche y empiezo a sentirme fatigada. No puedo creer que mi vida haya acabado así. Llevar cajas con todo lo que tengo a casa de mis padres porque no tengo dónde vivir.

A los veinticinco, pensé que viviría en mi casa de las afueras con un marido y dos hijos. Pero el que había sido mi novio durante tres años sentía que sentar la cabeza no era su objetivo, o que no quería sentarla conmigo.

Cuando rompimos, se buscó rápidamente una nueva novia y ya me estaba pidiendo que me fuera de su casa, aunque me había dicho que me mudaría en cuanto encontrara un lugar donde vivir.

Joder, gimo mientras cargo con la última caja.

Sé que debería llevarla a mi dormitorio, pero mis piernas se rinden cuando llego al salón. Así que dejo la caja en el suelo en lugar de dejarla caer y me tumbo en uno de los sofás.

Ohhhh, Diosss, suelto mientras estiro el cuerpo.

Me tumbo en el sofá durante un minuto antes de que mi teléfono empiece a sonar, interrumpiendo mi plácido descanso. Dejo que suene. No me apetece hablar con nadie. Cuando deja de sonar, supongo que por fin podré descansar sin interrupciones, pero vuelve a sonar.

¿En serio?

Me pongo en pie con cautela y siento que me arden las piernas mientras camino hacia la cocina, donde había dejado el teléfono, maldiciendo a quienquiera que sea por haberme hecho levantar cuando no era mi intención.

¿Qué? Me apoyo en la encimera de la cocina para descargar el peso de mis piernas.

Esa no es forma de hablar con tu madre.

Lo siento, he tenido un día muy largo.

¿Recogiste todas tus cosas de Jerome?, pregunta mi madre, recordándome a mi pésimo exnovio.

Ni siquiera sé cómo acabé teniendo una relación con él durante tres años. Tres años que definitivamente desperdicié sin nada que mostrar. Cuando empezamos a salir, pensé que teníamos potencial, que acabaríamos casándonos, teniendo nuestra propia casa, hijos y una o dos mascotas, pero bueno, no siempre se consigue lo que se desea.

Sí, lo he hecho, le digo a mi madre, sacándome de mis pensamientos.

¿Y te has instalado bien en la casa?.

Sí, ¿qué tal el crucero? le pregunto, queriendo cambiar de tema porque sé que, si seguimos hablando de mí, empezará a preguntarme cuándo empezaré a salir de nuevo, y no quiero eso.

Es increíble. Tu padre se está preparando para ir a bucear, dice emocionada.

Mis padres habían decidido hacer un crucero por su 50 aniversario. Llevaban planeando este viaje desde que yo estaba en la universidad y me alegro de que lo hayan hecho. Al menos su vida amorosa es más fuerte que la mía. Siempre me he preguntado si tendré la suerte de experimentar su tipo de amor, pero en este momento, estoy bastante segura de que no tendré tanta suerte.

Salúdale de mi parte, digo finalmente, poniendo fin a mis pensamientos antes de empezar a pensar más de la cuenta.

Lo haré. Creo que me está llamando; luego hablamos, ¿vale, cariño?.

Vale, mamá, adi..., pero ya había colgado, lo que me hace sacudir la cabeza. Dios, gimo mientras cuelgo el teléfono.

Me duele todo el cuerpo. Pienso en ponerme a remojo en la bañera de mis padres, pero estoy demasiado cansada para abrirla, así que decido subir cojeando hasta mi dormitorio, ignorando las cajas que hay que desembalar, antes de meterme en la cama, sin molestarme en ponerme el pijama, y dejar escapar un suspiro de alivio.

Necesito descansar, mañana tengo un gran día.

Justo cuando estoy a punto de darme la vuelta y taparme, oigo una música atronadora que llega directamente a mi dormitorio.

Tiene que ser una broma. ¿Tenían