No tiene que ser tu intención hacerme daño para que yo me sienta herido. Una de las herramientas más importantes en mis relaciones ha sido la compasión. No sólo es tratarnos con amor, es asumir buena intención, tener el bienestar de todas las personas involucradas en mente cuando se toman decisiones y saber que todxs hacemos lo mejor que podemos con lo que tenemos.
¿Es fácil? Cuando me siento abandonado, herido, traicionado o ignorado por alguien que amo, no es nada fácil. Mi instinto es enojarme, vengarme o simplemente dejar la relación como un triste fracaso. Sin embargo, hoy quiero aprender a poner en práctica algo que me permita saber que mi vínculo y yo estamos haciendo lo mejor que podemos, para validarle, sentirme validado y poder construir la relación que queremos juntos.
Tú puedes aprender a actuar con compasión, pero ¿quieres?