En Puede fallar. Economía y comunicación en 40 años de. democracia, el economista Andrés Borenstein y el periodista y consultor en comunicación Gabriel Llorens se animan a conjeturar que, además de políticas más o menos defectuosas, en los gobiernos de las últimas cuatro décadas hubo falencias serias a la hora de contar lo que se estaba haciendo, hacia dónde iba y cuáles eran los sacrificios. Frente al cierre de ciclo del último gobierno de Alberto Fernández y el inicio del de Javier Milei, los autores analizan qué se necesita para comunicar en este momento, cómo la tecnología impacta en la forma de tomar decisiones y qué lecciones se pueden aprender de lo sucedido en la historia.
¿Cómo comparan la situación que se vive hoy con las otras grandes crisis de los últimos 40 años?
Desde el lado económico no tengo dudas de que la peor crisis fue la de 2001, seguida de la híper, y esta probablemente sea una especie de medalla de bronce. Digo medalla de bronce porque soy relativamente optimista, pero esto no terminó. Lo que sí hay es un ambiente disruptivo en