¿Por qué cuando decidimos una meta nos ponemos tan ansiosos que no llegamos a lo que deseamos?
■ Porque la ansiedad surge cuando nos desconectamos de nuestra vivencia interna, de ser quienes somos, y entonces nos mentalizamos superficialmente en el futuro. Está demostrado que la gente altamente eficaz permanece sintiendo esta presencia que nos acompaña desde el corazón, optimizando sentimientos, y desde ese lugar crea pensamientos plenos. Los actos y pensamientos vacíos sólo surgen de un pasado que nos hace creer que en un futuro vamos a satisfacer esas necesidades, pero que nunca llegan. Porque, en última instancia, son puramente mentales. Es decir, es preciso tener los valores humanos necesarios, la humildad, la paciencia, la tolerancia, la fortaleza. Estos valores no surgen de la mente sino del sentimiento conciente del ser. Entonces, cultivar estos valores es lo que nos hace permanecer con paz interior y, a su vez, tener un propósito en la vida.
¿Por qué solemos abandonar las metas? ¿Será por qué no
