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Memorias de una sirena descalza
Memorias de una sirena descalza
Memorias de una sirena descalza
Libro electrónico119 páginas37 minutos

Memorias de una sirena descalza

Por Pat MM

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Información de este libro electrónico

Hay historias que nacen desde un sueño,
otras nacen desde una pesadilla
y otras nacen porque una sirena se decide
a nadar contra corriente.

Hay historias que se escriben en prosa, otras en verso y otras simplemente están hechas para leerse, sin pretender ser nada más que sentimientos expresados a través de palabras encadenadas en prosa y en verso.

Esta es un poco mi historia,
un poco tu historia,
un poco nuestra historia,
y sin duda, un mucho la historia de cada mujer valiente,
que vive sin miedo y sin permitir que nada ni nadie la condicione.
IdiomaEspañol
EditorialLid Editorial
Fecha de lanzamiento23 jun 2020
ISBN9788417828530
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    Memorias de una sirena descalza - Pat MM

    Telxínoe

    Conocí a Telxínoe un verano viendo una puesta de Sol, en una de esas playas del sur en las que la luz y los colores del cielo te hipnotizan, hasta que el astro dorado desaparece engullido por el mar.

    En una de esas puestas de sol en las que el alma se te encoge y el vello se te eriza, y en las que deseas que el tiempo se detenga.

    Me llamó la atención que ella no miraba al sol, ella miraba al mar. Lo miraba con un brillo de melancolía tan intenso en sus ojos que no pude evitar preguntarle si estaba bien.

    Cuando se giró y posó su mirada verde cristalina en la mía, creí no poder reprimir el impulso de abrazarla e intentar reconfortarla. Con triste dulzura me dijo:

    No, no lo estoy. Me encantaría que escucharas y relataras mi historia, me gustaría que mi paseo descalza entre humanos no haya sido en vano y sea recordado. Quiero que mi historia se convierta en uno de esos libros como los que tantas veces leí y que tanto me ayudaron y reconfortaron.

    A pesar de lo sorprendente de sus palabras, fui incapaz de negarme a su petición. Al tiempo entendería el porqué.

    Nos sentamos en la duna y empezó a abrirme su alma como nadie lo había hecho antes.

    Aquí os narro su historia: fragmentos de sus propios escritos que ella me entregó y me pidió que no modificara, relatos que transcribí lo mejor que pude de sus palabras y algún momento al que asistí como espectadora privilegiada.

    Disculpad si este no es el libro mejor escrito del mundo, pero si una sirena te pide que escribas sus memorias, no te puedes oponer al mandato de su voz, incluso si escribir no es tu profesión.

    Vivir en

    el mar

    Ser sirena

    Ella suponía que, en todas las colonias, educaban a las sirenas en la convicción de que su única manera de vivir plenamente era mantenerse en el mar, al igual que hacían en la suya.

    El mar les proporcionaba todo lo que su especie necesitaba: alimento, entretenimiento y libertad de movimiento. O eso les contaban.

    Se sucedían con frecuencia diferentes espectáculos, con el objetivo de ayudar a mitigar las voces interiores que crecían en algunas de las sirenas, reclamando algo más.

    Los había de competición, para las más inquietas, y también inspirados en las artes, para aquellas más intelectuales. Estos últimos eran los que más llamaban la atención de Telxínoe desde que podía recordar.

    Su supuesta libertad de movimiento se basaba en que nadie les impedía recorrer cualquier rincón del mar o incluso subir a la superficie, pero había tantas leyendas de sirenas maltratadas o infelices a causa de los humanos y era tal el aleccionamiento sobre sus peligros y las bondades del mar que muy pocas salían de él y, si lo hacían, era por breves periodos de tiempo y siempre evitando a esos extraños seres de sangre caliente.

    Y así creció Telxínoe, feliz entre sirenas que,

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