Muy Historia España

Los ataques VIKINGOS a la España musulmana

Se debe admitir que el ámbito peninsular solo recibió una atención esporádica e irregular, aunque normalmente feroz, por parte de los escandinavos. Buena prueba de ello fue que las entidades políticas autóctonas cristianas y musulmanas nunca se hallaron ante la difícil tesitura de tener que hacer frente a tercas intentonas nórdicas destinadas a tratar de fundar asentamientos con vocación de permanencia y naturaleza colonial a costa de los poderes locales, como sí sucedió, por ejemplo y con fortuna y durabilidad diferente, con el reino de Dublín, la escandinavización de partes de Escocia, el señorío oceánico de la isla de Man y los archipiélagos boreales, el Danelaw, Frisia, Bretaña, Normandía o el principado de Kiev. Y eso sin tener en cuenta los dominios establecidos en Islandia y Groenlandia y las pesquisas nerviosas realizadas por los norteños en la todavía más lejana Vinlandia. En este sentido, y como mucho, la máxima ambición pretendida por los incursores septentrionales en Iberia no fue más allá de la erección pasajera de bases operativas, dotadas de reparos protectores de circunstancia, que se hallaban localizadas en lugares próximos a los objetivos que buscaban depredar. Tampoco se produjo aquí ese método coercitivo y lucrativo que, con cierta vaguedad conceptual, se suele rotular con el término de danegeld: la demanda y consiguiente entrega de grandes cantidades de metales preciosos (sobre todo plata) a cambio de la no ejecución o suspensión de incursiones en marcha.

Siempre incansables en lo referente a la

Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.

Más de Muy Historia España

Muy Historia España11 min. leídos
La Capital Imperial Se Traslada A Oriente constantinopla, La Nueva Roma
La construcción y el auge de Constantinopla estuvieron profundamente interrelacionados con la simultánea decadencia que sufrió Roma. Fueron procesos coincidentes que se alimentaron mutuamente, pues cuanto más entraba en crisis la ciudad italiana, más
Muy Historia España4 min. leídos
La Última Función Del Imperio Ascenso Y Caída De Augústulo
Las crónicas del periodo lloran a Aecio como «el último romano». Romano, de hecho, en un mundo de bárbaros. Hacía tiempo que el emperador del Imperio occidental era apenas una marioneta en manos de generales mayoritariamente de origen bárbaro, que as
Muy Historia España4 min. leídos
El Último Emperador Del Imperio El Testamento De Teodosio
Quedaban ya lejos los tiempos en los que un solo augusto regía los destinos imperiales. A lo largo del siglo iv, y tras el principado de Constantino, el Imperio había sido uno solo en periodos muy breves durante los reinados de Constancio II, Juliano

Relacionados