TÉ VERDE
LOS TÉS NEGRO, VERDE Y OOLONG PROCEDEN TODOS DE LAS MISMAS HOJAS DE LA
planta Camellia sinensis. Y tanto el té verde como el negro se consumen desde hace miles de años. Hay registros históricos que indican que en China ya se bebía en el año 500 a. C. En China se consumía principalmente como alimento, pero también con fines terapéuticos para curar heridas, tratar la indigestión, bajar la fiebre y calmar la mente. Y solo podían venderse en las herboristerías.
Entre los defensores de la medicina natural el té no era demasiado apreciado por el inconveniente de su contenido en teína (teofilina), que lo catalogaba como excitante. El paso del tiempo, y la utilización entre nosotros de tés realmente excitantes, como los tradicionales tés negros, o los ahumados, ha coincidido en el tiempo con la popularización de tisanas para la salud y el bienestar, como la hábil combinación que se puede preparar con té verde ha cambiado aquellas consideraciones tradicionales. El ‘Chai Verde’, por ejemplo contiene canela, menta, jengibre, cardamomo, clavo, pimienta… y solo un 20% de té verde, lo que da como resultado una bebida realmente interesante.