ILUMINAMOS LOS MISTERIOS Y LAS MARAVILLAS QUE NOS RODEAN
CHELSEA WOOD SOÑABA con ser bióloga marina y estudiar tiburones o delfines, esos animales grandes y emocionantes que los biólogos llaman megafauna carismática. Sin embargo, durante unas prácticas en la universidad, estudió las entrañas de un caracol con un microscopio.
De niña tenía la costumbre de arrancar los caracoles de mar de las piedras en las costas de Long Island y meterlos en una cubeta, pero nunca había visto sus entrañas. Cuando abrió el ejemplar, vio por la lupa “miles de cositas blancas que parecían salchichas”.
Se trataba de larvas de platelmintos o gusanos planos (), un parásito común entre los peces. Vistos desde el microscopio, cada uno tenía dos ocelos oscuros que les daba un aspecto adorable y encantador. “No podía creer que llevara tantos
