Aunque René Frank opta por Konnopke’s Imbiss para una comida ligera, horas antes de la cena en CODA, no hay despiste posible: la ‘currywurst’ del puesto ambulante más antiguo de Berlín tiene muy poco que ver con su propuesta gastronómica, no porque sea ‘streetfood’ frente a un biestrellado, sino porque la suculenta salchicha sazonada con curry que sabe a gloria en la calle precede, en realidad, a un homenaje dulce de alto nivel.
Un sofisticado local’ —en la que, antes o después, podría entrar CODA— avalan a CODA, la casa de René Frank.