ARQUEOLOGÍA INVERSA
o se puede reducir brutalmente todo el abanico del potencial espiritual humano a creer que un dios existe o a creer que ese dios no existe. A menudo se, que tiene muchas similitudes con y que, en mi opinión, comparte la misma fuente). Hay muchos también entre los mayas. Por otro lado, el chamanismo amazónico y las religiones relacionadas de los valles del Nilo y del Misisipi nos dan más pistas. En particular, tanto si hablamos del salto visionario a la Vía Láctea y al inframundo que está por debajo de esta que realizan los chamanes tukanos bajo la influencia de la ayahuasca, como si nos referimos a los conceptos misisipianos acerca del camino de las almas, o al viaje egipcio a través del Duat, creo que la única conclusión a la que podemos llegar con el material presentado en los capítulos anteriores es que nos estamos enfrentando a un sistema complejo y sofisticado de ideas compartidas heredadas de algún ancestro remoto común. Y, al igual que se puede practicar la ingeniería genética inversa con nuestro ADN para tener más información de nuestros antepasados, también podemos hacerlo con el ADN cultural compartido por las religiones del valle del Misisipi y del antiguo Egipto para tener más información del carácter de la antigua religión predecesora que sobrevivió en ambos.
