ESTE ultimo mes, la vida de Ana Obregón ha dado un giro radical. Ahora sus días, y sus noches, giran alrededor de la pequeña Ana Sandra, con quien sigue en Miami, a la espera de finalizar los trámites burocráticos que la permitan regresar a España con ella.
Mientras, Ana aprovecha las mañanas para salir a pasear con su hija-nieta. Hacía mucho tiempo que no la veíamos empujando un carrito de bebé ni luciendo una sonrisa tan radiante que iluminaba su cara. “Llevo un