Desde hace miles de años, la depilación ha ido variando de modalidades y zonas preferidas. Pero siempre estuvo en las preferencias de los usos y costumbres femeninas. En los últimos tiempos su avance también ha llegado a los varones y para las mujeres; ha impuesto la piel de todo el cuerpo absolutamente libre de vello. Repasemos un poco los riesgos y beneficios.
En las sociedades urbanas, la depilación –no solo femenina– se ha ido afianzando cada vez más entre las costumbres estéticas. Y también ha ido avanzando en las zonas que se liberan del vello, tanto que las últimas tendencias imponen el rasurado total de las zonas que circundan los genitales. Lo justifican las prendas íntimas diseñadas para mostrar más piel y la ropa de playa