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Fotografía Digital
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Libro electrónico142 páginas1 hora

Fotografía Digital

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Información de este libro electrónico

Este no es un libro lleno de teoría confusa y conceptos complejos, sino una herramienta para saber que configuración es la más adecuada y en qué momento se debe usar para obtener la mejor calidad de fotografía.

Los temas tratados en el libro de enseñarán:

Qué cámara es adecuada para ti
Configuración básica de la cámara y formatos
La técnica fotográfica para lograr una buena exposición
Identificar los tipos de luces
Cuando utilizar el flash
Cómo componer fotografías profesionales
Fotografía de retratos, paisajes, animales, ciudades, flores y deportes
Fotografía para bodas
Hacer dinero con tus fotografías
Editar tus fotos con Photoshop
Y más (ver índice)

IdiomaEspañol
EditorialStudio Pro
Fecha de lanzamiento31 may 2012
ISBN9781476241463
Fotografía Digital

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    Guía rápida de conceptos para tener en cuenta al iniciar con el uso de cámara fotográfica
  • Calificación: 4 de 5 estrellas
    4/5
    Básico, pero excelente para aquellos que quieren iniciar a comprender los detalles técnicos de las cámaras digitales.
  • Calificación: 5 de 5 estrellas
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    otimo recomendo

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Fotografía Digital - Studio Pro

Si ya has comprado tu cámara réflex, o quizás una cámara compacta (cámara de bolsillo), seguramente debes estar preguntándote ¿Y ahora por dónde empiezo?.

Pero, para dar respuesta a esa pregunta primero deberías contestar a otra pregunta... ¿A dónde quieres llegar?

Resulta lógico que para escoger el camino correcto hacia la casa de tu tío, primero decidas que quieres ir a visitarlo. De lo contrario, no sabrías qué camino seguir y las posibilidades de llegar a su casa serían casi nulas. Esto lo sabemos, ¿verdad? Sin embargo, cantidad de veces comenzamos las cosas sin saber qué queremos en realidad.

¿Qué es lo que quieres de la fotografía?

Tomar fotos. Sí. Pero qué tipos de fotos realizarás y qué vas a hacer con ellas.

¿Hasta dónde estás dispuesto a aprender?

¿Qué es lo que quieres específicamente de la fotografía?

¿Esta actividad va a convertirse en un pasatiempo a largo plazo o sólo serán unas cuantas fotos?

Te recomiendo que, como primera medida, te plantees estos interrogantes desde ya y fijes una meta clara y objetiva. Ya verás cuan importante es a medida que pasa el tiempo.

La curva de aprendizaje

En los últimos años, no he visto ningún modelo de cámara que no traiga la función automática Apunta y dispara. ¡Y enhorabuena! ¿Acaso no es esto lo que todos queremos? Simplemente apretar un botón y obtener la toma perfecta. Sin manual de instrucciones, complicadas funciones y numerosos botones. ¿No es esto lo ideal?

Bien, volvamos a la realidad. Aunque las cámaras más modernas pueden producir buenas (aceptables) fotos la mayor parte del tiempo, hay momentos en los que, para obtener el resultado que se desea, se deben aplicar una serie de conocimientos relacionados a la técnica fotográfica. Con ello, se busca seleccionar manualmente la configuración más apropiada para lograr una toma perfecta, en desmedro de lo que la cámara seleccionaría automáticamente que daría un resultado más pobre.

Así pues, siempre es una buena idea considerar el hecho de que en fotografía siempre se aprende. Quiero decir, nunca se deja de aprender. Si te molestará aprender para qué sirve cada botón de la cámara, pues quizás la fotografía profesional no sea una actividad para ti.

En mi caso, he estado involucrado en el mundo de la fotografía durante años y todavía sigo aprendiendo sobre nuevas tecnologías en cámaras de última generación, así como nuevos métodos y tipos de fotografía.

Pero como sucede en todo ámbito, quien mucho abarca poco aprieta. Por eso, no sería coherente de mi parte decir que sé todo acerca de la fotografía, nada más lejos de eso, ni siquiera podría decir quiero saberlo todo sobre la fotografía. Sencillamente, la fotografía es un tema muy muy amplio. No obstante, cuando tú sabes a donde te diriges y sabes lo que quieres de ella, resulta mucho más relajado y divertido aprender todos los días. ¿Por qué? Simplemente porque te gusta.

¿Cámara réflex o compacta?

Los dos grandes grupos en los que se dividen las cámaras son dos. Cámaras de lentes fijos y cámaras de lentes intercambiables.

Las cámaras de lentes fijos tienden a ser, salvo algunas excepciones, pequeñas, ligeras y manejables, con lo cual es más probable que tengas una a mano cuando la necesites. Este tipo de cámaras no permite el cambio de lentes y por lo general son las llamadas cámaras compactas.

Se podría decir que las cámaras réflex o DSLR son más incómodas a la hora de transportarlas por su tamaño y peso. Pero ellas te permiten cambiar la lente por un objetivo más lejano o un ángulo más profundo. Éste tipo de cámaras posee un mayor peso y tamaño debido a que posee una tecnología de mayor calidad.

Generalmente hablando, con una DSLR (Digital Single Lens réflex) tendremos más botones, menús y funciones que en una cámara compacta, lo cual te dará más control sobre tus fotos. Sin embargo tendrás una curva de aprendizaje más larga.

Cómo sujetar la cámara

Sujetar la cámara apropiadamente es la mejor forma de evitar, o al menos minimizar, el movimiento indeseado de la cámara. Un soporte sólido mediante la correcta sujeción de la cámara dará como resultado una fotografía nítida, sin riesgo al efecto borroso o desenfocado propio de la inestabilidad.

La figura de arriba muestra un buen soporte. La mano izquierda sostiene la cámara por debajo logrando un apoyo sólido que minimizará el movimiento que la cámara tiende a realizar cuando se presiona el disparador con la mano contraria.

Algunas cámaras antiguas tienen posiciones de disparo en las que se presiona hacia el cuerpo en lugar de hacia abajo, pero este posicionamiento viene desapareciendo con los nuevos modelos debido a la incomodidad de tal funcionamiento.

Además, nota en la imagen que los codos van pegados al cuerpo para ganar estabilidad.

Ahora bien, las cámaras actuales están diseñadas para ser utilizadas con el ojo derecho, aunque es posible usarlas con cualquiera de los dos. La ventaja de emplear el derecho es que el ojo izquierdo no se bloquea con la cámara y puedes, si lo deseas, mantenerlo abierto para ver que está pasando fuera de tu campo de visión.

La tendencia natural es cerrar el ojo izquierdo, para concentrarte mejor en la foto, pero con un poco de práctica, podrás mantenerlo abierto y por ejemplo, anticipar el movimiento dentro de tu marco, algo útil cuando tomas fotos de acción. Además, podrás ver qué está pasando en el momento exacto del disparo y mientras el espejo está bloqueando tu vista en el visor. ¿La persona que estás fotografiando parpadeó? Mejor revisa y toma otra foto.

Muchas personas sujetan la cámara sin colocar una mano por debajo y no obtienen un soporte real bajo la cámara. Este es el motivo de fotografías borrosas y poco nítidas en general. Además, cuando se sujeta mal la cámara,

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