Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

El guión y sus formatos: Una guía práctica
El guión y sus formatos: Una guía práctica
El guión y sus formatos: Una guía práctica
Libro electrónico155 páginas2 horas

El guión y sus formatos: Una guía práctica

Calificación: 5 de 5 estrellas

5/5

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

Este libro está organizado como una guía de fácil consulta para el estudiante y profesional de cine, televisión y radio. Cada uno de los formatos descritos incluye ejemplos conciliados con la literatura sobre el tema, los principales programas de cómputo y las prácticas profesionales contemporáneas; así como indicaciones específicas para diferentes
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento3 may 2024
ISBN9786074170511
El guión y sus formatos: Una guía práctica

Relacionado con El guión y sus formatos

Libros electrónicos relacionados

Artes escénicas para usted

Ver más

Artículos relacionados

Categorías relacionadas

Comentarios para El guión y sus formatos

Calificación: 5 de 5 estrellas
5/5

2 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    El guión y sus formatos - Alejandro Herrera Espinosa

    Introducción

    PERO, ALEJANDRO, ¡todos los profesores nos dicen que lo hagamos de otra forma!

    He escuchado este reclamo al inicio de cada clase de guionismo que he impartido, y mis alumnos tienen razón. No existe un modelo inviolable para la creación de guiones para los medios. Los avances tecnológicos, tanto de los medios para los que se escribe como de los programas de cómputo en los que se escribe, han permitido hacer modificaciones en su aspecto. Las diferentes estructuras y necesidades técnicas de la producción requieren adaptaciones; y también están las preferencias de los realizadores, que a veces requieren indicaciones específicas por parte de los guionistas.

    No obstante, hay lineamientos fundamentales para la redacción de un guión profesional. Lo primero que hay que tomar en cuenta es que no está destinado para ser leído por el receptor final. Es el planteamiento intelectual del contenido de un programa visual o auditivo, mas no es el programa mismo. Aunque puede parecer obvia, esta simple consideración afecta el estilo y la terminología usada en su redacción (debe ser elocuente, pero al mismo tiempo precisa y económica). Al mismo tiempo, el guionista debe prever los problemas logísticos que pueden surgir debido a lo que escribe. La frase: y entonces cuatro mil guerreros zulúes atacaron al campamento, es muy fácil de escribir pero, para ejecutar la escena, un productor tendrá que conseguir suficientes actores, vestuario y utilería, así como los alimentos, la transportación y demás material de soporte que esta producción implica. Hoy en día se podrían generar esos cuatro mil guerreros por medio de un efecto digital, pero los costos y el tiempo de producción también son considerables.

    El guión, entonces, cumple una doble función comunicativa. Por un lado, su trama y estructura están destinadas al receptor final, al espectador, pero por el otro, su forma y lenguaje están dirigidos al realizador. Dominar las convenciones del formato para que los realizadores trabajen eficazmente, se vuelve tan importante como estructurar un argumento profundo e interesante. En esencia, se está escribiendo en un medio para producir en otro. Podemos hacer una analogía con los planos arquitectónicos de una casa: los cimientos, la estructura, sus consideraciones estéticas y funcionales están claramente identificadas en un plano; la visión está ahí. Pero un plano no es una casa. Hay decisiones que en papel funcionan muy bien, pero en la realidad, a la hora de la construcción, deben ser modificadas. El arquitecto está obligado a seguir los lineamientos estructurales del boceto, pero transforma esta visión en una obra con vida propia que, idóneamente, comulga con la visión original, pero va más allá de ella.

    A diferencia de unos planos arquitectónicos, los realizadores de medios no siguen al pie de la letra las especificaciones de un guión, y esto es motivo de gran frustración para el guionista. Durante su interpretación, especialmente durante la fase de postproducción, los realizadores hacen modificaciones que pueden alterar incluso las intenciones percibidas del programa. Personajes y líneas argumentales completas pueden ser eliminados; la estructura y el subtexto a veces cambian hasta volverse irreconocibles. Aunque es cierto que en ocasiones estos cambios mejoran la visión original, también debemos reconocer que, en la mayoría de los casos, cuando se hacen cambios que alteran una estructura cuidadosamente concebida, la efectividad del proyecto entero se puede venir abajo al igual que una casa.

    De aquí se desprende la necesidad de que el equipo entero trabaje mano a mano, con una misma dirección. En estricta teoría, la producción no debe iniciar hasta que el guión haya sido perfeccionado, liberando a los realizadores para concentrarse en los aspectos formales del proyecto. La atención que el guionista preste, no sólo a sus responsabilidades directas, como estructura, premisa dramática y caracterización, sino a los aspectos logísticos y de producción, son fundamentales para asegurar la realización exitosa del proyecto.

    El guión es el inicio del proceso. Los realizadores tienen que reconocerlo inmediatamente y con claridad, por lo que debe estar diseñado para su fácil lectura, reproducción y distribución. Puede haber variaciones en terminología y redacción, o adaptaciones hechas a la medida de una producción, pero al final todo guión debe funcionar como un boceto preciso y contundente para la creación de un programa visual o auditivo.

    Esta guía tiene como propósito unificar los criterios de formato para los principales estilos de guionismo de medios visuales o auditivos. Los lineamientos aquí compilados representan la base coyuntural de estos formatos y son aceptados internacionalmente. Fueron compilados y verificados a partir de las obras más importantes sobre el tema. También han sido actualizados según las tendencias y técnicas más recientes. Aunque existen programas de cómputo que facilitan su aplicación, y pudiera parecer que dar formato a un guión es cosa del pasado, comprender por qué están organizados de esta manera es crucial para comunicar eficazmente a través de ellos.

    En el caso de los formatos radiofónicos, las obras Writing for Television, Radio and New Media, de Robert Hilliard, y Writing Scripts for Television, Radio and Film, de Edgar E. Willis y Camille D’Arienzo, fueron particularmente útiles.

    Para el cine y la televisión, los libros más reconocidos internacionalmente son: Screenplay de Syd Field, The Screenwriter’s Bible de David Trottier, y The Elements of Screenwriting de Irwin R. Blacker. Los lineamientos han sido conciliados con la guía de formato de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMPAS), elaborada por Greg Beal, con los programas de cómputo desarrollados profesionalmente para redactar guiones y con otras fuentes académicas y profesionales. Salvo por detalles menores, todas coinciden en las especificaciones del formato y proveen una base confiable para su aplicación.

    En el caso del formato para telenovela, existe una plantilla para Microsoft Word® utilizada por escritores de Televisa y Televisión Azteca. Los lineamientos presentados en esa sección coinciden con esa plantilla, modificando el formato de dos columnas tradicional con los estilos preferidos por las televisoras hoy en día.

    Esta guía fue diseñada como un manual de referencia, por lo que cada sección funciona de manera independiente. La explicación para cada formato comienza con sus aspectos generales: el tipo de hoja, tamaño de letra, los márgenes, etcétera. Posteriormente, se presenta una muestra del formato con una llave numérica y sus respectivas especificaciones. Al final hay una guía de consulta rápida para poder verificar su trabajo una vez redactado. Con el fin de posibilitar la consulta completa de cada formato, fue inevitable un cierto grado de repetición, pero intenté resumir las especificaciones.

    Cabe destacar que esta guía se limita a los formatos del guionismo y no explica cómo escribir un guión. En la bibliografía encontrarán algunos libros recomendados para tal propósito. También hay información relevante en los apéndices, como el proceso de registro para una obra y los principales programas de cómputo para escribir guiones.

    Ahora bien, ¿qué formato se debe usar para qué tipo de programa? La tabla anexa resume el uso y la aplicación de cada formato, según el tipo de programa.

    Espero que esta guía les sea de utilidad y resuelva la mayoría de sus dudas.

    Formatos recomendados para diferentes programas

    imagenimagen

    Formato para guión radiofónico (80-20)

    Un guión profesional está diseñado para su fácil lectura y distribución. Aunque puede haber variaciones en terminología y redacción, los lineamientos que a continuación se presentan son la base formal del guión radiofónico, también denominado 80-20 por su distribución, y deben respetarse en la medida de lo posible. El formato se ha ido modificando con los años así como los desarrollos técnicos. Esta guía toma como referencia la literatura más

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1