Abrimos este paseo con El cazador de recompensas. Randolph Scott completa el ciclo de wésterns en los que fue dirigido por el mismo realizador, André De Toth, quien en esa producción consiguió el respaldo de la crítica y uno de sus trabajos más sólidos. He elegido este título para arrancar la selección de este mes porque cuenta con un prólogo que precisamente explica el papel del cazador de recompensas en el contexto legal de Estados Unidos.
Posteriormente, en Cazador de forajidos, coprotagonizada por un Anthony Perkins al que todavía le quedaban tres años para convertirse en el Norman Bates de Psicosis en el papel de aprendiz de un cazador de recompensas al que da vida Henry Fonda. Su director, Anthony Mann, la calificaba como película pasable y se quejaba de no ser del todo libre para desarrollarla, pero se ha convertido en un pequeño clásico de culto que sigue siendo descubierto por los aficionados al género. Espero que algún lector llegue hasta ella a través de este coleccionable porque merece la pena descubrirla, y podría decir lo mismo del siguiente título incorporado a esta selección: El retorno del forajido, construido sobre otro duelo tan interesante como el de Cazador de forajidos, el sostenido por Anthony Quinn y William Conrad, que saltó de los papeles secundarios en el cine al estrellato televisivo interpretando a un detective en la serie Cannon. El premio para el cazador de forajidos, puesto en cuestión, es moral, no solo dinerario.
Se puede apreciar ya en la selección que el personaje del cazador de forajidos ha habitado en el wéstern clásico de Hollywood un lugar moralmente ambiguo, en tramas que son tanto más interesantes cuando se originan y desarrollan lejos de la épica convencional del cine del Oeste estadounidense de los años cincuenta. Personaje propicio a desarrollarse con una complejidad psicológica de la que no gozaban los héroes impolutos y caballerescos del cine del Oeste más convencional, camino que culmina en la fase crepuscular del género con el personaje protagonista de las dos versiones de Valor de ley incorporadas a esta selección en ficha grande y pequeña, el cazador de recompensas alcanza una nueva identidad en las producciones europeas de wéstern mediterráneo, también conocido como espagueti wéstern, principalmente merced a la Trilogía del dólar dirigida por Sergio Leone y protagonizada por Clint Eastwood, de la cual he elegido los dos ejemplos que me parecen más significativos en cuanto a secuencias protagonizadas por el cazarrecompensas sin nombre, pero con poncho, al que dio vida el actor: La muerte tenía un precio y El bueno, el feo y el malo.
En lo referido a las herederas o hijas del éxito de las películas de Leone con Eastwood, que sembró el wéstern mediterráneo de cazadores de recompensas, he añadido dos de las más destacadas interpretaciones del cazador de recompensas de la otra gran estrella del espagueti wéstern, Lee Van Cleef, que dio vida a John Corbett en El halcón y la presa, y al temible y siempre bien armado elegante y enlutado Sabata, personaje mítico del wéstern hispanoitaliano debutante en Oro sangriento, cuyo éxito dio lugar al nacimiento de numerosos imitadores que incluso le robaban el nombre en beneficio de la promoción engañosa en la cartelera. ¡No todos son el auténtico Sabata! Rechacen imitaciones… Pero no pierdan de vista al Sartana interpretado por Gianni Garko, que es tan interesante para el tema que nos ocupa como los cazarrecompensas estadounidenses del siglo XX a los que dieron vida Steve McQueen en Cazador a sueldo y Rutger Hauer en Se busca vivo o muerto.
Recomendación final: si quieren completar el mapa de cazadores de recompensas en el audiovisual necesitan ver una de las mejores series de wéstern televisivo: Wanted, que en España conocimos como Randall el justiciero, la serie que lanzó al estrellato a McQueen.
CARTEL-MANÍA CAZARRECOMPENSAS EN EL CINE
CAZADOR DE FORAJIDOS
The Tin Star
1957; Estados Unidos; Blanco y negro; Director: Anthony Mann; Guion: Joel Kane, Dudley Nichols, Barney Slater; Música: Elmer Bernstein; Fotografía: Loyal Griggs; Intérpretes: Henry Fonda, Anthony Perkins, Betsy Palmer, Michel Ray, Neville Brand, John McIntire, Lee Van Cleef, James Bell, Howard Petrie, Russell Simpson.; Duración: 93 minutos.
Rodada en VistaVision, uno de los formatos esgrimidos por Hollywood para competir con la televisión en los años cincuenta, es una de las películas menos recordadas, pero igualmente más interesantes de su director, Anthony Mann, al cual los aficionados al wéstern tienen más presente en la memoria por su ciclo de películas del Oeste protagonizado por James Stewart. Al contrario que aquellas, esta otra fábula se rodó en blanco y negro, pero mantuvo la profundización psicológica y la ambigüedad ética de los protagonistas que nutría de identidad propia a las producciones en color con Stewart.
El argumento gira en torno a un veterano cazador de recompensas, Morgan (Fonda), que llega a una pequeña localidad llevando el cadáver de una de sus presas para cobrar la recompensa, recibiendo automáticamente el rechazo de los habitantes del lugar. Solo el joven sheriff del lugar, Ben (Anthony Perkins), parece reconocer en Morgan un hombre capaz de enfrentarse al peligro, aunque claramente le reprocha que no haya traído vivo al delincuente.
Dejando al margen una subtrama romántica del personaje más joven con la hija del antiguo sheriff, que fue asesinado en el cumplimiento de su deber y no está dispuesta a quedarse viuda, el resto de la trama es una historia sometida a la fórmula del relato de iniciación del héroe joven siguiendo las enseñanzas de un veterano, un Luke Skywalker y Obi-Wan Kenobi de libro, pero con todo el peso que le otorgan las interpretaciones sólidas en el pulso de Fonda con Anthony Perkins.
Teniendo en cuenta el reparto, cabe decir que inicialmente el papel de Morgan estaba pensado para James Stewart, lo que sin duda habría acercado el proyecto más al ciclo de sus wésterns con Mann, pero la incorporación de Fonda le dio una profundidad más dramática al papel.
M.J.P.
CARTEL-MANÍA CAZARRECOMPENSAS EN EL CINE
LA MUERTE TENÍA UN PRECIO
Per Qualche Dollaro in Più
1965; España, Italia, Alemania; Color; Director: Sergio Leone; Guion: Luciano Vincenzoni, Sergio Leone, Sergio Donati; Música: Ennio Morricone; Fotografía: Massimo Dallamano; Intérpretes: Clint Eastwood, Lee Van Cleef, Gian Maria Volontè, Klaus Kinski, Panos Papadopulos, Aldo Sambrell, Roberto Camardiel, Ricardo Palacios; Duración: 132 minutos.
He obviado en la selección Por un puñado de dólares, película que arranca la Trilogía del dólar del director, porque el personaje se aleja del cazador de recompensas para entrar en la órbita del mercenario Yojimbo de Akira Kurosawa y el detective de la Continental de los relatos y la novela de Dashiell Hammett, siendo en esta película y la siguiente que reseño en esta selección, , donde Eastwood encarna de manera más pura al cazador de recompensas por antonomasia del wéstern mediterráneo.
