El cine de Quentin Tarantino
Reservoir Dogs. Con ella empezó todo, aunque antes había dirigido El cumpleaños de mi mejor amigo, que no sobrevive en su totalidad. Reservoir Dogs se estrenó el 21 de enero de 1992 en el Festival de Sundance creado por Robert Redford para servir como escaparate de las producciones del cine independiente, y ahora, desde la perspectiva que nos proporciona el paso del tiempo, podemos afirmar sin miedo a equivocarnos que es una de las películas más influyentes del cine de los noventa. Su sombra es tan alargada que todavía hoy se sigue manifestando en algunas películas y series del género policiaco. El propio estilo de Tarantino y lo que el público iba a esperar de él en sus trabajos posteriores quedó marcado por este largometraje que incluso ha tenido una especie de reboot no declarado con cambio de género hacia el wéstern en Los odiosos ocho.
En el momento de su estreno, la película hizo contener la respiración al espectador por la escena del corte de oreja y la violencia brutal, y las dos etiquetas se le quedaron pegadas a Tarantino durante el resto de su carrera. Pero merece la pena recordar que en realidad nunca llegamos a ver el corte de oreja propiamente dicho, lo que nos invita a valorar realmente la elaborada manera en la que el director manipula al espectador jugando con el fuera de campo y el sonido para que la parte más cruda de esa violencia brutal de la que se le acusa se fabrique en realidad en la mente del espectador merced a los espacios en blanco que él deja en su discurso cinematográfico.
Tras rodar dos películas con marcado protagonismo masculino, Tarantino rodó la que puede considerarse como el pistoletazo de salida para las mujeres como personajes más completos en su cine: Jackie Brown. La azafata/traficante/infiltrada que da título a la película es la primera de una lista de féminas interesantes y con protagonismo creciente en el cine del director a la que posteriormente se añaden tres féminas curiosamente asociadas al deseo de venganza: la asesina a sueldo de Kill Bill interpretada por Uma Thurman, la superviviente del exterminio de su familia
