Segura y plena: Cómo liderarte para ser la mujer que eres en verdad

Por Kristy Motta

Naciste en el corazón de Dios. Lo que necesitas para ser feliz Él ya lo ha puesto dentro de ti, para descubrirlo debes invertir tiempo en tu interior, saber quién eres y hacia dónde te diriges, enfrentar esas situaciones a las cuales te has "sobrepuesto" pero quizás no has resuelto.

En Segura y plena encontrarás pasos prácticos que te ayudarán a descubrir, resolver y activar a la persona que realmente eres de manera que puedas liderarte hacia la seguridad y plenitud verdaderas para tu vida.

Las mujeres anhelamos sentirnos seguras y disfrutar una vida en plenitud, pero primero necesitamos conocer nuestra identidad, nuestras fortalezas y debilidades para poder dirigirnos hacia donde queremos llegar.

El propósito de este libro es que las mujeres adquieran el conocimiento liberador que les permita generar nuevas creencias y valores; modificando así su comprensión de sí mismas de tal manera que desarrollen las habilidades necesarias para autoliderarse y liberarse para «ser y hacer» en un equilibrio saludable que potenciará sus relaciones y también su influencia.

• Idioma: Español
• Editorial: Zondervan
• Fecha de lanzamiento: 24 ene 2017
• ISBN: 9780829767667

Kristy Motta

Kristy Motta  ha recorrido diferentes partes del mundo compartiendo las verdades eternas a través de la música, arte, conferencias y liderazgo. Kristy ha entrenado e impulsado el liderazgo de la mujer por más de 15 años en diferentes ámbitos y hacia diversas edades, su pasión es que cada persona en el mundo, especialmente las  mujeres descubran, activen y realicen su plenitud a través de experimentar su poderosa y verdadera identidad. Es directora general de «Ella Plena» una organización especializada en la activación plena del potencial de la mujer. Kristy ha estudiado comunicación social, teología y psicología.

Vista previa del libro

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La misión de Editorial Vida es ser la compañía líder en comunicación cristiana que satisfaga las necesidades de las personas, con recursos cuyo contenido glorifique a Jesucristo y promueva principios bíblicos.

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SEGURA Y PLENA

Edición en español publicada por

Editorial Vida – 2017

Nashville, Tennessee

Este título también está disponible en formato electrónico.

© 2017 por Kristy Motta

Editora en Jefe: Graciela Lelli

Edición: Nahum Saez

Diseño del interior: Luvagraphics

Diseño de la cubierta: Luvagraphics

A menos que se indique lo contrario, todas las citas bíblicas han sido tomadas de La Santa Biblia, Nueva Versión Internacional® NVI®. Copyright © 1999, 2015 por Biblica, Inc.® Texto usado con permiso de Biblica, Inc.® Reservados todos los derechos en todo el mundo.

Las citas bíblicas marcadas «RVR1960» han sido tomadas de la Santa Biblia, Versión Reina-Valera 1960 © 1960 por Sociedades Bíblicas en América Latina, © renovado 1988 por Sociedades Bíblicas Unidas. Usada con permiso. Reina-Valera 1960® es una marca registrada de la American Bible Society y puede ser usada solamente bajo licencia.

Las citas bíblicas marcadas «NTV» son de la Santa Biblia, Nueva Traducción Viviente, © 2010 por Tyndale House Foundation. Usada con permiso.

Todos los derechos reservados. Ninguna porción de este libro podrá ser reproducida, almacenada en algún sistema de recuperación, o transmitida en cualquier forma o por cualquier medio —mecánicos, fotocopias, grabación u otro—, excepto por citas breves en revistas impresas, sin la autorización previa por escrito de la editorial.

ISBN: 978-0-8297-6765-0

Epub Edition January 2017 ISBN 9780829767667

Categoría: RELIGIÓN/La vida cristiana/mujeres

IMPRESO EN ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA

PRINTED IN THE UNITED STATES OF AMERICA

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CONTENIDO

Dedicatoria

Agradecimientos

Introducción

El motivo del viaje

1. Iniciemos el viaje

▪ De segura y plena a insegura y vacía

▪ Un viaje de vuelta al hogar que no recordaba

▪ ¿Necesito o deseo? Una buena pregunta para las mujeres

▪ Necesidades desde el origen

2 ¿De dónde vengo y a dónde voy?

▪ Lugar de origen

▪ El momento esperado

▪ Del diseño perfecto

▪ El propósito determina el diseño y este establece las necesidades

▪ Tu diseño anhela una función más que una posición

3. Perdidas en el viaje

▪ Un accidente en el camino

▪ ¿Cuál fue el verdadero error?

▪ El diseño de Dios sin Dios se vuelve destructivo

▪ La caída confundió nuestras necesidades y nuestros deseos

▪ Jesús, el camino de vuelta a casa

4. De vuelta al camino correcto

▪ Reconstruyamos nuestra identidad

▪ Nacimos mujeres e hijas

▪ La prueba de la identidad

5. Sana la identidad temporal a través de la identidad eterna

▪ Las seis etapas del viaje femenino

▪ Enferma en el viaje

▪ Creencias

6. R.E.P.A.R.A. Un proceso para sanar tu corazón, tu mente y tu cuerpo

7. I.D.E.M. Fortalece tu identidad

8. Suelta el control

▪ Cómo enfrentar la realidad del dolor respecto a los hombres

9. Él y ella, lo que su masculinidad hizo por ellas

▪ Oro frágil

10 Segura y plena, una decisión diaria

Bibliografía

DEDICATORIA

A mi Padre eterno y perfecto. A mi hermano mayor y Salvador Jesús y a mi guía y consolador el Espíritu Santo.

El significado completo de la vida está en ti.

Al cuerpo de Cristo representado en cada iglesia en la que he tenido el honor de participar.

A cada persona que ha dado su vida en pro del establecimiento del Reino de los Cielos en la tierra.

A mi legado de fe, amor y gracia, mis hijos amados David Esteban y José Adrián.

AGRADECIMIENTOS

A mi Papá porque, además de ser Dios, tiene el suficiente tiempo como para educarme, corregirme, formarme y sobre todo amarme. No comprendo aún tu gracia ni tu misericordia, pero es mejor así porque sigue siendo un milagro segundo a segundo para mí.

A mi hogar, mi lugar de refugio, la expresión del cielo pintada en las caritas de mis hijos. David Esteban y José Adrián son guerreros que levantan mis brazos; sus rostros, y su masculinidad en esplendor son motivo de fe y fuerza. Los amo inexplicablemente.

A mi madre bendita, ¿cómo te agradezco tanto? ¡No podré! Tú lo sabes todo… ¡Te amo!

A mi hermana enviada del cielo, Vivi España. Gracias por ser un escudo lleno de promesas de Dios y fortaleza divina. ¡Te amamos tanto!

A mi Sophie, gracias por acompañar mis desvelos y ser los ojos de la excelencia. ¡Te amo!

A Lucas y Vale. Bueno, va a ser difícil decirles cuánto los amo y cuánto les agradezco. Una sola frase lo describe: ¡ustedes son valentía!

A todo el staff de Grupo Ella, son mis hermanas, son mis amigas, compañeras de batalla y aliadas de la fe; las amo.

A ti que tienes este libro… gracias por leerme y poner corazón aun a mis agradecimientos.

INTRODUCCIÓN

Me gustan los journals o diarios, ¡me encantan! Disfruto cada vez que inicio uno, cada vez que me regalan uno y cada vez que regalo uno. El olor a papel nuevo, las hojas aún pegadas esperando ser separadas por tus dedos, los que tomarán un lápiz o una pluma para escribir. Ese papel pronto se vuelve un lienzo, un testigo, un amigo, un compañero, un enemigo. No sé cómo, pero ese elemento tan sencillo pronto se llena de significado, de historia, de vida. No hay nada como la emoción de empezar a escribir. Por eso me gustan los diarios.

Escribir un journal es una manera sencilla de poner atención a nuestras vidas, a los detalles que tejen su trama. En las páginas de un journal podemos describir nuestro andar diario e incluso nuestra relación con Cristo. Allí podemos verter nuestros sentimientos en forma de palabras y nuestras esperanzas.

El significado de cada journal nuevo es especial para mí porque representa etapas, lugares, momentos, estaciones del año y temporadas. Hace poco inicié una versión diferente de journals, uno de cada lugar al que viajo. Se hace mucho más especial si alguien me regala uno porque representará el aprecio de ese alguien por mí. Los diarios representan tiempo valioso, momentos importantes y hechos significativos para alguien en particular.

La vida es un viaje; un peregrinaje de vuelta a casa, una marcha de retorno al lugar de dónde venimos y al que todos necesitamos regresar.

Jesús no se perdió cuando hizo su viaje, puesto que sabía de dónde venía y a dónde volvería. Así lo expresa en el Evangelio de Juan: «... ya que el Padre mismo los ama porque me han amado y han creído que yo he venido de parte de Dios. Salí del Padre y vine al mundo; ahora dejo de nuevo el mundo y vuelvo al Padre» (Juan 16.28).

Acaso, ¿lo sabes tú también? ¿Sabes con certeza a dónde vas? Si solo tienes una vaga idea pero tu corazón necesita un poco más de seguridad, estás en el momento justo para que juntas —tú y yo— hagamos este nuevo journal de nuestro viaje.

EL MOTIVO DEL VIAJE

En una sociedad viciada por los estereotipos, colmada de paradigmas, y deteriorada —tanto por la lucha de poder como por las ambiciones de alcanzar posiciones— como esta en la que estamos inmersos, nos encontramos las mujeres. Y estamos preguntándonos cómo debemos ser, cómo agradar a Dios, cómo agradar a otros a la vez que nos agradamos a nosotras mismas.

Pareciera que las rígidas estructuras eclesiásticas nos presentan la errónea idea de que para agradar a Dios debemos rechazar nuestra satisfacción personal y, por ende, negarnos a ser nosotras mismas, cuando en realidad a Dios le agrada que seamos nosotras mismas. Cualquier otra versión que adoptemos nos lleva a negarnos a disfrutar su voluntad divina.

Hace varios años inicié mi búsqueda en la Biblia para encontrar las verdades que me permitieran estructurar mis propios conceptos acerca de mí misma y vincularlos con lo que Dios revela a través de su Palabra. Verdades absolutas que son fundamentos sólidos para basar nuestras creencias y a la vez construir junto a Él lo que anhela que descubramos juntos, sin formatos ni moldes humanos.

Lo curioso de este proceso es que en la Biblia encontramos numerosos ejemplos de mujeres utilizadas por Dios en momentos históricos. Y lo más interesante es que no se les impuso un patrón determinado ni tampoco se les requirieron unas características inalcanzables. Todas y cada una de esas mujeres estuvieron en el tiempo y el lugar correctos e hicieron una sola cosa: obedecer. Por eso fueron capaces de dejar sus planes y abrazar la soberanía de Dios.

Es así que, desde el momento en que nacemos, se empieza a desarrollar nuestra matriz de interpretación, es decir, los lentes con los que observamos nuestro entorno. Mucho de lo que pensamos que Dios cree de nosotras es más lo que nos enseñaron que Él cree, pero no exactamente lo que la Biblia dice que cree. Esa es la razón por la cual podemos estar perdiendo años de vida limitándonos a disfrutar la libertad gloriosa de ser hijas de Dios. Simple y sencillamente porque esa matriz —conformada por los antecedentes familiares, la cultura, la profesión, la sociedad y las creencias adquiridas— distorsiona lo que realmente somos y lo que Dios piensa de nosotras.

He pasado más de una década descubriendo, a través de mis mejores y peores momentos, quién soy en verdad. Quién soy después de un gran logro y, sobre todo, quién soy después del peor día de mi vida, quién ha quedado dentro de mí. En quién me convertí. Lo interesante es que sigue quedándose la única persona que realmente existe: YO.

Lo esencial de mí siempre permanece allí, de modo que cada crisis, cada éxito, ha ido desbaratando un poco más de lo que no sirve; quedando firme lo que es inconmovible en Dios, su Palabra, sus promesas, su amor. De algo estoy segura: al final de este libro habré desbaratado un poco más de las creencias que nos limitan, mentiras del enemigo. Y, mejor aun, los lentes de mi vida habrán sido limpiados un poco más para ver lo que realmente soy en Él.

Nada ha sido en vano… no llegaríamos a tener una identidad firme si no fuera porque pasamos por el fuego de las pruebas; fuego que permite que lo irreal y lo falso se desintegren y surja el oro que hay en nosotros.

Aun tus malas decisiones no han sido en vano, ya que pudieron evidenciar lo que en ti se debía formar. Creemos tener la razón hasta que nos damos cuenta de que los resultados de nuestras decisiones hablan por sí solos. Es entonces que reconocemos que algo en nosotros necesita conectarse con nuestra verdadera identidad y modificar así nuestro presente para conquistar el futuro.

Un proceso que confrontará nuestra razón ha de mover nuestra emoción de forma que ejecutemos una transformación en base a pequeñas y grandes decisiones. Medidas que, de la mano del Padre, podremos tomar porque no estaremos solas al dar los pasos de cambio. Además, tampoco estamos condenadas a repetir patrón alguno.

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Descubramos juntas quiénes somos. Activémonos en cuanto a lo que debemos hacer. Realicemos el futuro como debe ser. Y, en base a ello, atrevámonos a DAR nuestra plenitud.

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1

INICIEMOS EL VIAJE

DE SEGURA Y PLENA A INSEGURA Y VACÍA

En el año 1979, sucedieron hechos que marcaron la historia. En el mes de julio, la estación Skylab cae a tierra, estrellándose sobre Australia. En ese mismo mes, en Irak se posesiona como presidente Sadam Hussein. En Suecia, en el mes de octubre, la monja católica albanesa Teresa de Calcuta es galardonada con el Premio Nobel de la Paz y el 13 de octubre, para ser exacta, nací yo. Definitivamente acontecieron sucesos importantes en 1979. Te aseguro que al descubrir lo que ocurrió en el mundo el día que naciste te darás cuenta de que eres importante en la historia.

Soy la menor de cuatro hermanos: dos hombres y una mujer mayores que yo. Imagínate lo que sucedía en mi entorno en esos meses antes de mi nacimiento. Imagino a mi madre corriendo para atender a los tres hermanos, intentando tener todo en orden y listo para que tanto los tres mayores como la bebé estuvieran bien. Mientras tanto, yo me movía cómodamente en mi súper exquisita cama de agua, con una temperatura templada, alimentación inmediata, seguridad, calor y amor. ¿Qué más podría uno pedir en el vientre de una madre?

Todo lo que sucedía en ese mundo exterior aún era desconocido para mí. Aunque podía sentirlo a través de las emociones de mi madre, seguía siendo algo por descubrir. Cuando cierro mis ojos y pienso en ese momento, casi puedo sentir la dicha que mi corazón sintió siendo aún un embrión, porque aunque no lo recuerdo, sin duda alguna, mis ojos vieron a Dios.

Eso es lo que dijo el dulce cantor de Israel, David, en su cancionero.

Mi embrión vieron tus ojos,

Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas

Que fueron luego formadas,

Sin faltar una de ellas.

(Salmos 139.16, RVR1960.)

Es poderoso descubrir que en lo profundo de tu ser queda la información emocional que te acompañó desde el primer segundo de existencia. Según los especialistas en estudios del desarrollo del psiquismo fetal: «El feto puede ver, oír, experimentar, degustar y, de manera primitiva, incluso aprender. Pero lo más importante es que puede sentir».

Puedo decir con mucha seguridad que fui deseada por mis padres y por mis hermanos, así que desde que tengo memoria, tuve conciencia de ser amada y deseada. Mis primeros años los recuerdo muy bien y con mucha claridad. Recuerdo estar durmiendo en el regazo de mi madre y ser la niña amada de mi padre; ser el juguete y la mascota de mis hermanos.

Para mis hermanos varones era sumamente gracioso hacerme enojar, les encantaba jugarme bromas y persuadirme a hacer cosas intrépidas que obviamente no me salían tan bien como a ellos. No pasó mucho tiempo antes que me diera cuenta de que si quería sobrevivir, tenía que ser muy inteligente y no caer en sus trucos de hermanos mayores. Ellos despertaron en mí una agilidad para procesar ideas; algo que les agradezco hasta el día de hoy. Me enseñaron a luchar por mi vida.

Mi hermana, por su lado, siempre fue más reservada,